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Lucy

Toda la semana se me pasó en piloto automático.

Entre el trabajo y todos los estudios médicos que me estuve haciendo, he llegado exhausta al viernes por la noche.

Ahora estoy en casa, esperando a Blake, que fue a dejar a June con su mamá por el fin de semana.

Estando sola, todo se siente más intensamente. La tristeza, la ansiedad, la impotencia.

Mientras me recuesto en el sofá a mirar una película, me permito llorar una vez más.

Justo cuando pensé que todo iba a salir bien, las vueltas de la vida vuelven a jugarme una mala pasada.

Durante mucho tiempo me estuve imaginando lo que sería ser mamá, anhelando tener a alguien que sea parte de mí, con quien compartir mi vida incondicionalmente. Por eso ahora la sola posibilidad de no poder cumplir con ese deseo me destruye.

Supongo que todo era demasiado bueno como para ser cierto.

- ¿Luce?- la voz de Blake me sorprende.

Seco mis lágrimas rápidamente y volteo a verlo cuando entra en la sala.

- Hola, amor.-

Por más que intento sonreír, su semblante se vuelve serio cuando enfoca la vista en mí.

- ¿Estás bien?-

Palmeo el lugar vacío a mi lado para que se siente y él lo hace, inmediatamente rodeándome con sus brazos.

- Sí, estaba viendo una de esas películas bobas que me hacen llorar...-

Mi hombre no parece muy convencido con mi respuesta, sin embargo no dice nada y solo se queda conmigo en el sofá un rato más.

- ¿Estás emocionada por la exposición de mañana?- me pregunta con interés.

Asiento y giro para verlo de frente.

- Sí, emocionada y nerviosa, irá mucha gente según me dijo Edmund.-

La exposición será en la galería de Edmund Marlon, quien amablemente decidió poner una de mis obras a la vista del público. Me encanta que todos puedan ver mi cuadro y a la vez me aterra que a las personas no les guste lo que hago.

- Lo que haces es asombroso, Luce. A todos les encantará, créeme.- 

Estiro mi mano para acariciar su rostro y él cierra los ojos, suspirando profundamente.

Cuando vuelve a abrirlos, su mirada me analiza con incertidumbre.

- ¿Qué sucede?-

- Estuve pensado en algo, pero no sé si estarás de acuerdo con la idea...- habla cauteloso mientras acaricia mis piernas descuidadamente. 

- Dime...-

- Pensé que podríamos invitar a tu medio hermano a la boda...-

- No hablas en serio.-

- Sí, tal vez sea una buena oportunidad para conocerlo y finalmente averiguar más sobre tu padre... Creo que te haría bien.- 

- No lo creo, cielo. Estaremos ocupados como para conocerlo y no sé si pueda soportar otro problema justo ahora...- suspiro pesadamente y él me observa comprensivo. - Además aún no sabemos cuándo será la boda, si es que todos los estudios se ven prometedores...-

- Luce..-

- No..-

- Sí, tienes que entenderlo. No pienso dejarte por nada del mundo.-

Amor de Verano Donde viven las historias. Descúbrelo ahora