JiCheol ♡ Amorterapia III: Merry Christmas.

Capítulo 23

Entre risitas nerviosas y besos fugaces MinKi y DoYeon entraron a la casa de la familia Choi, el castaño dejó las llaves en la mesa que estaba junto a la puerta y rodeó el cuello del mayor uniendo sus labios, DoYeon lo hizo caminar hacia atrás mientras se besaban y reían sin motivos, estaban así desde que se bajaron del vehículo.

Completamente embriagados de amor.

Una tos falsa los detuvo, MinKi se giró hacia la sala, sus padres y abuelos los estaban esperando, entendía el motivo, se quedó afuera de casa sin avisarles y no solía hacerlo, tampoco estaba en la fundación y había apagado el móvil al llegar al departamento de su esposo, esa mañana cuando lo encendió tenía más de cien mensajes y llamadas perdidas.

Pero nada de eso le quitó la sonrisa de los labios y a DoYeon tampoco a pesar de querer disimularlo bajando la cabeza.

JiHoon miró las manos unidas de la joven pareja y se levantó del sofá.

—Antes de que nos regañen tenemos una noticia importante que darles —Su sonrisa se agrandó y giró el rostro hacia DoYeon.

El mayor se inclinó hacia abajo dejando un rápido beso en los labios de MinKi y levantaron sus manos enseñando las argollas de matrimonio.

—Nos casamos —Anunció DoYeon preparado para los ataques y golpes que posiblemente recibiría.

—¿Cómo que se casaron? —Preguntó la anciana colocando las manos en su cintura, mirando a DoYeon con el ceño fruncido, los abuelitos de MinKi lo asustaban más que el mismísimo SeungCheol, por alguna razón sentía que no lo querían.

—Ya debes saber cómo es, abuelita —MinKi caminó hacia ella con una sonrisa, achinando sus ojos —Aceptamos y firmamos el acta frente a un juez.

—¿Acaso planean matarnos y quedarse con la fundación? —Exclamó SeungCheol espantado, quería pensar que todo era un sueño. Se sentó en el sofá y toco su frente, iba a desmayarse en cualquier segundo.

—Espero que sea una broma —Agregó el señor de edad —Todos los preparativos estaban listos y a este mocoso se le ocurrió cancelar la boda, rechazando a mi nieto.

—Cometí un error —Explicó DoYeon —Estaba asustado con la idea de casarme y no poder cumplir las expectativas que MinKi podría tener, estos días me sirvieron para pensar y reafirmar mi pensamiento de que no puedo vivir sin él, y por supuesto MinKi me ayudó.

—Los dos cometimos errores —Agregó el menor volviendo al lado de su esposo quien rodeó su cintura con un brazo —Pero estamos y estaremos juntos porque nos amamos y esperamos que nos apoyen en esta nueva etapa.

JiHoon sonrió ligeramente al escuchar a su hijo, MinKi era maduro para su edad a pesar de cometer errores y en ocasiones ser un niño pero podía ver la seguridad y determinación en su mirada.

DoYeon era un caso especial, siempre era seguro, demasiado en algunos momentos y mostró una inseguridad que consideraba normal, tal vez hubiese sido mejor que se lo dijese a MinKi con otras palabras pero fue su manera de hacerlo y no lo podían castigar por ello.

Como hubiesen ocurrido los hechos, ellos se complementaban y sabía que terminarían juntos.

Se acercó a la joven pareja y los abrazó —Felicidades, espero que sigan amándose tanto como lo han hecho hasta este momento y logren hablar y solucionar cada problema que tengan en un futuro, nunca se olviden qué los unió.

MinKi buscó la mirada de SeungCheol, el pelinegro lo miró de reojo y terminó levantándose para enfrentar a DoYeon —Espero que por tu bien logres apreciar lo que tienes a tu lado.

—Mi amor —Regañó JiHoon.

SeungCheol miró a su hijo, lo conocía como a la palma de su mano, era feliz, se le notaba en los ojitos y a DoYeon lo consideraba un hijo más, uno que podía dudar y se podía equivocar pero siempre lo iba a querer, aunque no lo dijera —Lo mismo para ti, DoYeon es un gran chico, aprécialo y cuídalo mucho.

—¿Abuelitos? —MinKi se dirigió a los mayores.

—Ya qué —Habló el anciano.

—¡Cariño! —Regañó la señora Lee y tomó las manos de su nieto, balanceándolas, MinKi era todo para ella, desde que lo conoció en una sala de hospital quiso resguardarlo entre sus brazos y merecía ser feliz —Detesto que no nos permitieras ser parte de un momento tan especial como era tu boda, no podré guardar las fotografías de ese día y tampoco recuerdos de ella.

MinKi sacó de su bolsillo la pareja de novios que habían colocado encima del pastel —No es mucho pero pensé en ti cuando los vi.

A la mujer se me humedecieron los ojos y abrazó al menor —Siempre me tendrás para ti, en cada paso que quieras dar estará tu abuelita dándote ánimo.

—¿Abuelito? —MinKi estiró la mano hacia el hombre quien observaba a DoYeon con el ceño fruncido —Me hace muy feliz.

—Lo sé —Habló el anciano —Pero apoyaré a SeungCheol si quiere acabar con él.

—Gracias suegro —Dijo el mencionado.

—No me digas suegro.

El señor Lee abrazó a MinKi completando su felicidad, al tomar distancia se dio la media vuelta, sus padres estaban juntos, abrazándose, sus abuelos se tomaron de las manos y él se acercó a DoYeon, levantando los talones a la misma vez que sonreía —Bienvenido a esta loca familia.

—¿Nos acaba de decir locos? —Preguntó SeungCheol en voz baja.

—Hay que celebrar —Dijo el señor Lee dirigiéndose hacia la cocina —Espero que tengan alcohol aquí en casa porque quiero emborracharme.

—Papá, no puedes beber —JiHoon lo siguió.

—¿Tienen de esos bombones con frutilla dentro? —Preguntó la anciana caminando junto a SeungCheol, el pelinegro pasó el brazo por sus hombros.

—Claro que sí, suegra.

—No me llames suegra.

MinKi y DoYeon soltaron una risita, se miraron a los ojos y movieron sus narices antes de fundirse en un beso lleno de amor.