Después de 20 minutos mi respiración ha vuelto a la normalidad, tomo mi celular de la mesita de centro y veo la hora son las 10:45 de la mañana. ¡Maldición!. Hablo en voz alta y Llane se despierta bruscamente saliendo de mi interior.
- ¡Auch!.-Le digo cuando sale.
- Amor, maldición. Lo siento, olvide que no había salido. ¿Estás bien?.-Me pregunta preocupado.
- Sí no te preocupes.-Le digo levantándome de la cama.
- ¿A dónde vas?.-Me dice recostándose de nuevo en la cama.
- A cambiarme, son casi las 11 y a esa hora vendrá la lancha por nosotros.-Le digo.
- No te preocupes no nos iremos hoy.-Me dice.
- ¿Qué?.-Le pregunto asombrada.
- Dije que nos quedaremos un día más ¿Hay algún problema?.-Me pregunta.
- Sí, si lo hay. Olvidaste un pequeño detalle amor. ¿Cómo nos regresaremos mañana?.-Estoy aterrada, aunque mi parte sentimental cree que es una buena idea quedarme un día más aquí para compartir más momentos así con Llane mi parte sensata esa que siempre me salva de cometer alguna tontería esta aterrada.
- Ya arregle todo, Alana.-Me dice, en un tono un poco furioso.-Deja de preocuparte, o quizá es que ¿Quieres volver por que no estas cómoda aquí conmigo?.-Lo fulmino con la mirada, como se atreve a pensar eso después de que hemos hecho el amor hace un momento, no le respondo y en su lugar entro en el baño y me encierro, escucho un largo suspiro de Llane mientras yo comienzo a llorar. Después de media hora sentada en una bañera llena de agua caliente, escuchando a Llane del otro lado de la puerta diciéndome que le abra por fin decido salirme de aquí, tomo un par de toallas que están encima de una repisa y me dispongo a salir armada de valor, Llane está en su celular hablando con alguien.
- Está bien, regreso mañana en el vuelo de las 4:30 a Medellín.-Le dice.-Nos vemos.-Dice y cuelga el teléfono, escucho un estruendo cuando el celular de Llane se cae de la mesita de noche al suelo y una maldición.- ¿Hola?.-Pregunta, no sé si me está hablando a mi o habla con alguien más pero escucho cuando se levanta de la cama y lo miro de reojo lleva únicamente la sabana de la cama amarrada a la altura de su cintura, sigo enojada ¿Cómo pudo pensar que existía una razón para no quedarme aquí y mucho menos sabiendo que él estaría conmigo?. Tomo una bocanada de aire y la suelto lentamente, después de unos segundos siento su calor detrás de mí, me agacho para sacar ropa de mi maleta, quiero algo cómodo para poder bajar a caminar en la playa, o simplemente acostarme en alguna hamaca que tiene el hotel.- ¿Cuándo vas a hablarme?.-Me pregunta, volteo a verlo y observo como sus manos lentamente se acercan hasta mi cintura sin llegar a tocarme, cierro los ojos y suspiro, cuando los abro encuentro a un Llane juguetón ¿Pretende que no esté enojada después de la escena que me monto? Lo miro fijamente a los ojos y elevo mis cejas.
- Compermiso.-Estiro mi mano y lo quito de mi camino.
- Es demasiado infantil lo que estás haciendo señorita.-Me dice elevando la voz tomo un respiro.
- ¿Demasiado?.-Le digo, mi tono sarcástico está presente.-Demasiado seria que yo no confiara en que tú quieras quedarte aquí conmigo, demasiado seria que te molestarás por una estúpida pregunta, demasiado seria tener que llorar media hora en el baño pensando si es una buena decisión seguir aquí al lado de alguien que no confía que lo amas.-Le digo al borde de llorar de nuevo, es suficiente pero si pudiera regresarme en estos momentos a Medellín sería lo mejor estamos discutiendo por algo tan tonto que de verdad no sé si podamos superar lo que sigue juntos .- Amor, eso sí sería demasiado.-Le digo enojada, camino rápidamente hasta mi cama y me siento dejando la ropa encima, tomo mi rostro entre las manos y después me visto mientras veo a Llane entrar en la habitación del baño, es mi momento para salir, necesito pensar sola que estoy haciendo.
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Una Última Vez
Romance3... Ningún chico me hará cambiar de opinión. 2... Todos los hombres son unos patanes. 1... Pero él, es jodidamente guapo. Si me mira de esa manera no tendré escapatoria y me rendiré ante él. Ellos no tienen nada en común, ella... Una joven que con...