Una Última Vez

Capítulo 6.3

Camino hacia la recepción con mi corazón saltando de alegría ¿Qué más podría pedir a la vida? Tengo todo lo que una chica quiere en estos momentos y soy la mujer mas feliz del universo. La chica de recepción me mira y sonríe.

- Señorita que gusto verla por aquí.-Me dice alegremente.-Hacía algún tiempo que no pasaba a visitarnos.-Me dice riendo, sólo han pasado 2 días desde la ultima vez que pise el hotel, fue por la tarde, lo recuerdo perfectamente ese día todos mis sentimientos estaban encontrados y no pude corresponderle a Llane cuando tuvimos nuestro momento en el auto, fue justo el día en que hable con May y ella me dijo que las cosas entre Llane y yo deberian ir lentas que le contará mi historia, que no desaprovechará la oportunidad de desahogarme! Fue justo antes de irnos a la Romera aquel viaje hermoso que pase en estos dias, con mi compañero de aventuras, mi pequeño Llanero, suspiro al recordarlo.

- También me alegro de verte, te haz convertido en mi confidente.-le digo.-Así que dime ¿Cómo se han portado las chicas?.-Le pregunto con curiosidad.

- Bien, ha estado viniendo un chico por ellas. Pero sólo su hermana y su otra amiga…-Se queda callada unos momentos, buscando entre unos papeles.-May, así se llama la chica que se ha quedado a dormir.

- ¡Uhm! Creo que ya sé dónde ha pasado las noches Melody.-Le digo sonriendo.-Gracias por cuidarlas mientras yo no he estado.

- Es un placer.-Me dice sonriendo, camino unos pasos dirigiéndome a las escaleras cuando escucho el grito de la recepcionista.-Señorita una cosa más, ha llegado esta carta para usted, me ha dicho el cartero que se la entregará en cuanto pasará al hotel.-Me dice entregándome un sobre. ¿Una carta?, ¿De quién? Mis padres saben que estamos bien..

- Gracias.-Le digo mientras tomo el sobre.-Te veo en un rato más, gracias por todo.-Concluyo, comienzo a caminar y al llegar a las escaleras visualizo el sobre, está clarísimo que es para mí tiene mi nombre escrito en cursivas, la caligrafía de esta persona es buena. Abro el sobre y me siento en las escaleras...

Querida Alana:

Es un poco tarde, son las 2 de la mañana pero luces tan plácidamente dormida encima de mi pecho que me has dado una grandiosa idea.

Sé que es una locura pedirte esto, pero estas aquí para conocer Colombia.

Así que vivamos el momento mientras sea posible y dime algo ¿Aceptarías fugarte conmigo unos días?

Sé que pensarás ¿Y cómo voy a responder? No te preocupes he planeado todo así que si tu respuesta es sí, ponte ese vestido que está debajo de tu maleta, lo sé, entre a tu cuarto pero May me ha dado permiso. Si la respuesta es no, vístete como tú gustes.

Att: Tú Juancho chocador.

Grito de emoción ¡Está loco! Subo corriendo el resto de las escaleras hasta llegar a la habitación, May está vistiéndose con una sonrisa en los labios, me examina y grita conmigo.

- Supongo que ya te han dado la carta ¿verdad?.-Me pregunta alegremente.

- Tú sabias de esto.-Le digo.-Por dios, este hombre va a volverme loca.-Le digo gritando.

- Claro tontita, dime ¿Quién más lo ayudaría a escoger todo para ti? Si tú siempre estabas con él, es un hombre admirable, Alana.-Me dice May.-De ver está enamorado de ti y no lo culpo, eres una chica maravillosa.-Concluye la oración.