George, no estás sólo. [Completa]

Un consejo complicado.

Era tiempo de pedir ayuda, si es capaz de hacerlo para lograr una venganza, debe hacerlo para despejar su mente y también sus sentimientos. No quería pedirle ayuda ni a Ginny ni a Hermione, la primera obviamente la odiaría por el simple de hecho de pensar en dejar a George y Hermione, a pesar de ser más blanda, también es más terca y duda que le guste la idea de considerar al hurón como un posible futuro incierto. Además, Luna es su mejor amiga y nunca la juzgaría ni aunque le gustara Ron, el que siempre ha sido más pesado con ella. Le dice a Harry que irá donde su amiga y que cuide a Teddy o que se lo encargue a Poppis por si quiere salir y cuando se asegura de que todo estará bien con su ahijado se dirige a la casa de Luna.

Aparece frente a ella y sonríe al ver cómo han replicado una copia exacta de su antigua casa, parecida a una torre de ajedrez gigante y esas plantas mágicas a su alrededor. Se encamina con decisión y toca el timbre siendo recibida por ella.

––Cass! ––Exclama su amiga con una sonrisa haciéndole un espacio para que pueda pasar. ––¿Qué haces aquí?

––Te he venido a ver. ––La guía por la cocina, pasando por una puerta para llegar a la sala de estar. ––Todo está muy bonito.

––Gracias, la hemos terminado hace un par de semanas. Ya se siente como casa.

––Es tu casa. ––Luna no dice nada, solo se sienta mirándola con sus grandes aires de sorpresa permanente. ––¿Y tu padre?

––Ha salido a realizar unos trámites para el Quisquilloso, volverá dentro de algunas horas supongo.

––¿Cómo se ha tomado que seas Premio Anual?

––Estaba feliz. ––Sonríe sirviéndole en una taza una especie de té que se encontraba en la mesa. ––Me ha dejado ayudarle a crear una nueva réplica de la diadema con él. Ya sabes, la de Rowena Ravenclaw. Bebe de esto, lo he preparado yo. –– Cassie toma la taza que parecía de cerámica con horribles duendes pintados en ella a mano, se la lleva a la boca algo dudosa de su sabor, aunque resultó tener un toque dulce y frutal bastante delicioso. ––Es de hierba venenosa. No te asustes, yo siempre la bebo. Tienes que prepararla de manera exacta para que solo quede picor en tu garganta luego de un rato.

––¿Y si la preparas mal?

––Te salen granos en la boca y garganta. Papá dice que eso hace bien para mejorar el habla, aunque yo prefiero sacármelos con una poción.

La pelirroja deja el extraño brebaje sobre la mesa algo preocupada y mira a Luna quien parecía tener la mirada sobre la nada, típico de ella. Se aclara la garganta algo nerviosa y la ojiazul le presta atención con curiosidad.

––Necesito ayuda.

Esta vez su amiga se pone seria y algo alarmada. ––No estarás pensando en hacer algo estúpido de nuevo. ¿O sí?

––No... ––Murmura avergonzada, es la primera vez que le reprocha sobre sus antiguas andanzas. ––Es sobre George...

––Ya veo. Solían ser una linda pareja, recuerdo cuando solían molestar a Zacharias Smith en las clases del ED. Era muy divertido verlos juntos, siempre estaban riendo y jugando.

––¿Ah sí? ––Susurra Cassie mientras las lágrimas se arremolinan en sus ojos intentando que los recuerdos no emerjan sin mucho éxito. Era extraño escuchar de su relación desde otra perspectiva, no está muy segura de querer escuchar lo que viene a continuación.

––Sí, está bien que llores. Aunque ahora ya no son lo mismo, en realidad ya ni siquiera es bonito verlos. Siempre tensos e hirientes el uno al otro, porque si te soy sincera Cass, a veces tú lo tratas mucho peor.

––Eso es mentira. ––Murmura secando sus ojos y mirándola con enfado. ––él me ha tratado mucho peor.

––No, Cass. ––Luna habla con calma, lo que empieza a exasperarla pero se controla. ––Ha sido mutuo, sí. Sin embargo, en las actitudes que he visto, tú has demostrado ser más cortante, fría e hiriente con él. Pero siguen queriéndose, eso se les nota también. Aunque ya no se lo demuestren como antes,

––Ya no nos queremos como antes. ––Dice negando con la cabeza.

––Sí, si se quieren como antes. No por algo George casi pierde la cabeza cuando te secuestraron, o tú no has perdido la oportunidad de hacer algo por él. Como su nueva habitación y todos esos pequeños detalles durante este tiempo. Además, no vienes aquí a hablar de George ya que como he dicho, lo amas. Y lo sabes. Vienes a hablarme de Draco.

Cassie abre la boca sorprendida, la verdad es que esperaba que Luna fuera menos directa, pero Luna siempre ha tenido esa capacidad de decir la verdad sin pelos en la lengua. Asiente despacio y la rubia suspira pensativa mientras un nuevo miedo surge en su interior. Ahora ya no sabe si quiere realmente conocer sus verdaderos sentimientos con respecto a Malfoy.

––Me ha dicho que si voy a Hogwarts elijo estar con él, juntos de verdad.

––¿Qué sientes por él? Los he visto, te pones nerviosa a su lado y lo defiendes de Ginny y de Ron. Pero, no estoy segura de que sea lo mejor para ti. Aunque claro, es solo mi opinión. En realidad, a mí me cae bien. Se ve distinto a todos los otros años de Hogwarts donde no era muy buena persona.

––Sí, es verdad. Ha cambiado. ––Muerde su labio nerviosa. ––Y no sé, creo que me gusta. ––Se tapa la boca con las manos al decirlo en voz alta.

––Yo creo que están confundidos los dos. Tú le devolviste su apellido y a cambio, él te ha ayudado con todo lo que te pasó. A decir verdad, fue muy fuerte lo que te ha tocado vivir en este último tiempo y es la primera vez que te pasa, siempre había sido Harry. Y eres lo primero que Draco hace de manera autóctona, ya sabes, siempre ha tenido que seguir una línea de comportamiento predeterminada por sus padres.

––¿Qué quieres decir con esto?

––Que ambos creen sentir algo que no es real, que es producto de una fuerte vivencia en común y por primera vez, ambos han podido ser los protagonistas y no el hijo de o la hermana de. ¿Me entiendes?

––Luna... ¿Y si fuera real? ¿Si me fuera con él? Al menos ambos sabemos que si nos vamos juntos sería por algo, en cambio si me quedo... aunque ame a George, las cosas no son como antes y tal vez nunca vuelvan a ser igual.

––No lo serán. Si te quedas, van a tener que darse un tiempo de verdad. Sin dramas, sin peleas. Ambos tendrán que esperar hasta que estén listos para volver. Y si te vas con Malfoy, vas a tener que aguantar muchas cosas. Prejuicios, chismes, a sus padres y él a los Weasleys quienes han sido como tu familia. ¿Te lo imaginas? Al padre de Draco intercambiando conversación con el padre de Ginny. Ninguna de las dos opciones te asegura algo. Tendrás que creer y elegir con calma, no apresuradamente. Pero ten en cuenta solo una cosa y la más importante.

––¿Cuál es esa? ––

––Debes pensar en lo que vas a perder, que es lo que menos te gustaría perder. Además, por lo que amas, debes renunciar a lo que más quieres.

Miraba el techo pensativa. A decir verdad, la conversación con Luna no la ha dejado más tranquila, es más, todo lo contrario. Sigue sin saber qué hacer. ¿Qué es lo que más le dolería perder? Si no se lo piensa dos veces, claramente su respuesta es George. Pero Luna le ha dicho que se tome las cosas con calma y si se pone a pensar los detalles, no está segura de que le dolería más. No es justo para ella lo que le está pasando, no debería ni siquiera estar pensándolo. Y sin embargo ahí está, pasando su noche en vela en una decisión muy difícil. No puede sino que sucumbir en llanto hasta quedarse dormida.