HTTYD II

24- Familia unida

Mientas tanto, Hipo y Desdentao estaban en la guarida de los dragones, Desdentao estaba descansando en el suelo, hasta que dos bebés dragón, volaron hasta él para lamerle la cara.

Hipo:

- Bueno campeón, no podemos esperar a que Drago ataque este sitio. Debemos encontrarle primero. Desdentao no podía escuchar a su compañero, pues los bebés le estaban mordisqueando.

Desdentao:

- ¡Ruagg! (Molesto)

Los bebés se marcharon y al fin pudo estar tranquilo.

Hipo:

- Vámonos.

Pero de repente, una enorme mano le tapa la boca a Hipo.

Hipo:

- ¡Mm...!

Desdentao:

- ¡Ruag!

Desdentao se tranquiliza al ver que es Estoico.

Estoico:

- Despacio...

Hipo se libera.

Hipo:

- ¡No me lo puedo creer...!, ¿Cómo has entrado aquí?

Pregunta muy sorprendido.

Estoico:

- Igual que vamos a sacarte.

Hipo:

-¿Vamos?

Bocón:

- Todo despejado.

Dice desde la entrada de la cueva. Estoico le agarra el brazo a Hipo y lo lleva por la cueva.

Estoico:

- Desdentao, vamos.

El dragón le obedece.

Hipo:

- Eh, papá... Hay algo que deberías saber.

Estoico:

- Ya, ya... Cuéntamelo por el camino. Hipo:

- Es que no es de esas cosas que, "se cuentan por el camino" es... es más bien de esas cosas que hacen temblar la tierra.

Estoico:

- ¡Bah!, Una más para el montón.

Hipo:

P-Papá a parte de la mayoría de sorpresas que te doy... esta te va a gustar. T-Te lo prometo, pero tienes que tomártelo de forma delicada, así que-

Hipo se calla al ver que Bocón se detiene muy sorprendido en la entrada de otra cueva de hielo.

Bocón:

- Em... Creo que será mejor que pases tú primero. Ay, madre...

Dice alejándose y sentándose en una piedra. Estoico está perdiendo la paciencia. Saca su espada y se dispone a entrar.

Hipo:

- Emm, papá, ¿Podrías guardar la espada, porfa?

Pero al entrar los ojos de Estoico se abren más que los platos. No puede evitar quedarse de piedra. Al fondo está Valka, también lo ha visto. Estoico deja caer su espada, y se quita el casco vikingo, lo sostiene con las dos manos pegándolo al pecho.

Valka:

- Sé lo que vas a decir, Estoico. ¿Cómo he podido hacer esto?, estar alejada tantos años, ¿¡Y por qué no volví contigo!?, ¿Con nuestro hijo?, pues... ¿Qué señal tenía de qué podías cambiar?, ¿De qué nadie de isla Mema podía cambiar?

Estoico fue acercándose a ella lentamente, Valka se estaba poniendo nerviosa.

Valka:

- Lo intenté una y mil veces, pero ni tú ni nadie, me escuchaba.

Bocón:

- Por eso no me he casado nunca. Bueno, por eso, y otras cosas.

Le dice a Hipo, aunque no aparta la vista de sus padres.

Valka:

- Sé que te deje para que criases a Hipo tú solo. Pensé que le iría mejor sin mí...

Estoico se iba a acercando más a ella, y cada vez sus ojos estaban más mojados. Valka se estaba poniendo realmente nerviosa.

Valka:

- Hice mal... ¡Ahora lo veo!, pero... deja de ser tan Estoico, ¡Estoico...!

Valka retrocedió hasta quedar atrapada contra la pared de hielo.

Estoico se acercó hasta quedar en frente de ella.

Valka:

- ¡Venga!, grita, chilla, ¡Di algo...!

Estoico no parpadeaba, sus ojos estaban a punto de liberar lágrimas.

Estoico:

- Estás tan preciosa, como el día en el que te perdí...

Estoico puso su mano en la mejilla de Valka. Ella sólo pudo cerrar los ojos mientras sus lágrimas le recorrían la cara. Ambos se besaron casi llorando de la emoción de volver a estar juntos. Los dragones dd alrededor se alejaron un poco de ellos para darles intimidad. Hipo sonrió al ver a sus padres, ¡Unidos por fin!