Elígeme a mi. Nathaniel y Tú.

Capítulo 44: Pánico y poderes.

¨Ha pasado una semana desde que la nueva villana ha tomado París. Los ciudadanos están más asustados que nunca, con la reciente destrucción del arco del triunfo el pánico ha empezado a enloquecer a las personas. Disturbios se han presentado con los familiares de las personas perdidas en un intento de atrapar a  Miss Vendoulr, muchos ciudadanos han llevado a cabo protestas contra Ladybug, Chat Noir, Queen Bee, Rena Rouge y Caparazón por no haber podido frenar a la akumatizada. Su verdadera identidad no ha sido revelada hasta el momento, ya que todos sus conocidos han desaparecido...¨

- Joder, que aburrida, ¿no te parece, Hedeon?- dijo la chica acariciando a su fénix- Hawk Moth, ¿cómo puedo hacer para que esa estúpida me escuche?

- ¿Has podido arruinar casi todo París y no puedes hacer eso?- la chica se puso de pie y caminó su ventana. Miró a través del campo de fuerza, divisó a Ladybug y a Chat Noir moviendo las manos con violencia, probablemente discutiendo. 

Levantó su mano y la bajó con rapidez, todo se había quedado paralizado, todo menos sus criaturas y todo lo que había cambiado y creado.

- Hedeon, tranquilo. No te alteres- dijo la pelinegra con amabilidad a su ave. Hedeon solía alterarse cuando ella hacía eso.

- ¡Faddei!- exclamó. 

Esperó unos segundos, y luego, uno hipogrifo apareció rompiendo el suelo, la chica se sintió un poco frustrada, pero nada que no pudiera arreglar, y así fue, con un sola mirada a los escombros que estaban flotando por la realidad pausada, lo arregló. 

- ¿Dónde está mi bebé favorito?- un sonido proveniente de Hadeon se escuchó a sus espaldas- Tú cállate, no eres un bebé.

Faddei golpeaba a Miss Vendoulr con suaves cabezazos, ella acarició su cabeza unos segundos y luego lo rodeó. Con dificultad se montó en su espalda, acarició el dorso del animal-. Llévame a la Torre Eiffel. 

Desenvainó la katana y la apuntó hacia la ventana, de inmediato, esa pared desapareció, Faddei salió de ahí y la pared volvió a unirse. 

Volaban sobre París, la vista de la ciudad siendo destruida hacían sentir calmada a la chica, al menos, la ciudad estaría como su corazón lo estaba. 

Las cosas empezaron a volver a su normalidad, los gritos de las personas se hicieron presentes y ella podía escucharlos si se lo proponía, pero decidió ignorarlos hasta que llegó a la torre Eiffel. 

Faddei se detuvo justo en la antena,  miraba como las personas desde abajo fijaban su atención en ella.

Miró hacia arriba y sonrió, el cielo no había cambiado, era rojo y hermoso. La combinación perfecta entre oscuridad y luz. Unos anteojos aparecieron en sus ojos, podía ver hacia abajo y distinguir a las personas sin ningún problema, se bajó de Faddei no sin antes acariciarlo.

- ¡Soy Miss Vendoulr! No podrán vencerme al menos que yo me rinda, porque... puedo hacer lo que me de la gana con todos ustedes, así como trataron de hacerlo conmigo- su katana se convirtió en una pistola, disparó al aire y la bala se partió haciendo una explosión de colores, y de ahí, aparecieron muchas mariposas- ¿Quieren que suelte a las victimas? Necesito sus miraculous, ¿logran entenderlo? ¡Y tú, asquetoso insecto, no trates de atacarme por la espalda!

- ¡Eres buena mintiendo!- dijo Ladybug.

- No es mentira- dijo la chica sonriendo-. Nada de eso, soltaré a los secuestrados cuando ustedes me den sus pequeños artefactos que el mariposon tanto quiere. 

- ¡No me llames así!- dijo Hawk Moth en su cabeza y empezó a controlar su brazo, pero ella solía sonreír incluso en estos casos.

- Tampoco podrán detenerme, no hasta que me rinda.