Capítulo 24

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Iba caminando junto con Richard, escuché la voz de Karina quién me llamaba.

- Vamos loco, vamos - me apresuró Richard.

- ¡Esperen! - tomó mi brazo - ¿puedo hablar contigo?

- Habla, te escucho.

- No...pero a solas, Erick - dijo bajo.

- Déjame con ella - le dije a Richard - nos vemos mañana bro.

- Está bien - me dió un abrazo - hablamos.

- Mañana te cuento - susurré a lo que asintió.

Caminé un poco más allá con ella, la muy descarada ni vergüenza dejaba ver en su rostro.

- Bueno, de lo que viste...

- Ya sé, me vas a decir que no diga nada, lo de siempre ¿no?

- Sí, por favor.

- ¿Te mandaron o tú me lo estás pidiendo?

- Yo te lo estoy pidiendo.

- ¿Sabes? Lo que hagan el profesor y tú me da igual, estoy aburrido de que me usen como tapadero de sus calenturas, váyanse a un motel por último.

- Ya, párale.

- No, para tú - me puse de pie - mínimo debería llevarte a su casa si tanto le importas.

- Te estás pasando Erick - se puso de pie también.

- Joven Colón ¿podemos hablar? - escuché su voz detrás mío.

- Tengo prisa, Liliana me está esperando, ya hablé con mi compañera, creo que es suficiente.

- Solo un momento.

Me giré para darle la espalda a Karina, mi cara estaba bastante sería, no podía negar que tenía rabia.

Caminé con él nuevamente al salón, durante el camino no dije nada, intentaba hacer conversación pero solo obtenía silencio de mi parte.

- Erick - esperé a que cierre la puerta para desquitarme. La rabia me pudo, no pude evitar lanzar una bofetada por lo que había echo.

- ¿Crees que soy tu imbécil?

- ¿Me vas a dejar hablar?

- ¿Quieres hablar? ¿Ahora quieres hablar? Claro, que más vas a hacer si la otra zorra de seguro te dejó cansado - di un empujón.

- Contigo es imposible - se giró dándome la espalda.

- Claro, mira con quién salió el novio del año, tiene a su zorra y a su idiota - me referí a mi.

- Bueno, ya lo hice, que quieres que haga - se giró - tampoco voy a justificar lo que no se puede, me ganó la calentura.

- ¿Y lo dices como si nada? - volví a dar otra bofetada - vete a la mierda, ni que fueras el único.

- ¿Perdón? - se puso frente a mi - ¿que estás insinuando?

- Hey, no te acerques así - advertí.

- No me vengas con insinuaciones entonces - dió un empujón.

- Oye que te pasa - empujé de igual manera - yo también me sé defender, no me creas estúpido.

- Estás todo prepotente.

- Y con justa razón.

- Solo hablemos, arreglemos esto.

- ¿Arreglar? Quién te dice que yo quiero arreglar esto - reí - te vas a la mierda, yo contigo no quiero nada ¿te gustó meterla en otra persona? Bien, que sea ella quien te dé lo que buscas, no voy a ser tu juego.

- Erick, solo fue una estupidez, estoy contigo - intentó abrazarme.

- Estabas, estabas conmigo - aclaré - yo no te voy a estar rogando, para eso tienes a la otra.

- Pero nos gustamos, disfrutamos estando juntos, no mandemos todo a la basura por esto - pidió.

- Te pasas, enserio - comencé a recordar las palabras de Richard - soy lindo, puedo tener a quien quiera conmigo, si fuera por mí mañana ya tendría a alguien a mi lado, no tengo por donde perderme.

- Escúchame bien - tomó mi brazo - te veo con alguien y te juro...

- ¿Qué? No me vengas con amenazas, quédate con Karina, a ver si te hace sentir lo mismo que yo.

Más Que Un Profesor - ChriserickDonde viven las historias. Descúbrelo ahora