Fall - Justin Bieber

Capítulo 40 - Fin de año

Mi corazón late desenfrenado. No me pase ni una sola palabra, intento hablar pero no puedo. ¿Esto es real? ¿Esto está sucediendo?

—Dime algo Amy.

—Yo… Yo —repito.

—Tú…

Niego cerrando los ojos.

—¿Me puedes volver a repetir la pregunta?

—Am, ¿quieres casarte conmigo?

Esta vez le miro con una sonrisa en mi rostro. Lamo mis labios y asiento con la cabeza.

—Sí, si quiero.

Justin no tarda en cogerme en brazos haciéndonos rodar mientras nos reímos de felicidad. Nos caemos al sofá abrazados y riéndonos. Los perros no tardan en llegar al salón poniéndose a ladrar. Inundamos por completo el salón de risas y de ladridos.

—Escúchame bien señorito —mi novio me mira con ambas cejas alzadas —, ¿Tú estás seguro del paso que quieres dar conmigo? Es algo muy importante lo que me has propuesto —me muerdo el labio. Justin me mira con los ojos entrecerrados.

—Soy muy consciente de lo que te he propuesto y créeme que estoy totalmente convencido de ello. Quiero que te cases conmigo, que seas mi compañera de vida, mi esposa, mi todo —besa mis labios y sonrío en sus labios —. Y quiero que los dos formemos una familia, quiero tener muchos muchos hijos.

—¿Muchos cuántos? Porque yo no soy ninguna coneja.

Justin suelta una fuerte carcajada que me hace reír a mí también.

—Umm… Cuatro o cinco.

—Sí, y de paso tenemos un equipo de fútbol aquí —digo con ironía.

—¿Te imaginas? Pequeña Amys correteando por aquí o pequeños Biebers.

—No, gracias, con uno tengo más que suficiente.

Justin abre la boca incrédulo y empieza a hacerme cosquillas. Grito y me rio retorciéndome debajo de él hasta que logro pegarle un pellizco. Justin se quita de encima de mi y se queja.

—¡Eres una bruja! ¡Ven aquí!

Grito e intento huir de Justin pero enseguida me coge de volviéndome al sofá. Elvis intenta subirse al sofá y le ladra a Justin. Él lo mira y hace un gesto de rendición.

—Está bien amigo, tú ganas.

Miro con cautela a Justin y a Elvis. El perro lo mira detenidamente y él coge la pequeña caja abriéndola.

—¿Me vas a dejar ponerle el anillo a mi prometida?

Trago saliva sonriendo como una tonta. Elvis ladra en respuesta.

—Me lo tomaré como un sí.

Me incorporo, Justin coge mi mano poniéndome el anillo en el dedo anular y después besa mi mano.

—Quiero casarme contigo, quiero ser tu compañera y quiero formar una familia contigo, cariño.

—Te amo Am, muchísimo.

—Yo también te amo Drew, muchísimo.

Y dicho eso, sellamos nuestro compromiso en un beso, un beso lento lleno de ternura. Al finalizar el beso, nos miramos como dos tontos y nos abrazamos.

***

Me subo al coche de Lexi con Abby, Caroline y Ashley. Miro a través de la ventana viendo la nieve caer. Todavía sigo en shock sigo sin creerme lo que paso ayer. ¿Todo esto es real? Es un sueño.