Ese día había sido como cualquier otro.
El trabajo había sido estresante demasiados papeles que firmar y bueno una caminata cerca de su casa para alejarse del estrés no hacía mal; muchas personas saldrían a un bar a ahogar sus penas por ser un alfa sin omega de veintidós años con una empresa sorprendentemente exitosa, pero él prefería trotar por un parque cerca de su casa.
Veía a algunos niños jugar con burbujas o parejas que demostraban muy gráficamente su amor. Arrugo la nariz siguiendo su camino.
Sintió su teléfono vibrar en su bolsillo haciéndolo desconcentrarse. Lo saco mirando el nombre.
Rodó los ojos atendiendo la llamada que aseguraba no era para nada importante.
- Buenas tardes jefecito – habló Zayn.
Su mejor amigo y asistente al otro lado de la línea, era un alfa igual. Como había pensado no era para nada importante.
- ¿Qué quieres? – preguntó toscamente bajando el ritmo de su paso hasta caminar de nuevo.
Escuchó un alarido de indignación al otro lado de la línea.
- ¿Así es como tratas a tu sexy y hermoso asistente? – preguntó.
Lo veía claramente colocando a mano en su pecho.
- El asistente el cual lo encontré besuqueándose con mi socio Liam – se burló sonriendo victoriosamente.
- Por eso estás solo, Styles – soltó y antes de que pudiera responderle la llamada se colgó.
Frunció el ceño restándole importancia.
No creía haberle dicho algo que lo hiciera molestar, más bien apoyaba su relación con su socio este era un beta diferente a los que conocía su actitud era imponente y fanfarrona, pero al parecer el castaño no aceptaba aun que él supiera la existencia de la relación.
Guardó su celular saliendo del parque dispuesto a volver a su auto el cual estaba aparcado en un supermercado. Iba distraído silbando una canción mientras buscabas las llaves del coche cuando su mirada se desvió a un pequeño bulto peludo cuando lo escucho maullar confirmo que era un gato muy peludo.
Él sin duda amaba a los gatos.
Se acercó al felino intentando tocarlo este se hizo más un ovillo.
- Tranquilo no te hare nada – dijo en tono suave. Se sorprendió cuando lo tocó y el gatito rápidamente levanto su mirada llevando sus ojos azul cielo a los suyos se le hacía raro que un gato como un Ragdoll estuviese en la calle ya que ellos generalmente pertenecían a personas adineradas, no lo podía dejar allí en ese suelo frio y sucio - ¿te gustaría venir conmigo a casa? – pegunto acariciando su cabecita escuchando como ronroneaba – tomare eso como un sí, aunque no creo que a Cecil le vaya a agradar la idea de tener un gato rondando por la casa.
Lo pensó mejor. Su mucama era muy estricta con eso de mantener la casa limpia, pero al fin y al cabo no podía decirle nada a él.
Tomó a la bola de pelos llevándolo a su auto este se dejó cargar dócilmente. Se subió al coche dejándolo en el asiento de copiloto. Se veía muy descuidado supuso que en su hogar no lo cuidaban como se debía.
Dejó de darle vueltas al tema y puso en marcha el auto dirigiéndose a su casa. Había notado que el gatito se había mantenido tranquilo creía que se había dormido hasta que este giro sobre su cuerpo quedando de panza haciéndolo reír. Era demasiado dócil cuando hacía a acariciarlo él ya estaba boca arriba esperando.
Cuando llegó a su casa y estaciono el auto, lo bajo igual en sus brazos sintiendo lo calientito que era. Abrió la puerta con dificultad pensando en que cualquiera que lo haya visto subir al gato a su auto habrá de pensar que era un loco fanático de los gatos y lo era, no loco, solo fanático, aunque nunca se había permitido tener uno. Siempre estaba muy ocupado y no creía que el animal sobre viviera sin sus cuidados.
- Buenas tardes, Cecil – anunció esperando a que la beta se presentara en la entrada de la casa.
Lo acompañaba desde hace dos años era su consejera y amiga casi una madre para él. Dejó a Louis en el suelo quien se estiro bostezando era demasiado adorable. El felino se sentó mirándolo.
- Buenas tard- las palabras quedaron en su boca cuando guió la mirada hacia la pequeña bola de pelo que, veía atentamente a Harry – no preguntare, ni me opondré, solo diré que pobre la suerte del animalito, él no tiene la culpa de haber caído en sus manos.
- Él no morirá – murmuro con algo de molestia dejando las llaves de la casa y de su auto en una mesita a un lado de la puerta – ahora por primera vez cuidare de alguien que no sea yo.
- Vamos a ver que tan bien le sale eso – murmuro Cecil girando sobre sus talones para salir de esa parte.
Se colocó de cuclillas frente al felino que se encontraba mirando todo calmado moviendo sus grandes ojos azules.
- Creo que mañana te llevare al veterinario y luego buscamos tu hogar - el gatito retrocedió encogiéndose en su lugar – bien... supongo que esa no es tu idea favorita – bufó levantándose dejando que el felino lo siguiera libremente.
Le arregló un lugar en una de las habitaciones con algunos periódicos. Le pidió a Cecil que le sirviera un poco de leche tibia e intento hacer todo lo más cómodo posible.
Cuando se aseguró de que no se saldría de la que ahora sería su habitación la cual iría llenando con cosas para él se fue a la suya. Estaba feliz de tener más compañía que no fuera Cecil y su soledad al menos ahora algo rondaría por esa casa tan grande y la llenaría con maullidos.
Caminó hacia el comedor cuando Cecil lo llamó anunciando que la cena estaba lista, no sin antes irse a cambiar por su pijama. Comió tranquilamente su cena mientras revisaba su teléfono ignorando que ahora si se encontraba solo en la mansión ya que la mujer que lo acompañaba se había ido a su propia casa. Cuando llevo su plato al lavavajillas en la cocina se sobresaltó al ver a Louis en uno de los taburetes de la cocina.
- ¿Qué haces aquí, traviesillo? – preguntó acariciando su cabecita. Caminó al refrigerador sacando una jarra de jugo sirviéndose en un vaso mirando de reojo a su gatito que pasaba una de sus patitas por su rostro – creo que no te sientes cómodo solo – supuso cuando termino de tomar su jugo guardando todo – como yo, así que te puedo dar un baño y duermes conmigo, tenía planeado hacerlo mañana, pero dadas las circunstancias.
- Miaw – lo escucho maullar.
- Tomare eso como un sí – lo tomó en brazos llevándolo a uno de los baños de la planta baja se le hizo realmente fácil bañarlo.
Investigo por internet como hacer que se sintiera cómodo. Él se dejó dócilmente, no lo intento aruñar, ni morder. Se prometió que al día siguiente le compraría galletas para premiarlo.
Lo llevo consigo a su habitación dejándolo al pie de su cama. El animalito se hizo un ovillo allí tal y como lo había encontrado cerca del estacionamiento esa noche.
Observó su celular el cual se le ilumino la pantalla anunciando una llamada miro el nombre y ni siquiera se le paso por la mente atenderle a su madre no quería estresarse a esas horas de la noche cuando se acomodó en su cama listo para dormir se dio cuenta que el gatito había subido hasta quedar a su lado, ahora se encontraba dormido. Sonrió ladinamente.
Sin duda traer ese gatito a su casa había sido la mejor decisión que había tomado.
Primer Capitulo subido con exito
Espero y les guste esta es mi primera idea así de loca
No olviden darle estrellita
Con amor, cariño y todo lo que quieran, Tony.
Disculpen los errores que tenía este capitulo, lamento haber tardado en arreglarlo.
(Sé que dije que la subiría de nuevo en junio, pero que flojera esperar)
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Hi Kitty Lou - Larry Stylinson (Omegaverse)
Fiksi PenggemarAmbientada en el mundo de los hibridos y Omegaverse. Donde Louis es un pequeño hibrido de gato omega que es encontrado en un callejon en su forma animal por el reconocido empresario Harry Styles, un alfa muy conocido por los medios por ser un rompe...