Capítulo 30. Enamoradas

5.6K 208 55
                                    

Natalia parecía contenta de verme, supongo que también era debido a los efectos del alcohol. Se paró enfrente de mi.

- ¡Al final has venido! - Dijo Natalia con una sonrisa.

Realmente parecía que se alegraba de verme, me hizo gracia ver su sonrisa puesta en mí después de tantos días. Sonreí pero la sonrisa rápidamente se borró de mi rostro cuando volví a dirigir la mirada a la chica pelirroja que aún seguía hablando borracha. Me quedé un rato mirándola inconscientemente, parecía muy joven pero también con mucha experiencia. No era muy alta y tenía el pelo largo y liso. Su estilo era muy parecido al de Natalia.

Noté como Natalia giraba su cabeza para ver a quien estaba mirando. Aparté mi mirada al darme cuenta y volví a mirar a Natalia.

- Es Alicia, es mi compañera en la tienda - Me explicó Natalia refiriéndose a la chica pelirroja. - Es genial pero está un poco loca.

- Como tú... - Dije yo.

Natalia negó con la cabeza.

- ¿Cuánto llevas aquí? - Pregunto Natalia algo preocupada.

- Lo suficiente para ver como habéis hecho gritar a todo el mundo... - Le dije seria.

- Ya te he dicho que está un poco loca.. - Dijo Natalia algo nerviosa.

- Tranquila, no me tienes que dar explicaciones de nada. - Le dije yo. - Además, no debería haber venido, no pinto nada.

Tenía ganas de irme después de encontrarme con esa situación. La relación entre Natalia y yo era demasiado frágil para seguir viviendo situaciones incómodas.

- Qué tonta eres, claro que pintas.. - Dijo ella.

- Lo siento Natalia, pero no estoy bien.. - Dije yo entre suspiros. - Quiero irme.

Me empecé a estresar por no saber sobrellevar la situación. Quería irme de allí lo más rápido posible. Natalia, que ya me conocía en ese aspecto, lo notó.

- Entonces me voy contigo. - Dijo ella decidida.

- ¡No! - Exclamé.- Enserio, quédate, puedo volver sola.

- No es porque vuelves sola, Alba, esque no quiero separarme de tí ahora. - Dijo Natalia agarrándome la mano.

Mi corazón se disparó. Hacía tantos días que no sentía el contacto con Natalia que el simple hecho de que me rozara la mano ya me ponía nerviosa. Aún así, sabía perfectamente que me decía eso sólo porque había bebido.

Suspiré.

- Natalia, sólo dices esto porque has bebido. Esta misma tarde parecía que me odiabas. - Le dije mirándola a los ojos. - No entiendo nada. Además, es el cumpleaños de tu súper amiga, con la cual parece que te llevas genial, no deberías irte.

- Quizás el alcohol me ayuda a decir ciertas cosas que pienso pero no digo ninguna mentira. - Aclaró Natalia mientras dejaba de agarrar mi mano. - ¿Y cómo que parece que te odio? Jamás podría odiarte.

Natalia parecía más enfadada cada segundo que pasaba, como si le hubiera sentado mal lo que le había dicho. Yo me encogí de hombros.

- ¿Y tú no querías hablar conmigo? - Me preguntó.

Mis ojos se abrieron sorprendidos.

- ¿Cómo lo sabes? - Le pregunté.

- Me lo ha dicho María, y por algo habrás venido, ¿no? - Dijo Natalia.

- Sí... pero no es un buen momento, no en estas condiciones. - Le dijo yo.

- Hoy vamos a hablar y punto, Reche. - Dijo Natalia agarrándome de nuevo la mano y tirando de mí.

SHE | Albalia Fanfic | AlbayDonde viven las historias. Descúbrelo ahora