Fong tiene en brazos a su pequeño Alaude, en su mente pone los mil y un escenarios, pero no encuentra la forma de explicarle lo que confunde tanto a su hijo.- mamma Tuna... ¿no es mi mamma? - Un suspiro escapa de sus labios y le da una sonrisa cándida. Lo sienta en sus piernas de una manera que pueda verlo mejor... pero esos celestes y grandes ojos infantiles le acongoja un poco, ¿cómo decirle a una criatura que el omega que lo cuidó y alimentó con tanto amor desde que nació, no es su madre, que su verdadera mamma lo abandonó apenas vio complicaciones?
- bueno... - se aclara la garganta, toma aire y lo suelta. - no... Tsunayoshi san no es tu mamma, biológicamente hablando, él tomo ese puesto porque se encariñó contigo de bebé y te integró en la camada con Gino, Ciro y Giotto. Pero te quiere como a ellos tres - ve a su tigrillo, las orejitas caídas, los ojos se cristalizados y como se muerde el labio inferior... sufre. Lo abraza con todo el amor que le tiene, odia verlo así, claro que lo hace, es su cachorro.
Sonríe triste al notar que el pequeño tigre aguanta las lágrimas, es un niño fuerte y valiente, pero es obvio que la noticia le afectó. Él se creyó siempre que era un bebé más de la camada de los trillizos que posee a ese fiero león como mamma.- y.... y mi ...mi mamma. ¿mulio? ... ¿pod eso no me cuida?... ¿esta en el cielo? - un nudo se instaló en la garganta del chino. Su pequeño solo conoció a padres y madres que crían a sus hijos incondicionalmente, a sus modos... no conoce la crueldad de su situación, ante esto el moreno toma una decisión.
- Si Alaude, tu mamma falleció. Por eso Tsuna es quien te cuida en su lugar y te da todo el amor que ella no puede darte. Pero te aseguro que fuiste ... amado por... ella- siente sus garras clavándose en el antebrazo por mentirle mientras abrasa al rubio.
- Entonces ¿soy como Flan? -. Sus ojitos tienen un pequeño brillo.
- ¿cómo Fran? -
- sí, su mamma también se mulió, pero él lo quelia mucho y lo dejó con Miakulan pala que lo cuide y no se quede solo cuando se fuela.- esa pequeña sonrisa en su apático tigrillo son como dagas para Fong- ¿mamma me mandó a Tuna para que me cuide?- odia mentirle así, pero prefiere que siga en ese mundo mullido en lo que quede de su infancia, que no se sienta la oveja negra al entender que él es la única cría de su grupo que fue rechazado por su madre.
- Si Alaude... tu. tu mamma mandó a Tsunayoshi san para que te cuide y ame todo lo que ella le hubiese gustado hacerlo...- el maestro de kempo pega al niño a su pecho rodeándolo en un abrazo para que no vea las lágrimas de impotencia que se le escapan. Siente el peso ante la mentirosa realidad que le ha creado al infante se la aguanta y se promete sostenerla al ver la colita rayada menearse feliz. - Te amo Alaude... te amaré el doble o el triple de lo que no pudo tu... mamma-.
- . . . Yo también pappa- todo tiene un sabor agridulce, inocentemente agridulce.
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Reborn espera en la entrada del edificio que sea la hora para retirar a sus cachorros. Suspira al recordar que su amado león está de viaje con Hayato y Takeshi a Estados Unidos por negocios, algo de una reunión con los jefes de la mafia canadiense. estadounidense y China. Se lo notaba bien al castaño hasta que escuchó que los Leroy se agregaron a los negocios, no es que los canadienses fueran débiles o menos importantes, pero al parecer su capo es algo...
< sí, Jean Jackes Leroy es insoportable con su JJ style me dan ganas de rebanarle sus JJ bolas con sus cuchillas de patinaje>
Si, ese canadiense no es el favorito del Vongola, pero esa faceta harta le enciende al hitman. Después de una sesión se despedida en uno de los cubículos del aeropuerto el leopardo se fue al jardín.
A lo lejos el italiano ve la figura de su amigo de kipao. Lo ve decaído y una mueca se le posa en su rostro.- Chaos Fong- el de trenza lo ve y le sonríe algo apagada.
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ENTRE MIS GARRAS
FanfictionChaossu, me llamo Reborn. Soy un deitána de clase Alpha, hace un poco huí de mi país hacia Japón para no tener que comprometerme con la Omega que eligieron mis padres para mi, sin saber que me enamoraría de un dame el cual no sabe que lo tengo entre...