~ONE SHOTS Y COSITAS RANDOM (BNHA/MHA)

°Denki Kaminari°

Después de tanto insistirme, accedí a jugar en línea junto a Denki y un amigo suyo.

~¿hola? ¿me escuchas?~la voz de Denki sonó por los auriculares.

~¿seguro de que tu amiga se conectó?~esa era otra persona.

—Estoy aquí ¿por qué gritan?—exclamé molesta al ver lo fuerte que hablaban.

~¡Es que tú no hablabas!~reí~. ¿a qué quieres jugar, ____?~

—Lo que sea, elijan ustedes. Igual voy a destrozarlos.—

~¿qué pasa? ¿desayunaste una porción de egocentrismo?~

—¿Y tú? ¿desayunaste una taza de estupidez?—

~Vaya, que agresivos son ustedes.-soltó el amigo de Denki~. ¿seguros de que se llevan bien?~

—Seh, somos buenos amigos... vamos, elijan un juego.—

Después de 30 minutos discutiendo, ambos chicos se decidieron por un juego de guerra.

~¿Todos contra todos o en dúos?~

—¿eres idiota, Denki? ¿cómo podríamos jugar en dúos si somos tres? Ya veo porqué te va mal en matemáticas...—

~¡¡¡no me dejaste terminar!!! Estaba por decir que podríamos invitar a alguien más a jugar.~

—Ah, bueno... apúrate entonces.—

~Ya va, ya va...~

Hace más de 40 minutos que me había conectado y aún no estábamos jugando a nada, estaba a un minuto de mandar al diablo todo y jugar sola cuando una cuarta persona se unió.

~¿Denki, Ayato? ¿quién es la otra persona?~soltó la voz mientras comenzábamos la partida.

El rubio y yo éramos un equipo, mientras que los otros dos formaban el restante.

~Es ____, ya te hablé de ella.~respondió Denki.

~Oooh... la chica que te gustaba, sí.~

-...-

~...~

~...~

~¿¡por qué lo dices en voz alta, idiota!?~gritó Denki reventando mis oídos.

~¿aún no se lo dijiste? Que fracasado eres...~

—B-bueno... ¿jugamos o qué?—solté intentando ignorar lo que acababa de pasar.

Durante la próxima media hora, los 4 nos manteníamos en un ambiente bastante incómodo, cuestión que afectó la forma en que jugábamos. En cierto punto, lancé una granada y en vez de matar a los otros dos, maté a Denki por accidente.

~¡Oye! ¿cómo vas a matar a tu futuro esposo?~soltó uno de los chicos, haciendo que el otro soltara una carcajada.

~Cállense, sólo... Cállense.~Denki se desconectó de repente.

~Oh, diablos. Creo que la cagamos... y muy feo.~

—Tengo que hablar con él...—solté rápidamente antes de desconectarme y salir de mi casa rumbo a la del chico.

Vivíamos a unas pocas manzanas de distancia, por lo que no tardé más de 10 minutos en tocar la puerta de Denki.

—¿____?—la madre del chico me miró sorprendida—. ¿no estabas jugando con Denki?—

—Sí, pero tuvimos un pequeño problema ¿puedo entrar? Necesito hablar con él.—

—Sí, claro.—la mujer me dio lugar para pasar.

Caminé algo insegura hasta la puerta del cuarto de Denki y toqué tres veces.

—¿qué, mamá? No tengo ganas de nada ahora...—escuché la desganada voz del rubio.

—Soy... soy yo ¿puedo pasar?—

—No sé... depende ¿qué me dirás?—

—No sé ¿tú qué quieres que te diga?—

—Pues no lo sé.—sonreí.

—Abre la puerta, idiota.—

Sin mucho apuro, la puerta se abrió lentamente, dejando a la vista un Denki cabizbajo.

—Lo siento, creo que arruiné todo entre nosotros... Y también la partida.—

—No fue tu culpa, sino la de tus amigos por fastidiar... los habríamos destrozado.—el chico sonrió, mirándome de reojo.

—¿qué... qué pasará ahora?—

—¿con qué?—

—No te hagas la tonta.—

—No sé de qué hablas.—sonreí.

—Que me gustas...—Denki bajó la mirada, jugando nerviosamente con sus manos.

—Tú también me gustas, Denki... mucho.—el chico sonrió.

—¿lo dices en serio?—

—No, idiota. Te estoy fastidiando... ¡Pues claro que hablo en serio!—

—¡Eso es increíble! ¿puedo besarte? No... es muy rápido ¿y abrazarte? No, eso sería extraño. Tal vez ¿Tomarte la mano? Eso sería muy cursi...—reí antes de tomar las mejillas del chico y plantar un dulce beso en sus labios.

Antes de separarnos, una pequeña corriente eléctrica recorrió mi cuerpo.

—¿qué fue...?—

—L-lo siento... aún no controlo muy bien mi singularidad.—sonreí.

—Esta bien, se sintió bien.—una amplia sonrisa apareció en su rostro.

~Entonces... ¿Ya son novios?~la voz de uno de esos idiotas sonó desde la computadora.

~¡cállate, ya la cagaste demasiado!~

~Bueno, bueno...~

Denki y yo reímos antes de abrazarnos.

—¿qué te parece si vuelvo a casa y hacemos papilla a esos dos?—solté en su oído.

—Me parece una excelente idea, pero primero... ¿Me darías otro beso?—sonreí.

—Eso no se pregunta...—