Capítulo 21

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DoYeon se inclinó hacia adelante con el bolígrafo en la mano y firmó el acta de matrimonio que estaba sobre la mesa, se enderezó y con nerviosismo le sonrió al juez, giró el rostro hacia su derecha y fue el turno de MinKi.

Sus corazones estaban latiendo con desenfreno, la adrenalina recorría por sus cuerpos al estar viviendo un momento tan importante en sus vidas, en su relación como lo era estar casándose.

Parecía dos adolescentes que habían huido de sus casas, que se amaban pero sus familias no le permitían estar juntos pero no era así, ellos decidieron que esa noche fuese suya.

Caminaron por el jardín después de haber formalizado la unión con la que habían soñado, bajo la luz de la luna y con una suave melodía de los violines que sostenía uno de los músicos que alcanzó a llamar DoYeon se detuvieron en el césped, el azabache se dio la media vuelta y guió las manos de MinKi hacia su cuello, sus manos bajaron por los costados del menor hasta llegar a su cintura, dio un paso hacia adelante y comenzaron a moverse lentamente sobre una nube bajo sus pies.

—Siento que viví esto antes —Comentó MinKi cuando DoYeon lo levantó para que pusiera los pies sobre los suyos.

—En nuestro baile de graduación en el hospital —Recordó el mayor recorriendo con sus manos la espalda del menor.

—Sí —Sonrió escondiendo el rostro en el cuello de su esposo, sintiéndose extrañamente emocionado al pensarlo, ahora DoYeon era su esposo, después de haberlo conocido en el instituto, después de haber terminado con él al enterarse que el cáncer había despertado de nuevo, después de haberlo visto graduándose de medicina, después de miles de momentos juntos, era su esposo, estaban oficialmente casados —Cuando llegaste a media noche y me encontraste coloreando, hiciste a un lado todo para que me levantara y no pudimos bailar bien gracias al porta sueros.

—Te veías tan precioso como te ves hoy —Elogió el mayor y supo que MinKi se sonrojó cuando hizo más firme el agarre en su cuello.

Esa noche le entregaron al otro la llave de sus corazones para que pudiesen abrirlo cuando estimaran necesario, se susurraron palabras llenas de amor, promesas que no se las llevaría el viento, quedarían allí, y sus labios probaron los besos de una nueva etapa.

—Me comprometo que siempre buscaré la forma para decirte lo que pienso y siento —Habló DoYeon mirando fijamente los ojos de MinKi, tenían un brillo peculiar y llamativo —Y daré todo de mí para buscar una solución juntos a cada problema que debamos enfrentar como matrimonio. Eres la persona con la que quiero caminar toda mi vida, bajo el sol y bajo la lluvia, entre las sombras y la luz, por siempre y para siempre.

—Me comprometo a no poner el trabajo antes que mi familia —Acarició la mejilla del mayor mirándolo con dulzura —Mi familia —Repitió con una sonrisa —La que estamos formando juntos.

—Me comprometo a amarte hasta que los latidos de mi corazón dejen de escucharse.

—Te amo y te amaré hasta que muera, y si hay una vida después de esta te amaré también entonces —Soltó una risita y cerró los ojos al sentir los labios de DoYeon sobre los suyos.

Era imposible que tuviesen una boda común, su relación no era como la del resto, pasaron gran parte de su romance en un hospital, siempre rodeados de médicos y enfermeros, de tratamientos y exámenes.

Tal vez no quisieron perder esa costumbre.

Se casaron cerca de navidad, en una época única y llena de amor, solos, sin invitados y sin una celebración entre copas de champaña y brindis de sus familiares o amigos.

Pero para ellos había sido el mejor día de todos.

DoYeon no recordaba haberse sentido tan pleno, tan tranquilo y feliz, MinKi era su complemento, cuando lo besaba con ternura sentía que había nacido destinado a encontrarlo.

Sentía que no había sido casualidad que en el instituto aceptase ir a una fiesta, tampoco que él le llevara una manta porque sabía lo que iba a ocurrir en aquella casa.

No había sido casualidad que se enamoraran.

Cuando estaban juntos el mundo entero desaparecía y si eso no era magia, se le parecía mucho.

JiCheol ♡ Amorterapia III: Merry Christmas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora