—Oye, Tamaki.—Mirio llamó la atención de su amigo, quien leía un libro a su lado.
—¿si?—
—¿Aún no le dijiste a ____ sobre lo que sientes?—
Tamaki finalmente levantó la mirada de su libro.
—No... ¿por qué?—
—¿es para preocuparse que Kirishima esté conversando muy a gusto con ella?—
Mirio señaló la mesa a unos metros, donde Kirishima evidentemente coqueteaba con la chica.
—Van a robarte a la chica, amigo.—Mirio palmeó su hombro divertido pero la verdad es que al azabache no le hizo ninguna gracia.
Tamaki dio un brinco de su asiento, dándole un pequeño susto a sus dos amigos.
—V-vamos a su mesa.—soltó con un leve sonrojo en las mejillas.
°•°
—¿ustedes diseñaron sus trajes?—____ le dio un sorbo a su bebida, mirando atentamente al pelirrojo.
—Claro, al igual que las demás clases.—
—¿y por qué el de pelo extraño con bolas usa un pañal?—
Kirishima lanzó una carcajada, haciendo que el jugo que estaba bebiendo le saliera por la nariz. ____ lo acompañó en el ataque repentino de risa, armando un leve alboroto que llamó la atención de los presentes. Cuando Tamaki vio como la chica apoyaba su mano en el hombro de Kirishima, sintió como le hervía la sangre. Mirio observaba sorprendido como su amigo se había puesto, era la primera vez que lo veía tan molesto.
—Oh, hola.—soltó ____ al ver que sus amigos se acercaron a la mesa—. ¿quieren almorzar con nosotros?—se secó una lagrimita de tanto reírse.
—No lo sé... ¿queremos?—Mirio miró de reojo a su amigo—. La verdad es que no sabría-
—Necesito que vengas conmigo.—soltó Tamaki mirando fijamente a la chica—. El... profesor Aizawa tenía que decirte algo sobre la clase 1-A, ya sabes, del entrenamiento de hoy.—
—Oh, ya veo. Entonces en marcha.—
La chica terminó su bebida de un sorbo y se puso de pie, acercándose a Tamaki. El azabache no pudo evitar ponerse nervioso cuando ____ tomó su mano y tiró levemente de ella, invitándolo a caminar. Al salir de la cafetería, la chica se detuvo y liberó a Tamaki, quien suspiró con tristeza al no sentir la suave mano de la chica sobre la suya.
—¿dónde está Aizawa? Se me olvidó preguntarlo antes.—sonrió apenada.
—Oh, eso... En realidad n-no te buscaba.—
—¿qué?—
Tamaki jugaba nervioso con sus manos, intentando evitar el contacto visual con la chica. Cuando vio de reojo como lo miraba confundida, sintió el impulso de refugiarse en la pared. No tardó ni un segundo en estampar su cabeza en el muro del pasillo.
—Yo... Lo siento. Sólo quería alejarte de Kirishima.—soltó Tamaki con la mirada en sus pies.
—¿por qué? Estábamos conversando a gusto ¿Eijiro te hizo algo malo?—
Tamaki estaba por negar aquello, cuando cierto pensamiento cruzó por su mente.
Sí, me hizo la peor cosa posible: coquetearte.
—N-no, no me hizo nada.—
—¿entonces?—
Tamaki cerró los ojos con fuerzas, apretando levemente sus puños.
—Me... Me molestó ver cómo te hacía reir.—
—¿qué? Tamaki, eso es una-
—¿por qué no ríes así conmigo?—la chica se sorprendió ante la pregunta, pero rió bajito casi de inmediato.
—¿cómo voy a reír contigo si apenas hablas?—
—B-bueno eso...—
—De todas formas ¿por qué te molestó que pasara un buen rato con Eijiro? ¿te gusto o algo así?—
—La verdad es que... Sí.—
Tamaki se arrepintió de haber dicho aquello, al no recibir respuesta alguna de parte de la chica comenzó a entrar en pánico.
¿y si se enojaba con él? ¿y si no quería volver a hablarle?
Un millón de desgracias cruzaron por la mente del chico, desde ser odiado hasta ser ignorado. Pero todo eso se terminó cuando la cálida mano de ____ tomó la suya, obligándolo a mirarla.
—¿estabas celoso de Kirishima?—
—No... Bueno, sí. Un poco.—rascó su oreja nervioso.
—No hay razón para estarlo, no me gusta Kirishima. Me gusta... Otro chico.—
—Ou... Otro chico.—Tamaki bajó la mirada.
—Sí, tú.—
El de orejas puntiagudas miró sorprendido a la chica, quien le dedicó una leve sonrisa antes de besar su mejilla.
—¿qué te parece si volvemos a la cafetería? Aún nos quedan unos mimutos antes de que inicien las clases.—
La chica estaba por comenzar a caminar, cuando Tamaki tomó sumamente apenado la manga de su camiseta.
—¿t-te gustaría salir conmigo? Tal vez no sea tan divertido como Kirishima ¡p-pero voy a esforzarme!—
____ se sorprendió un poco ante la firmeza de sus palabras, pero terminó por sonreír.
—Me encantaría salir contigo, Tamaki. Ven.—tomó su mano, entrelazando sus dedos—. Almorcemos solo los dos ¿si?—
El chico se dejó guiar totalmente atontado, observando el hermoso cabello de la chica danzando frente a él. Sonrió emocionado. Finalmente pudo confesar sus sentimientos y gracias al cielo, fue correspondido.
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