Elígeme a mi. Nathaniel y Tú.

Capìtulo 61: Peligrosa

POV Narradora:

Japón, Tokio.

- Oye, Akane.

- ¿Sí?- respondió el hombre de más de 40 años, aunque no aparentaba su edad.

- ¿Qué pasará si la chica no acepta?- preguntó la mujer aterrada- Estaba pensando y...

- Confío en Kenta, sé que podrá traerla con nosotros.

Narra _____:

Me quiero dar un tiro, es decir, siempre me quiero dar un tiro, pero esta vez es gracias a la gran pena ajena que estoy sintiendo en este maldito momento. No solo ellos estaban en el escenario, ya había una banda ahí en medio de su primera canción y estos dos... en fin, creo que debo de alquilar un hermano diferente.

- ¡Chico, baja!- exclamó el vocalista quitándole el micrófono a mí hermano.

- ¿Vas tú o voy yo?- me preguntó Irina que estaba al lado mío, quien sabe desde hace cuanto.

- Dame un momento- le dije a Nath, éste se notaba divertido por la situación y la verdad es que yo también lo estaría... sino supiera en que mi hermano y mi amigo el famoso pueden terminar más en rídiculo en internet.

Caminé al escenario lo más rápido que pude, no iba a dejar que mi hermano se convirtiera en un vídeo viral tan fácilmente... menos si quien lo hace viral no soy yo.

- ¡¿Qué creen que hacen?!

- ¡Te voy a cantar una canción, amor de mi vida!-exclamó Demian.

- ¡Mi amigo Demian quiere cantar...!

- ¡Se callan!- miré de reojo a la gente, ya habían unos cuantos grabando, aunque a decir verdad, la mayoría era decente y estaban en su mundo; aunque no solo vi eso, también vi a mi hermana y a Lux en una esquina besándose, debo admitir que eso me parece más turbio que mi hermano super ebrio-. Demian, tienes fama, carajo, no deberías siquiera estar aquí.

Eso último pareció traerlo un poco a la realidad, ya que puso una extrema cara de preocupación. De un momento a otro, asintió e intentó ir por Akihiko, que estaba tratando de quitarle el microfono al vocalista de la banda que estaba ahí con nosotros.

- No, yo me ocupó. Tú baja- le dije en voz baja, pero lo suficientemente audible para él. Demian volvió a asentir y bajó de la tarima entre desequilibrio por su ebriedad masiva.

Me acerqué a mi hermano, que al verme soltó al vocalista. Venía con una sonrisa, pero su rostro cambió a uno lleno de asco. Sabía que se aproximaba y me quedó más que seguro cuando llevó las manos a su boca tratando de retener el vomito que se aproximaba. Corrí y lo tomé del brazo lo más que pude mientras él intentaba no vomitar en pleno escenario. Al menos logramos bajar las escaleras de la tarima, pero no tuvimos tanta suerte como para llegar al baño; y se echó a vomitar ahí mismo, al pie de las escaleras; con celulares grabando.

- ¡Pueden dejar de grabar!- exclamé molesta. Logré ver que Irina se acercaba algo preocupada, pero, eso era de menos. El chico que estaba grabando más de cerca, se acercó aún más, casi poniéndome el celular en la frente, eso hizo que la sangre me ardiera y sin pensarlo me abalancé sobre él-. ¡METÉTE ESA COSA POR EL CU...!- solo logré a tirarle el celular, ya que Irina me tomó del brazo y me haló hacia atrás con fuerza.

- ¡Loca!- me gritó el chico, lo cual hizo que claramente mis ganas de patearlo en las bolas aumentaban.

- Ayúdame- le dijo Irina a alguien. Esa otra persona me tomó del otro brazo y me haló aún con más fuerza, me rodeó con sus brazos inmovilizandome por unos segundos.