Capítulo 3

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La bienvenida por parte de nuestros compañeros de segundo año estaba siendo espectacular, me gustaba el ambiente de la universidad, lo que no me gustaba eran las clases.

Yo no solía beber mucho, pero esto era una ocasión especial, estaba con mis compañeros y era como un paso para entrar en confianza.

- ¿Te gusta Karina? - preguntó mi amigo - no le has despegado la mirada.

- No, no es que me guste, pero está buenísima.

- Más o menos.

Miré a Richard con cara desafiante, quizás estaba un poquito tomado pero consciente - apostemos.

- ¿De qué hablas loco?

- A que cojo con ella, hoy.

- Chacho estás loco - rió - pero quiero ver esto.

- Dale - reí de lado llevando el vaso a mi boca.

Esperé un momento, necesitaba ver que al menos se distraigan un poco.

Me levanté llamándola para que me acompañe, Richard me miraba mientras negaba con la cabeza, al menos yo quería pasarla bien en todo sentido.

- ¿Que pasa? - preguntó mientras se ponía de pie.

- ¿Vamos a dar una vuelta o algo? Más solos.

- Claro, vamos.

- ¿Te la estás pasando bien? - pregunté mientras pasaba mis brazos por sus hombros.

- Sí, son agradables los chico de segundo año.

- No más que yo supongo.

- Claro que no.

- Me parece bien.

- Además - se detuvo un momento abrazándome - tú eres mucho más lindo, captas más mi atención.

- En qué estamos entonces, no perdamos tiempo - dije para besarla desde ya.

Tomé su mano para llevarla a otro lugar, estábamos en el exterior de la universidad y aunque no había mucha gente, no iba a correr el riesgo de que nos vean.

La encaminé al baño de hombres, no era el mejor lugar realmente pero al menos no nos verían.

- Intenta no gritar - pedí - que quede entre nosotros ¿eh?

- Solo hazlo, esto es sin compromiso.

Me hubiera gustado desnudarla completa, pero no podíamos, el espacio era chico y no teníamos tanto tiempo.

Agradecía el hecho de que no pese tanto, ya que yo soy flaco y tanta fuerza no tengo.

Estaba demasiado excitado así que me introduje de lleno, por un momento pensé que se quejaría pero fue todo lo contrario, ni entrar en ella me costó.

Ninguno decía nada, esto era solo sexo, ambos queríamos y si se daba la oportunidad porqué no aprovecharla.

Comencé a aumentar la velocidad de cada embestidas, se le escapó uno que otro gemido que para ser sincero me provocaban aún más.

Procuré terminar fuera ya que no habíamos utilizado condón, fue algo a lo rápido y no me iba a poder aguantar.

Salí para ver que nadie esté en el pasillo y la hice salir, no iba a llegar junto con ella en donde estaban los demás.

Lavé mis manos de inmediato al igual que mi cara, mal no había estado.

- Colón, todavía acá - escuché la voz particular de uno de mis profesores.

- Sí, veo que usted también - dije mirando a Christopher, mi profesor.

- Así es, claramente no está acá estudiando.

- No, estoy con mis compañeros compartiendo un momento entre estudiantes, cosas de jóvenes - respondí.

- Sigan divirtiéndose - se detuvo para mirarme - pero los baños no son para meter a las compañeras jóven Colón.

Me quedé observándolo hasta que se fue, ese comentario me hizo sentir incómodo.

Más Que Un Profesor - ChriserickDonde viven las historias. Descúbrelo ahora