Astrid:
- ¡Hipo...!
Astrid no aguanta y se sube a Tormenta, comienza a volar detrás de Hipo, la última compuerta de la Gran Sala ya se está cerrando. Queda un pequeño hueco para escapar. Fue difícil, pero al final Hipo y Desdentao lo logran, Astrid también consigue escapar detrás de él; Pero Estoico está muy enfadado.
Ya desde el cielo, Hipo y Astrid se dirigien hacia alta mar. Astrid está un poco confundida.
Astrid:
- Y bien... ¿Cuál es el plan?
Hipo:
- Tenemos que encontrar a Eret y convencerle de que nos lleve a ver a Drago.
Astrid:
- Oh, muy bien, ¡Estoy preparada!
Dice pensando en una lucha intensa y fuerte. Mientras tanto, en Mema:
Estoico:
- ¡Abrid las compuertas!
Bocón:
- Estoico, ¿Qué está pasando?
Estoico:
- Hipo... se ha ido.
Bocón:
- Ya le conoces, Estoico. Ese chico siempre se sale con la suya.
Estoico:
- Pues esta vez, no se lo permitiré. ¡Mocoso, Patapez, Chusco, Brusca! Id a buscar a mi hijo.
Todos:
- ¡A la orden jefe!
Estoico:
- Bocón, tu y yo los buscaremos con nuestros dragones.
Bocón:
- Claro, Estoico.
Los chicos salieron inmediatamente de allí con sus dragones. En alta mar, Hipo y Astrid al fin encuentran el barco de Eret y sus hombres.
Astrid:
- Esta vez, ¡Le daremos una lección...!
Hipo no dijo nada. Eret los vio venir y enseguida se preparó.
Eret:
- ¡Preparad las armas!, ¡Nos atacan!
Pero Hipo y Astrid sólo bajaron a los dragones en su barco. Astrid se disponía a atacarles con su hacha, pero se sorprendió al ver que Hipo la detuvo:
- Hola, Eret.
Eret lo miró muy extrañado y sorprendido.
Hipo:
- Qué bien que nos hemos visto otra vez.
Eret:
- ¿A qué habéis venido?
Hipo sólo dice con normalidad.
Hipo:
- Oh, sólo a qué nos lleves a conocer a tu jefe.
Eret:
- Te lo he dicho, ¡No le harás cambiar de opinión!
Hipo:
- Lo sé tranquilo, sería una tontería luchar para eso, así que... He decidido que nos entregamos.
Astrid:
- ¿¡Qué!?
Hipo al ver que la rubia iba a decir cualquier cosa ofensiva para ellos, la agarró del brazo y la arrastró hacia su calabozo.
Hipo:
- Sí, no se hable más; nos entregamos.
Hipo entra al calabozo con Astrid y lo cierra.
Hipo:
- Tenéis nuestros dragones a vuestra disposición, no será necesario ni que los encadeneis.
Astrid:
- ¿¡Este es tu plan...!?
Hipo:
- Ah, por cierto, a los prisioneros no se les permiten llevar armas, ¿No? Aquí, tenéis.
Hipo le entrega a uno de los hombres su Espada Dragón extensible.
Hipo:
- Ten cuidado, la parte de abajo tiene gas de un Cremallerus Espantosus.
Le advierte al ver que lo abre y sale el gas.
Hipo:
- Sí... Y luego explota.
Le explica al ver que les explota encima.
Eret recoge su espada extensible, y los mira muy extrañado y confundido.
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HTTYD II
FanfictionLA ORIGINAL★ Tras pasar cinco años en la Isla vikinga, cambian muchas cosas entre nuestros protagonistas. Se han hecho mayores, y eso les ha llevado a convertise en grandes jinetes de dragones. No podemos decir lo mismo de Hipo, ya que él, no sólo s...