Worry - Brad Simpson.

41. Cuenta regresiva p2.

3 meses para la boda de Jo y James.

Emily.

Cuando desperté, vi a Monty a mi lado, dando suaves suspiros mientras dormía plácidamente. Le acaricié el rostro a la vez que una sonrisa se formaba en mi rostro. Demonios, este chico sí que me tiene rendida a sus pies.

Monty abrió levemente los ojos y, en cuanto me vio, una sonrisa se le formó en el rostro.

—Buenos días, preciosa. — Saludó con una voz ronca que, si hubiera estado de pie, me hubiera dejado en el suelo.

—Buenos días, guapo.

— ¿Llevas mucho rato mirándome, acosadora? — Preguntó con una sonrisa, me reí.

—No tanto. — Respondí. — Tengo hambre ¿Quieres desayunar?

Me miró dudoso.

—Bueno sí, pero tengo hambre de otra cosa. — Me miró, levantando las cejas.

Me carcajeé.

— ¡Tú no te cansas jamás!

—Claro que sí. Solo que contigo a mi lado, no puedo detenerme.

Se sentó sobre la cama, me tiró de la cintura y me sentó sobre él. Me besó los labios, a la vez que me quitaba su camisa, con la que había dormido la noche anterior; me dejó expuesta, solo y exclusivamente para él. Tiré de su cabello y lo besé con fuerzas, mientras sus manos iban desde la parte de atrás de mi cuello, hasta mi espalda baja.

—Oye, Emily, creo que... Oh por Dios. — Ni siquiera escuché cuando Tristan abrió la puerta de la habitación, pero nos había encontrado en condiciones no aptas para todos. Monty rápidamente me cubrió con las sábanas. — ¡Demonios, chicos! Lo siento, no sabía que te habías quedado anoche.

—Pues, ya ves. — Monty se carcajeó al ver como Tristan se sonrojaba.

— ¡Por favor, Tris! ¡Ya vete! — Le grité, escondiéndome bajo las sábanas. Tristan obedeció de inmediato, dando un golpe en la puerta al salir. — Oh por Dios, que vergüenza. Seguro irá a contárselo a James.

Monty volvió a reír.

—No lo creo, debe querer morirse de la vergüenza, como tú. — Dijo entre risas. — Ahora, en que estábamos. — Me besó los labios de nuevo, mientras me tomaba la cintura, pero lo alejé.

—Oh no, Montgomery Brown. No hasta que estemos solos. — Me puse nuevamente la camisa.

— ¡Emily! ¿En serio vas a dejarme con este problemita? — Dijo, señalándose. Esta vez, fui yo quien se río. — Eres cruel.

Me recosté sobre él, acercándome tentativamente a sus labios; él gustosamente se acercó, esperando ansioso el momento en el que lo besara, pero me acerqué a su oído y dije.

—El baño está al frente. —Susurré y salí de la habitación.

— ¡Como te odio! — Me gritó y volví a carcajear.

¡El cumpleaños N°6 de Farrah es hoy! y, James y Jo le habían preparado una increíble fiesta, donde sus amigos de la escuela y por supuesto, familia estaban invitados.

Jo me había pedido que viniera temprano, ya que necesitaban ayuda con los preparativos, ya que la fiesta se hará en casa de Connor y Jenn porque nuestros departamentos no son lo suficientemente grandes para tanta gente y todas las cosas que los chicos habían conseguido.