Capítulo 42 - Sorpresa

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—¿Qué? —es lo único que me sale decir.

Rebeca me mira, forma sus labios en una fina línea y asiente levemente.

—¿Me lo estas diciendo de verdad o me estás tomando el pelo?

—Te estoy diciendo la verdad. Sé que ha pasado mucho tiempo pero merecías saberlo.

—Merecía saberlo —repito incrédula intentando procesar lo que me acaba de confesar —. ¿Por qué? ¿Por qué lo hiciste? —espeto con dureza.

—Porque me dio rabia que Justin pasase de mi y que te prefiriese a tí. E incluso cuando estuvimos juntos notaba que no me tomaba enserio. Cada vez que me besaba sentía que lo hacía por hacer. Nos besábamos, nos acostábamos y me terminé enamorando pero él de mí no.

—Yo creo que ese amor más bien era obsesión.

—Al principio no pero después sí. Después del accidente creía que volvería a Texas, tenía pensando en estar con él y hacer que se enamorase de mí pero él prefirió quedarse en Toronto, contigo. Siempre has sido tú Amy y eso me jodía. Lo siento muchísimo Amy, lo siento de verdad —suspira profundamente.

Niego con la cabeza.

—¿Me puedes contar lo que pasó esa noche?

—Intenté seducir a Justin pero él me rechazaba, me cansé y le eché algo en la bebida con la ayuda de Alex. Justin ya no se mantenía, así que Alex me ayudó a llevarlo a la habitación, intente besarle pero hasta que pronunció tu nombre y dejé de hacer nada. Le desnudé y después me desnudé yo para hacerle creer que nos habíamos acostado y que tú llegases a la mañana siguiente y lo vieses todo facilitó las cosas.

Niego con la cabeza mirándole con desprecio y asco. Tengo que contenerme muchísimo para no levantarme y darle un guantazo, pero no, no lo hago.

—¿Cómo se puede ser tan mala persona? ¿Cómo se puede ser tan asquerosa? —escupo mientras mis palabras salen bien pronunciadas y con frialdad. Me levanto, cojo mi bolso y mi chaqueta y camino pasando por su lado pero me detengo.

—¿Sabes Rebeca? Justin y yo estuvimos separamos por tu culpa, sí, por tu culpa le dejé, dejé de confiar en él pero gracias Dios o al destino, quien quiera que haya sido, Justin y yo hoy en día estamos juntos y vamos a casarnos. Al final tu asquerosa envidia no llegó a separarnos del todo.

Ella me mira totalmente sorprendida pero inmediatamente salgo de Starbucks sintiendo un nudo formándose en mi garganta. Siento que me falta el aire y cuando el viento golpea mi rostro lo agradezco.

“Entre Justin y yo no pasó nada.” Esa frase no deja de sonar en mi cabeza. ¿Cómo fui tan estúpida en no creer a Justin? ¿Cómo fui tan tonta en dejarme llevar por las apariencias?

—Adiós Justin.

—No te vayas Am… No te vayas…

Mi mente viaja al momento que lo dejé con Justin. Todavía puedo recordar sus ojos mieles llorosos y la desesperación que había en ellos para que lo perdonase.

¿Cómo he sido tan estúpida?

Cuando menos me doy cuenta, llego al hotel, subo a mi habitación e inmediatamente cojo el móvil buscando el número de Ashley. Ella no tarda en cogerlo.

—¡Hola Amy! ¿Cómo va por allí? —responde con entusiasmo.

—¿Es Amy? Pásamela por favor —alcanzo a escuchar la voz de Justin.

—¡No, no Ashley! —me adelanto —. No me lo pases por favor, ahora no, necesito hablar contigo.

—Espera.

Fall - Justin Bieber Donde viven las historias. Descúbrelo ahora