Amor de Verano

Epílogo / Continuación

Diez años después...

Lucy

Lo amé pero ya no aguanto más. Habernos mudado juntos realmente me hizo darme cuenta de que lo nuestro no va a funcionar.

Me cansé de no ser su prioridad, o al menos algo significante en su lista de prioridades.

Lo miro a los ojos y se me parte el corazón, una vez más, porque de verdad pensé que lo nuestro sería duradero.

Sé que es el final, hace semanas que lo supe, pero por más consciente que esté de ello, eso no quita que me sienta terrible.

- Iré a dar un paseo mientras terminas de empacar...- suspiro bajo su atenta mirada. - Sabes que no tienes que irte hoy mismo...-

- Lo sé... Pero creo que será lo mejor para ambos.- responde con esa voz tierna que tanto adoré durante estos años.

- De acuerdo, supongo que nos veremos en algún momento...- me acerco a la puerta de nuestro departamento, lista para huir. - Adiós, Paul.-

- Adiós, Lucy.-

Sin mirar atrás, salgo de allí hacia el ascensor. Me permito llorar todo el camino hasta la salida del edificio, donde me obligo a secar mis lágrimas.

Camino hasta el parque más cercano. Necesito aire fresco.

Me siento en un banco junto al arenero donde hay algunos niños jugando. Y yo que creía que para esta edad ya tendría al menos un hijo, aquí estoy, sola otra vez. Una lágrima rueda por mi mejilla pero rápidamente la limpio. No lloraré, se que puedo seguir adelante.

Suspiro, todavía temblando por dentro, mientras observo cómo el cielo se torna anaranjado.

- ¿Luce? ¿Eres tú?-

Y así, es cómo mi corazón deja de latir.

Volteo mi rostro y me encuentro con él. Mi primer amor, sonriente y encantador como siempre.

- La misma.- respondo y antes de que reaccione, Blake se sienta a mi lado con su imborrable sonrisa.

- Serás tú, pero no la misma. No recuerdo haberte visto tan triste desde...- se corta a sí mismo porque sabe que lo que dirá no es nada digno de recordar.

Hago una mueca, aún conteniendo mis ganas de llorar. No puedo creer que esté aquí.

- ¿Qué te trae por aquí?- cambio de tema y me dedico a verlo detenidamente.

Sus rasgos son aún más definidos, quizás esté más delgado o enfermo. Pero su rostro sigue siendo perfecto, sus ojos misteriosos con sus labios rosados rodeados de un poco de barba.

- Necesitaba despejarme y creo que June también.- dice con esa voz con la que a veces creo soñar.

Inmediatamente, giro mi rostro hacia los juegos del arenero.

- ¿Ella está aquí?- pregunto emocionada aún en busca de su cabellera rubia.

Como por arte de magia, la niña aparece en mi campo de visión y al verme tan cerca de su papá, prácticamente corre hacia nosotros.

No puedo evitar sonreír abiertamente, ha pasado tanto tiempo desde que la vi por última vez.

- Joder, esa niña es perfecta.- susurro haciendo reír a Blake quien la mira con amor puro.

- Sin malas palabras frente a la niña, Bennett.- me regaña antes de guiñarme un ojo y poner su atención en su hermosa hijita.

- ¿Qué sucede, princesa?- la pequeña de ojos oscuros no responde, solo me mira mientras abraza a Blake. - No recuerdas a Luce, ¿cierto? Eras muy pequeña como para acordarte.. pero ella es amiga mía y del tío Luke. -