36. Caminos separados

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ALBA POV

Andábamos mi padre y yo detrás de Natalia, cada uno con nuestra mochila, tengo ganas de ver a Marina y a mi madre pero por otro lado no quiero dejar a Natalia, no saber que hace y no poder tocarla durante un tiempo.

-Alba quiero decírselo yo- interrumpió el silencio mi padre.
-¿Qué?- pregunté mientras caminamos hacia el nuevo apartamento.
-Quiero decirle a Marina y Rafi lo de la niña, déjame a mí, no quiero agobiarte...
-gracias- le sonreí y le abracé mientras caminamos.

Llevábamos andando 25 min y me empecé a cansar, Natalia lo notó al ver como caminaba más lento
-Alba te dije que si necesitabas parar lo haríamos- dijo mientras nos sentábamos en un banco.
-ya pero no sé...no quiero ser una carga aunque es evidente lo que hay...
-Alba no eres la carga de nadie- me abrazó

Reanudamos la marcha después de un par de minutos en el banco, al poco tiempo de caminar Natalia desvío el camino hacia un par de calles, había arbustos y niños corriendo, parece un barrio tranquilo, nada que ver con las disputas del centro.
-por aquí- indicó Natalia, hasta que llegamos a un montón de portales en uno de ellos paró-Marina y Rafi están en la puerta del piso- dijo de nuevo mientras introducía la llave en el portal y subimos las escaleras.

Vi a Marina y mi madre y me lancé a abrazarlas.
-¡Mamá! ¡Marina!- grité y las abracé fuerte, al abrazo se unió mi padre.
-Ha pasado mucho tiempo, un mes y algo Alba- dijo mi madre quitándose las lágrimas- todo ha ido súper bien, gracias a Natalia.

Me giré a verla y estaba apoyada en la pared mientras nos miraba, tenía una mirada que gritaba muchas cosas, y entre ellas el miedo y la pena.
-¡Quiero verlo ya!- gritó Marina emocionada, Natalia se acercó y le tendió una llave a Marina.
-Aquí está, yo solo tengo la copia del portal- dijo seria
-¡Entremos!- gritó mi hermana pero yo solo podía mirar a Natalia que se acercó a mí, una vez abierta la puerta todos nos miraron y reinó el silencio hasta que ella habló.

-Te quiero Alba-dijo cabizbaja, levanté su barbilla para que me mirase a los ojos.
-Yo también Nat...pero no estoy de acuerdo con esto...
-Sabes que es lo mejor para vosotras, os cuidaré en cuanto pueda- empezó a soltar lágrimas y nos fundimos en un tierno beso, tampoco duró mucho
-¿Cuidarlas?- preguntó mi madre- No entiendo nada

Mi padre se acercó a mi madre, Natalia me miraba muy triste.
-Ahora te lo explico cariño- dijo mi padre a mi madre.
-Nos vemos en nada- dijo Natalia con una mueca y colocando un mechón de pelo detrás de mi oreja.
-nos vemos en nada...- la abracé muy fuerte y desapareció escaleras abajo, no me apetecía nada tener que contarle todo a mi madre y agradezco que lo haga mi padre.

El piso tenía 3 habitaciones, bastante pequeñas pero eso daba igual, 1 baño y un salón-cocina, después de ver el piso mi padre nos llamó al sofá, se viene lo peor.
-Bueno Marina, Rafi...hay algo que debéis saber- mi padre cogió mi mano y me miró sonriente.
-Esto no pinta bien...- dijo Marina.
-no quiero montar un drama porque está todo hablado, pero sé que es impactante saber la noticia...- mi madre se empezó a poner nerviosa.
-¡Miguel dilo ya!- reprochó mi madre
-Alba está embarazada- dijo serio y apretando mi mano.

Mi hermana se levantó y me abrazó, no parecía triste aunque sé que tampoco está encantada.
-es de Max, pero no vamos a decir nada a su familia, todo queda entre nosotros, Natalia y sus amigos, pero como no conocen a Max da igual- terminó mi padre que se levantó a abrazar a mi madre que estaba en shock- vamos a ser abuelos cariño.
-esto ...es impactante- dijo mi madre- pero me alegro que Natalia te apoye.
Nos levantamos y nos dimos un fuerte abrazo.

NATALIA POV

Salí del piso con un nudo en la garganta, tardé apenas 20 min en volver al edificio ya que no me encontraba bien, caminé muy rápido hasta que entré en el hall, María estaba sentada en la mesa del hall y no aguanté más, me rompí a llorar contra la pared, María me abrazó.

-ya está Eilan, ya pasó...- me abrazaba muy fuerte y se separó cuando paré de llorar.
-lo siento- dije quitándome las lágrimas con la manga de la cazadora.
-es normal, va a ser duro pero piensa que cuánto antes empecemos antes acabaremos con estas mierdas- me tocó la mejilla.
-no quiero que la niña de Alba nazca aquí, no en este momento, no quiero tener miedo a salir a la calle María...- me abrazó de nuevo.
-pues luchemos para eso y para muchas cosas más.

*****

Ya llegamos a la revuelta, conseguimos hablar con el mayor número de personas posibles y nos dirigimos hacia un edificio donde se reunían los políticos, íbamos armados con piedras y poco más, pero somos muchos, casi 1800 personas, somos fuertes y lucharemos por los derechos que nos han quitado.

Me separé un segundo de María y junto a un grupo empezamos a asaltar el edificio, yo me quedé afuera rompiendo los cristales con piedras a gritos de libertad y de un nuevo acuerdo, la cosa se estaba descontrolando un poco y unas luces azules captaron mi atención, la policía.

Corrí en busca de María, sé que la policía empezará a disparar y no quiero acabar en un hospital, eso significaría que mi padre vendría a por mí, por lo que me separaría de Alba y no es una opción.

Caminé entre la multitud saltando en busca de una melena rubia y larga, la divisé a lo lejos, me acerqué como pude y María se estaba morreando con un chico bastante tatuado.
-¡MARIA!- grité mientras me acercaba más- ¡VAMONOS!
Ella se separó del beso y me miró, rodó los ojos.
-¡Eilan deja de interrumpirme!- gritó enfadada, no se oía nada por el grito de la multitud.
-¡María la puta policía!- grité agarrándola del brazo, se giró al ver las luces policiales y empezó a correr conmigo en dirección al edificio.

Escuchaba disparos por todos lados y yo agarraba a María con fuerza, conseguimos salir de aquel lugar y nos metimos en el edificio.
-¡Joder que adrenalina!- gritó María quitándose la cazadora y el pañuelo.
-Vamos a cenar anda-

Llegamos al comedor y todos nos esperaban, cenaron entre risas pero yo la verdad es que tenía ganas de meterme a la cama y de dormir.
-mañana hay que coger la radio, seguro que se ha liado parda- dijo María mirándome
-vale- contesté antes de levantarme y entrar en la habitación.

Me puse el pijama y me metí entre las sábanas, el olor de Alba estaba impregnado en la almohada y es imposible no recordar lo ocurrido, mi realidad, Alba no estaba conmigo.

María y Marta entraron a la habitación apagaron las luces y durmieron, yo estaba despierta, recordé una cosa así que me reincorporé y abrí el cajón de la mesilla, saqué el gorro de Alba, me lo había dejado por si la echaba de menos que lo cogiera, huele a ella, todos los recuerdos aparecen en mi cabeza y rompí a llorar.

Recuerdo los besos, las caricias, cualquier contacto con Alba era como sentirse en el cielo, y aquí estoy yo, hecha una bola y agarrando el gorro de Alba con todas mis fuerzas, lo acercó a mi cara y sigo llorando, noto peso en la cama pero todo es muy oscuro.
-venga Eilan... suéltalo todo...-dijo María que me abrazaba por detrás- en nada vas a volver con ella ya verás.

Noté peso en la cama de nuevo pero alguien se puso delante de mí.
-vamos a dormir contigo, así no estás sola- dijo Marta, asentí y la abracé fuerte, doy gracias a que es un colchón grande para permitir esto.
Tengo las mejores amigas del mundo, un verdadero tesoro, consigo parar de llorar y duermo abrazada al gorro de Alba, con Marta y María abrazándome.

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¿Cómo estamos? No me iréis a matar, que no las he pegado un tiro por dios... Natalia solo quiere proteger lo que Ama y a veces hay que sacrificar cosas... ✨

Qué pedazo de amigas son María y Marta, las puto amo también!!! ♥

No olvidéis votar, compartir y comentar cada capítulo qué hay alguno que otro que me parto el culo enserio, sois lxs mejores!!! 🤘♥
~ Perita M ~ 🍐

La Guerra // ALBALIA Donde viven las historias. Descúbrelo ahora