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Capítulo 7. El novio

El chico seguía dando golpes a la puerta hasta que Natalia se dió cuenta y fue a abrir corriendo la puerta de la habitación.

Al abrir pude ver a un chico al otro lado de la puerta. Era un chico moreno pero de piel blanca, con una camisa moderna y unos vaqueros. La verdad, era muy guapo.

- Mikel.. ¿Que haces aquí? - dijo Natalia aterrada.

- Te estuve llamando toda la noche para que vinieras a pamplona, vistete y sal, tenemos que hablar. - dijo el chico nervioso. - Te espero en la salida.

No sabía quien era ese tal Mikel. Quizás era su hermano y había pasado algo, o quizás era el chico con el que discutía por teléfono. De todas formas, lo último en lo que quería pensar es que podía ser su novio. Natalia no me había contado nada de ningún chico, novio o pareja.

Después de todo el tiempo que hemos pasado juntas estos días me imagino que me lo habría contado así que no me quise rallar más e iba a esperar hasta que volviera para preguntarle.

Pasaban las horas y Natalia no habia vuelto. María, Julia y yo estábamos desayunando en la cafetería aunque yo no participaba en la conversación.

Había decidido no rallarme por Natalia pero después de anoche necesitaba aclararme y para ello quería explicaciones. Estaba impaciente por saber algo de Natalia y las chicas lo notaron.

- Alba, estás empanada. ¿Qué te pasa? - dijo María.

- Pensaba en si estará bien Natalia. - dije preocupada.

- Probablemente ya estaran echando el polvo de reconciliación. - dijo Julia riéndose

Estaba alucinando con la frase de Julia, a veces era demasiado directa, cosa que hoy agradecí.

- ¿Es su novio? - pregunté.

Mi corazón se empezó a acelerar, deseaba que la respuesta fuera un no.

- Sí, tía. Pensaba que lo sabías. Bueno, en verdad a mi me lo ha dicho Miki hace un rato. Pero como pasas tanto tiempo con ella pensaba que habríais hablado de su novio. - me explicó Julia

Las palabras de Julia fueron directas al corazón. Noté como éste se encogía y de repente sentí un bajón enorme. Primero, no podía creer que Natalia no me hubiera hablado de él. Y segundo, ayer Natalia me besó. Yo quería jugar pero fue ella quien se lanzó. No entiendo porque hace algo así teniendo novio. ¿Acaso yo solo era un juguete para ella?

Quizás estaba magnificando la situación. Quizás para ella solo fue un simple beso estando borracha. Pero yo ya había admitido que me estaba empezando a gustar Natalia y aunque aún nos estábamos conociendo, empecé a sentir cosas por ella.

Pasé el resto del día sola en la habitación, ni siquiera había salido al comedor de la residencia para comer, no tenía apetito. Y Natalia, seguía sin aparecer.

María apareció por la habitación después de la comida.

- Nena, te he estado buscando para ir a comer juntas, ¿Por que no has venido a comer? ¿Qué te pasa? - dijo María acercándose a mi cama.

No dudé en contarle la verdad. La Mari era mi mejor amiga y necesitaba desahogarme.

- Es Natalia, ayer me besó. Y no me había dicho que tenía novio. Y no se que soy para ella, no se si esta jugando conmigo, no se si le gusto, no se nada. - dije desesperads tapando mi cara con las manos.

- Alba, tranquila. - dijo María acariciándome el brazo. - Si te consuela, Miki era el único que sabia que Natalia tenía novio. Ninguna más lo sabiamos. Y lo del beso.. ¿Cómo fué?

- Natalia estaba fumando en el balcón mientras estabais en la fiesta. Me preguntó quien me gustaba por la frase que dije jugando al "yo nunca" y cómo estaba borracha quise jugar un poco a provocarla, al final acabamos en mi cama y me besó. - le expliqué.

- Quizás ella sólo estaba jugando,¿no Alba? A ti te gusta Natalia, ¿Verdad? Te lo noto. - preguntaba María

- Sinceramente, no lo quería admitir porque tenía muy reciente lo de Alex pero Natalia me está ayudando mucho a superarlo y me esta empezando a gustar, bueno, me gusta mucho. - confesé

- No se en que situación os besasteis pero Natalia ha estado contigo estos días que no cagaba, si tiene novio desde luego nadie lo hubiera dicho viendo como está contigo. Pero aún no conozco muy bien a Natalia y no se abre en todos los temas, ya lo sabes, así que te recomiendo que le pidas explicaciones pero de momento te distancies de ella, no te conviene pasarlo mal. ¡Aquí estamos para disfrutar! - dijo María animándome.

- Gracias Mari. - dije dándole un abrazo.

María tenía razón, lo mejor será hablar con Natalia y mantener las distancias, sin dar mucha importancia al tema del beso.

Pero a quién quería engañar, ya no había vuelta atrás, Natalia me gustaba demasiado.

Al cabo de un rato entró Miki a la habitación.

- ¿Os apetece ir al bar de enfrente a tomar algo antes de cenar? Natalia nos quiere presentar a su novio.- preguntó Miki

María me miró esperando mi respuesta y asentí.

- Claro, vamos. - dije yo con voz triste, inevitablemente.

Esperamos en la entrada del bar a Julia y Joan y entramos los 5 juntos. Vi a Natalia en una mesa hablando con Mikel. Parecían contentos.

Nos acercamos a ellos y antes de sentarnos Natalia nos presentó a Mikel.

- Este es mi novio, Mikel. - dijo Natalia, parecía orgullosa.

Saludamos todos a Mikel, mientras yo seguía flipando con la situación.

Finalmente nos sentamos todos en la mesa y Mikel nos contó un poco sobre su vida. Pero la verdad es que no presté atención, no podía parar de fijarme en Natalia y vi como estaba super pendiente de Mikel, ni siquiera me miró desde que entré en el bar.

Mikel cayó muy bien a todos los del grupo, y si no fuera porque su novia me gustaba, yo también diría que era muy majo.

Llevábamos una hora ya en el bar y se me estaba empezando a hacer insoportable. Natalia estaba tonteando con Mikel casi todo el tiempo, hasta que vi como Mikel se lanzó a besar a Natalia. Ella le correspondió pero se separó rápido. En ese instante me miró. Después de una hora en el bar, me acababa de mirar por primera vez y después de besarse con Mikel.

No era consciente de lo que me gustaba Natalia hasta ese momento.

Sentí como si algo en mi interior se desvaneciera, provocando un enorme vacío. Sin poder controlarlo, mis ojos se empezaron a humedecer de lágrimas. Fui corriendo al baño.

Después de todo lo que había vivido con Alex no quería involucrarme emocionalmente con nadie y tuvo que aparecer Natalia para jugar con mis sentimientos cuando menos lo necesitaba.

Estaba enfadada con Natalia principalmente por no contarme nada sobre Mikel. Interiormente, estaba casi asumido que probablemente me besó porque estaba borracha y quería jugar conmigo. Ahora estaba segura que Natalia no sentía nada por mí.

Al entrar al baño del bar empecé a llorar sin parar. No paraban de caer lágrimas por mis mejillas hasta que oí como alguien entraba. Intenté aguantar la respiración de espaldas a la puerta, para que no me viera ni me escuchara llorar.

Noté como alguien me abrazó por detrás.