~ONE SHOTS Y COSITAS RANDOM (BNHA/MHA)

°Shoto Todoroki°

No podía creerlo, después de tantos años, finalmente volvía a ver a aquel chico de cabello bicolor.
Probablemente él no me recordaría, pero yo... Nunca podría olvidar al único "amigo" que tuve.

Flashback

-Hija, sal a jugar. El día es hermoso para que lo desperdicies aquí encerrada. Ve con tus amigos.-

-No tengo amigos...-respondí de mala gana mientras pintaba mi nuevo dibujo de All Might.

-Entonces ve y hazlos, aquí encerrada no encontrarás ninguno.-suspiré.

-Esta bien...-

Tomé mi libeta y mis colores y los guardé en mi mochila para luego salir de la casa.
Tal vez mi madre creía que podría hacer amigos fácilmente, pero no lo sería para nada.
Mas de una vez había intentado acercarme a los niños de mi edad, pero simplemente no podía conectar con ellos. Creo que me tocó ser la única niña del mundo a la que le cuesta hacer amigos.

Perdon, mamá. Pero voy a sentarme en un solitario lugar con mis amigos lapices.

Busqué un lugar tranquilo para terminar mi dibujo, optando por los pies de un enorme pino en el parque cercano a casa. Me senté, saqué mis colores y mi libreta y me dispuse a dibujar. Estaba tan distraída que no noté cuando una persona se acerco a mi.

-Disculpa ¿sabes hacia dónde está la ciudad?-un chico de cabello algo extraño se paró frente a mi con suma vergüenza.

-¿te perdiste?-asintió.

-Salí a jugar pero... Nadie quiso ser mi amigo, asi que comencé a caminar y terminé perdiéndome.-

-Ya veo... La ciudad esta por allí.-señalé hacia el norte.

-Gracias.-me sonrió-. ¿Y tú qué haces aquí sola?-

-Tampoco soy buena haciendo amigos...-

-¿quieres ser mi amiga?-lo miré sorprendida-. los otros niños dicen que soy aburrido... ¡Pero prometo esforzarme!-

El chico sonaba tan emocionado que no pude evitar asentir.

-Claro, será divertido. Pero no tengo nada para jugar, solo mis colores.-

-Oh, no importa. Me gusta dibujar.-Sonreí.

-En ese caso...-arranqué una hoja de mi libreta y se la dí-. Dibujemos juntos. Soy ____.-

-Shoto.-respondió simplemente mientras se sentaba a mi lado.

Lo que creí sería una tarde solitaria y algo aburrida, en realidad fue sumamente divertida y en compañía del niño más dulce y adorable que podía existir.

Fin del flashback

Lástima que aquella fue la última vez que vi al niño...

—____ ¿estás bien?—Denki sacudió su mano frente a mí.

—¿sabes quién es él?—señalé al chico de cabello bicolor frente a la escuela.

—Shoto Todoroki, será mi compañero de clases. No parece muy amigable ¿verdad?—un quejido escapó de los labios del chico—. Me hubiese encantado que tú estés conmigo y no en la clase B.—

—Ni de broma, no quiero que todos sepan que eres mi primo.—

—Oye, eso fue cruel...—

—Iré a saludar a Shoto.—

Estaba por alejarme, cuando Denki me tomó del brazo.

—¿estás loca? Tu mala suerte para ser sociable y su cara de pocos amigos obviamente no serán buena combinación.—

—No te preocupes, lo conozco de antes.—me solté de su agarre.

Antes de que pudiese volver a detenerme, me acerqué rápidamente a Shoto, quien se mantenía de espaldas a mi.

—Eh... ¿hola?—toqué su hombro algo apenada—. Eres Shoto ¿verdad?—el rostro del chico ni se inmutó al voltear y verme—. Tal vez no me recuerdes pero yo soy-

—No me interesa.—el chico se dio media vuelta nuevamente y comenzó a caminar hacia el interior de la escuela—. No vine aquí a hacer amigos, solo sería un estorbo...—

Estorbo... que mal sonaba esa palabra.

Algo sorprendida por la brusquedad que manejaba Shoto en la actualidad, no pude evitar pensar en la causa de ello. Sin mencionar que la cicatriz en su ojo izquierdo no pasó desapercibida de mi vista.

—No te conocí mucho, Shoto. Pero en el corto periodo de un día, dibujando garabatos totalmente alejados del mundo bajo la sombra de un árbol... parecías ser más agradable.—me di la vuelta dispuesta a volver con Denki—. Y por cierto... aún tengo el dibujo que me regalaste. Era un conejo ¿lo recuerdas?—

Al no recibir respuesta de su parte, me alejé.

—¿Cómo te fue? Desde aquí no se vio nada bien.—soltó Denki al verme llegar.

—Me fue como la mierda, creí que me recordaría. O al menos, que no sería un completo patán.—

—No te preocupes, el que va a tener que compartir salón con él soy yo. Espero que tus compañeros sean más simpáticos.—

—¿y eso para qué? Nadie quiere ser mi amigo.—

—Que poco esfuerzo haces, chica. Intenta sonreír y muéstrate tal y como lo haces conmigo. Verás que todos te querrán.—sonreí.

—Gracias, tonto.—

—De nada... y no soy tonto.—

Tiempo después, cuando estaba por entrar a mi salón, me topé con Todoroki en el pasillo. Levantó su mirada hacia mí y en ese momento noté que los ojos llenos de alegría que tanto recordaba ya no estaban ahí, en su lugar, solo había una mirada cargada de odio.