🎶 SongFic 🎶 Chankai [Exo]

Born To Be Yours

Artista: Imagine Dragons & Kygo
Palabras: 964
Advertencia: Ninguna.

Park Chanyeol es cazador. No hay más que decir de su vida. Desde pequeño acompañaba a su padre a la profundidad del bosque para colocar diversas trampas y atrapar pequeños animales como conejos o liebres, mapaches, aves, etc. Cuando era adolescente su padre le permitió "subir de nivel" podía usar su amado rifle, le permitía dispararle a venados, osos y demás.

Siempre volvía a casa con un gran animal en su espalda y obtenía una gran sonrisa de orgullo de su padre, su madre había muerto un año después de tenerlo, un golpe duro para su joven padre que decidió internarse en el bosque y construir una vida allí con su amado hijo, el único recuerdo que le quedaba de su bella esposa.

-A mamá no le gustaría esto...

-¡¿Y tú qué sabes?! ¡Nunca la conociste!

La primera discusión surgió a los trece años cuando salió a cazar y lo único que vio fue un ciervo bebé acompañado de su madre, obviamente no fue capaz de dejarlo huérfano, volviendo a casa con las manos vacías y escuchando un gran sermón sobre supervivencia, explotaron todas las emociones retenidas durante su corta vida. Al final no pudo discutir o desobedecer al hombre que se había esforzado en criarlo solo y le había brindado todo el cariño posible.

-Hoy iremos juntos...

Asintió sin ánimo. Ya había cumplido los veinte años pero no se atrevía a dejar a su padre solo en aquel bosque tan alejado de la civilización, cada uno empacó su maleta con provisiones, mantas, balas extra y lo que considerarán necesario para el viaje. Salieron con el amanecer y revisaron las trampas que habían puesto unos días antes, apenas encontraron algunos conejos que guardaron para alimentarse más adelante o colocarlos de carnada para algo más grande.

-Deberíamos acampar, papá...

-Aún no ¡Sigamos!

Suspiró y continuó tras aquel viejo hombre tan testarudo, la noche estaba cayendo y la visibilidad era casi nula, conocía cada parte del bosque pero esta vez era diferente. Se estaban internando en la montaña, el único lugar que tenía prohibido por el mismo hombre que ahora lo estaba guiando a su interior, intentó no pensar en razones para que su padre hiciera eso.

-Lo siento...

Miró la gran espalda frente a él sin entender, su padre se dio la vuelta quedando frente a frente y lo golpeó, lo hubiera esquivado con facilidad pero no esperaba un ataque, mucho menos de su propio padre. Sintió como su cabeza se humedecia y poco a poco se mareaba, cayó mirando las viejas botas de su padre y cerrando los ojos aún sin entender lo que sucedía, era su padre ¿Por qué le hacía eso?

Despertó seguramente al otro día o noche, después de todo la luz de la Luna iluminaba su cuerpo entero y un poco de su alrededor, estaba en una cueva, amarrado de pie a un gran tronco, su padre estaba de espaldas a él preparando algo pero no alcanzaba a distinguir lo que hacía. Tal vez se debía al mareo, el dolor de cabeza o la sangre manchando sus ojos pero vio algo moverse entre las sombras, era grande y podría jurar que peligroso.

-¡Papá, papá, papá!

Gritaba desesperado pero el hombre frente a él ya no era su padre, era solo un desconocido entregado a su profesión, era un cazador que lo estaba usando de carnada. El problema residía en ¿Qué estaba cazando? ¿Por qué usar a su propio hijo de carnada? Dejó de pensar al ver nuevamente movimiento en las sombras, era algo inmenso tal vez de dos metros, no era gordo pero parecía tener gran fuerza. Escuchó un rugido, que hizo eco debido a la cueva, causando que cerrará los ojos con miedo.

-¡No! ¡Ah! ¡Él es el sacrificio! ¡Yo no...

Abrió los ojos con temor pero solo consiguió ver un charco de sangre donde antes había estado su padre, miró a su alrededor sin saber lo que buscaba, sintió un escalofrío y como su respiración parecía fallarle. Algo salió de entre las sombras, tenía pelo marrón y áspero cubriendo cada parte de su cuerpo, más largo en la cabeza como cabello y una especie de barba. Sus brazos tocaban el suelo y de sus largos dedos goteaba sangre.

-¿Qué eres?

Su voz apenas si era audible pero al parecer la extraña criatura si había logrado escucharlo, se acercó a él demostrando su poderosa altura, cerró los ojos al tener aquel peludo rostro tan cerca, se sobresaltó al sentir como olfateaba su cuello. Después de breves segundos ya no se sintió en peligro, misteriosamente abrió los ojos y bajó la mirada al no encontrar a la criatura arriba, lo que vio debía ser algo imposible.

-Sabes, si quieres vengarte por la muerte de tu padre... Puedes hacerlo, pero viendo lo que planeaba hacer contigo diría que te salve...

Definitivamente no esperaba algo así. Un chico desnudo, normal, con piel más morena que la suya, ojos negros, cabello platinado, voz dulce y labios gruesos, estaba hablando despreocupado frente a él mientras lo desataba. Chanyeol cayó arrodillado sosteniendo su cabeza sin saber lo que era la realidad, levantó la vista para fijarla en esos oscuros ojos que lo miraban con curiosidad, su mente se perdió durante minutos y su cuerpo dejó de temblar entrando en una tranquilidad inesperada.

-Eres... Eres hermoso...

Eso pareció sorprender al chico, quien abrió los ojos asombrado y se alejó varios pasos de él, Chanyeol estiró la mano con la intención de tocarlo pero este rápidamente tomó aquella poderosa forma y desapareció en las sombras, cubriendo cada huella con la oscuridad. Tal vez si estaba soñando, ya que todo lo que había sucedido parecía imposible pero un rugido en la lejanía lo sacó de su estado irrealista, no había sido un sueño y esperaba poder encontrarlo de nuevo.