Una Última Vez

Capítulo 7.2

- Ayer mientras dormías solo estabas diciendo "Haré lo correcto señora Análida". ¿Te pidió algún favor?.-Me pregunta curiosamente mientras yo me quedo mirándolo un momento tratando de buscar en lo profundo de mi cabeza ¿Por qué habré dicho eso mientras dormía? De pronto todo tiene claridad y sé a lo que se refiere.

- ¿Hable en la noche?.- Mis mejillas deben de estar rojas de vergüenza, aunque no se por qué debería apenarme, él ya sabía que yo hablaba por las noches.

- Sí, en repetidas ocasiones pero solo logre entender eso por qué lo demás que decías eran solo murmullos.-Me dice.- Por eso mi pregunta.

- Ah.-Le digo riéndome y soltando un poco el aire.-Bueno no es un favor. Es algo más complejo y difícil de explicar, son de la clase de cosas que no se explican solo se logran sentir.-Le digo mirando sus ojos, de pronto en ellos puedo ver el mismo temor que vi en los ojos de su mamá mientras ella me decía que no dejara a Llane solo en estos momentos. Un par de lágrimas comienzan a desbordar los míos cuando comprendo el porqué de su expresión preocupada.-Cree que vas a dejarlo.-Mi voz interna me lo dice.-¡Maldición Alana alivia su duda y cuéntale la verdad!.- Mi subconsciente se encuentra frenético y de nuevo estoy llorando! ¿Qué me está pasando?.-Es el efecto Juancho chocador cariño.-Dice mi subconsciente.-Es el único hombre que nos ha vuelto completamente locas.

- ¿De qué se trata?.-Me pregunta lleno de temor, baja su mirada hacia sus manos.

- Ayer mientras tú ibas por las chicas, ella y yo hablamos un poco Juancho. Pero en realidad no importa lo que hayamos hablado porque es algo que se quedará entre nosotras.-Le digo sonriendo y limpiando mis las lágrimas, él sabe que no me hará cambiar de opinión si quiere conocer algo de nuestra plática, me mira un momento y se limita a hacer un gesto como diciendo "Bah, no preguntaré más".- Pero hay algo que si puedes saber.-Capturó su atención y vuelve a fijar la vista en mí.

- Tú mamá me ha pedido que no te deje solo en estos momentos que tu haz decidido emprender un nuevo viaje como solista, cuando le he dicho que no lo haría porque te quiero de verdad, ella simplemente me miro dulcemente y me abrazo.-Suspiro al recordar el momento, el me observa con atención fijando su vista en la mía.- Juancho quisiera poder tener las palabras correctas para explicarte pero cuando me abrazo no sabes la paz que sentí porque fue completamente sincera.-De nuevo las lágrimas se acumulan en mis ojos pero tomo una bocanada de aire y suspiro.-Me abrazo porque le dije que te quería y que no te dejaría solo ¿Sabes cuán importante fue para mí ese momento? Ahora comprendo que Ana y tú son lo mejor para ella y que no importa donde se encuentren o que tan lejos estén porque ella siempre estará para ustedes, iluminándolos y brillando como una estrella resplandeciente en el cielo.

- ¡Ay mi amor!.-Dice Llane sonriendo, su mirada preocupada se ha vuelto dulce y tranquila.-Creí que te había dicho algo más. Te juro que ayer mientras dormías te escuche llorar un poco y me acercaba a ti para abrazarte, por un momento te calmabas y respirabas hondo, pero hubo una ocasión durante la noche que solamente dijiste "Haré lo correcto señora Análida" y no te volví a escuchar más, pensé que quizá tú me dejarías.-Pronuncia estas últimas palabras con una mirada llena de dolor.

- ¡Claro que no!.-Le digo tomando su rostro.-¿Hasta cuándo comprenderás que tú te has vuelto mi todo?.-Le pregunto mirando sus ojos marrones.

- No quiero sonar egocéntrico pero sé que lo soy, así como tú lo eres para mí-Dice tomando el mechón rebelde que sobresale de mi cabello.-Aunque hay veces en las que los nervios pueden conmigo y me pongo a pensar cosas que quizá no van.

- Juancho, vivamos el hoy.-Le digo recordándole sus propias palabras.-El destino nos dio la oportunidad de querernos de una manera que nadie va a entender.-Tomo entre mis dedos el mechón rebelde que sobresale de su frente.-Sólo tú y yo, sabemos nuestro camino y depende de nosotros mismos permanecer juntos o separarnos.-Le digo sonriendo.