La Guerra // ALBALIA

Epílogo Parte 1

~ 8 meses después ~

ALBA POV

-¿seguro que voy bien?- me preguntó por 8 vez Natalia.
-Nat, ya te he dicho que mi hermana lo dijo así, además, lo puso por el grupo- sonreí.
-No suelo ir a bodas así vestida, no quiero cagarla y menos con tu hermana- dijo sin dejar de mirar a la carretera- también te digo que podría haber escogido otro lugar para la celebración y no en medio de un monte en Santander-
-Ya sabes como somos las Reche, además, nos dijo que fuéramos casual, nada de vestidos y trajes...- ella me miró durante un segundo y río.

Alma empezó a llorar y me giré para verla, podía verla porque aunque estuviese sentada a contramarcha la pusimos un espejo delante apuntando hacia nosotras.
-Nat para, me voy a poner atrás para que deje de llorar- dije seria.
-No- me respondió.
-¿Cómo que no?- se me escapó una risa nerviosa.
-Coge un disco que hay en la guantera- señaló un sitio en el coche- vamos Alba.
-¿Enserio?
-¿Alba por Dios quieres hacerme caso?- dijo sin mirarme, con los ojos fijos en la carretera.
-Vale...¿Cuál es?- pregunté de nuevo.
-el que pone N.L
-Vale- saqué el disco y lo puse en el coche, Natalia empezó a tocar cosas y me estaba poniendo nerviosa por escuchar a Alma llorar tanto, sabía que no era de hambre pero no le gusta perdernos de vista durante mucho rato.
-Atenta- me dijo sonriente.

Un piano empezó a sonar y una voz también, una voz que me sonaba y mucho.
-¿Nat eres tú?- dije con la boca abierta, ella asintió y me giré para ver a Alma, se había callado.
-¿Ves? Nada que no pueda solucionar Natalia
-estoy flipando pe...pero ¿cómo?- dije atónita.
-me fui con María varias veces al estudio y grabé varias canciones, está se llama Don't Ask, y ya veo que si le gusta a Alma ha valido la pena ...-
-Lo tuyo no es normal, enserio...- puse mi mano encima de la suya en la caja de cambios y me sonrió- ¿Cuánto queda?
-25 min según el GPS-
-Vale, espero que lleguemos a tiempo a la comida.
-Eso no puedo confirmártelo- nos empezamos a reír y a escuchar las canciones de Natalia el resto del viaje.

***

Aparcamos el coche en una especie de parking y entramos al hotel que estaba en medio de la nada, Natalia llevaba a Alma en brazos, ya tiene 9 meses casi 10 y está enorme, aunque sigue siendo igual que cuando nació.

Buscamos el comedor y vi a mi madre, en cuanto nos vio vino a saludar corriendo, me dio un fuerte abrazo y un par de besos a Natalia, mi madre cogió a Alma.
-¡Madre mía pero que mayor!- dijo besando sus mejillas- antes de pasar os voy a enseñar vuestra habitación.

Mi madre con Alma en brazos nos guiaba hasta una habitación, sacó unas llaves y abrió.
-No sabía si Alma usa cuna o no, pero la pedí con cuna- dijo mi madre, entramos Natalia y yo, dejamos la mini maleta que traíamos y la mochila de Alma- vamos abajo y así veis a la familia.

Bajamos de nuevo y había un montón de gente, familia que hacía siglos que no veía, saludamos a todos y llegamos hasta la mesa grande, allí estaban Marina y Marco, su marido.
-¡Alba!- dijo Marina que se tiró a abrazarme- como te he echado de menos...
Marina se separó y me presentó a marco, estábamos de celebración, la ceremonia ya se celebró por lo que ya estaban casados.
-Enhorabuena Marco- le saludé con dos besos.
-¡¡Pero bueno!!! ¡¡Mi cuñi con mi sobri!!- dijo Marina que saludó a Natalia y cogió a Alma en brazos- está enorme...mira Marco, la Reche más pequeña.

Estuvimos conversando un rato hasta que nos sentamos todos, yo estaba al lado de Natalia, y esta con Alma en brazos que observaba todo con detenimiento, hablaba con mis primos y les presenté a Natalia, estuvimos toda la comida riendo y recordando anécdotas de cuando éramos pequeños, llegó la hora del café y Alma empezó a llorar de hambre, Natalia me miró y supo que hacer, vi como se acercaba a una pequeña mochila que bajamos al gran comedor y cogió un biberón, lo metió al microondas y se sentó en la mesa de nuevo.

Observé cómo Alma estaba sentada en sus piernas y Natalia sujetaba con una mano el biberón mientras que con la otra se tomaba el café.
-¿Cuándo se ha hecho tan mayor?- pregunté viendo a Alma comer.
-Ni idea Alba, a veces pienso que me han cambiado de niña- nos empezamos a reír y terminamos de comer.

Mi hermana había organizado una especie de discoteca, terminamos de comer muy tarde pero antes de la fiesta nos sirvieron cosas para picar, comimos un poco de todo y se apagaron las luces pillando a todos por sorpresa, me giré y busqué a mi madre entre las luces rojas, azules, blancas y amarillas que relucían por todo el salón, estaba con Alma en brazos, enseñándole a toda la familia.

Mi hermana se subió al pequeño escenario
-¡Hola a todas de nuevo! ¡¡Es la hora de bailar!! No tengáis vergüenza y ...¡A disfrutar!- dijo con una copa de vino en la mano, busqué a Natalia con la mirada y levantó la copa de vino junto a mi hermana, entonces se levantó al escenario y mi madre le dio a Alma, Natalia antes de coger el micrófono la cogió de los mofletes, ella sonrió como era costumbre y todo el mundo gritó "Ooh.."
-Hola a todos- dijo sonriente- quería daros las gracias por dejarme venir, y por aceptar quién soy y como soy, tampoco quiero dar mucho la chapa pero le doy las gracias a toda la familia Reche por dejarme entrar en vuestras vidas- se despidió dando besos y dejó a Alma con mi madre de nuevo.

Estuve bailando un rato con mi hermana y Marco, me lo estaba pasando increíble, busqué a Natalia y me acerqué, bailaba con mi primo Joan.
-Joan porfi ¿Me dejas a mi pareja?- dije sonriendo, él se despidió de nosotras y Natalia se acercó.
-¿Tienes celos?- dijo sonriendo
-No, solo quería estar contigo...- la coloqué un mechón de pelo detrás de la oreja, mi madre se acercó a nosotras.
-Perdonar por la interrupción pero Alma está incómoda ¿sabéis cómo hacer que no llore?- preguntó aupando a la bebé que miraba a todos lados, Natalia asintió y observé lo que hacía con mi madre, se acercó a la mesa donde teníamos la mochila y sacó un chupete, se lo dio y besó la cabeza de Alma, después se despidió y me pilló mirándola, se acercó a mí riendo

-¿No me dejas ni un segundo eh?- dijo acercándose, no sé ni cómo la entendí entre la música.
-No, me encanta verte- me dispuse a acercarme pero me interrumpió.
-Un minuto- me hizo una mueca y desapareció entre mis familiares, volvió a los minutos donde mí.
-¿Qué ha pasado?- pregunté a escasos centímetros de ella.
-Le he pedido una canción a Marco- dijo, colocó sus manos en mi cadera acercándome a ella y coloqué mis brazos rodeando su cuello, una música que me sonaba empezó a escucharse por el salón.

Empieza a sonar Don't Ask

-¿Es la tuya?- dije sonriendo mientras juntábamos nuestras frentes y bailábamos lentamente, ella asintió.
Cada compás con el piano se sumergían en pequeños pasos que dábamos ella y yo, bailábamos tranquilas y mirándonos, puse mi cabeza en su hombro y ella en el mío, acariciaba su cuello mientras giramos y ella movía mis caderas con sus manos hacia ella, levanté la cabeza dándola un beso en el cuello y ella me lo devolvió mordiéndome la oreja
-¡Nat!- dije riendo mirándola desde abajo, ella me sonreía.
-Tú...me provocas...- dijo apartándome un mechón de pelo de la cara.
-Tengo algo que enseñarte, pero lo hago en la habitación- susurré en su oído y noté como me sonreía.

Pasaron varios minutos y bailábamos de todo, canciones pegadas y otras nos volvíamos locas, si la gente no nos conociera se pensaría que llevábamos varias copas de más, apareció mi madre de nuevo.
-Chicas creo que está niña tiene que irse ya- dijo acercándose a nosotras, Alma dormía contra su pecho, Natalia me miró y cogió a Alma sin despertarla.
-gracias por cuidarla mamá- dije despidiéndome de ella, fuimos a buscar a Marina y a despedirnos de todos.

Cogí la mochila y subimos a la habitación, Alma dormía en el pecho de Natalia, ella la sujetaba con cuidado.

[CONTINUARÁ...]

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Tengo más sorpresitas preparadas jeje, no bajéis la guardia ♥✨

PD: me tomaré un tiempo después de que esto acabe, los estudios me están afectando sorry 😰