38. Inquietud

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NATALIA POV

Faltan dos días para el gran golpe, camino con María hacia un edificio me dijeron que allí hablaríamos con las personas que nos iban a ayudar, entramos al edificio y un chico muy amable nos acompañó hasta una pequeña sala, María y yo nos sentamos

-Lo tenemos- dijo una de las chicas que nos miraban sonriendo-
-¿Qué tenemos exactamente?- preguntó María.
-tenemos los 4 edificios que debemos controlar, llevaremos banderas, piedras, y todas la cara tapada- dijo de nuevo la chica, pero entonces habló el chico de su lado.
-Natalia Lacunza- dijo serio- hija del coronel general del ejército en contra de nosotras e hija de una política, ¿cómo sabemos que tenemos que confiar en ti?
-por el simple hecho de que odio a mis padres, y no vivos con ellos, tenéis que aprovechar que estoy aquí porque tengo licencia militar, amigos militares, sé manejar armas y tengo algo muy preciado en vuestro bando, que quiero cuidar- dije seria delante de ellos.
-¿Y se puede saber que tienes en nuestro bando para defender de esa manera?- preguntó colocando las manos encima de la mesa
-Es personal, no quiero decir el que- solté algo nerviosa.
- deberíamos estar interrogándote a ti- me defendió María.

Estuvimos varias horas discutiendo y organizándolo todo, tenía buena pinta, muy buena pinta, teníamos la manera de cortar las calles para que la policía no nos estorbase, lo teníamos todo organizado y en 2 días atacaremos, a las 16 de la tarde en 4 puntos a la vez, yo y María iríamos al central, al más importante.

Salimos de la reunión y nos cubrimos los rostros hasta casa, fuimos al comedor y cenamos con los demás.
-illo illo ¿sabéis que tengo?- dijo Marta que se levantaba y cogía algo de detrás de la mesa del buffet.
-sorpréndeme- dijo María riéndose.

Marta cogió la bolsa y la dejó en la mesa sacando varias bebidas.
-¡HOY FIESTA SHAVALEHH!- gritó Julia cogiendo las cervezas.
-¡Cerveza!- gritó María mientras se habría una.
Todas nos emocionamos y subimos a la sala de los sofás, empezamos a beber y a bailar al ritmo de un canal de la radio de música bastante pobre, pero es lo que deja la censura.

Llevábamos varias copas de más todas y notaba el mareo y el dolor en mi cabeza.
-Eyy...- dije manteniendo el equilibrio- me voy a dormir ¡Gracias Marta!
Me acerqué a ella y le di un pico juguetón de esos que nos dábamos de vez en cuando, obviamente quiero a Alba.

Llegué a mi cama y me puse el pijama con dificultades, una vez dentro de la cama notaba como todo da vueltas pero conseguí dormir, son las 4 de la mañana, mañana es la gran revuelta y tengo el día de hoy para quitarme la resaca.

ALBA POV

Mi madre salía por las mañanas a comprar y mi padre había conseguido trabajo en una zapatería al lado de mi casa, con el diminuto sueldo de mi padre nos manteníamos.

-¡Alba!- gritó mi hermana que entró a mi habitación muy feliz- ¡mira lo que he encontrado!
Sacó un montón de lápices de colores y hojas, libretas y un montón de material para pintar.
-Ostras Marina ...- cogí los folios y me entraron unas ganas de pintar impresionantes.
-Así podrás entretenerte, ya te has leído esos libros 30 veces- dijo riéndose, se acercó y la abracé muy fuerte.
-Gracias Marina- dije conteniendo las lágrimas de la emoción de poder pintar, había colores por todos lados, acerqué una silla a la ventana y una tabla de madera hacia de escritorio, pinté durante horas.

-¡Chicas a cenar!- gritó mi madre, las dos salimos de nuestras habitaciones y junto a mi padre nos sentamos en los taburetes a cenar, comíamos variado a diferencia de cuando estábamos en el pueblo, aquí en la ciudad hay de todo, y más.

Me senté en el sofá hablando con Marina hasta que mi padre nos interrumpió.
-¡Alba! Mira...- encendió la tele y solo se veía un canal, los demás estaban censurados.
-¿Qué pasa?- desvié mi atención y fijé la mirada en la tele.
-"El gobierno prevé nuevas revueltas y ha llamado al servicio militar, se hará uso de él contra las personas que se nieguen a parar, no quieren hablar con ellos y se niegan a cambiar a nada de lo política asignada, continuaremos informando"- mi padre apagó la tele.
-¿Natalia no dirige esos grupos?- me preguntó.
-Si...- me quedé un poco en shock
-si llevan a los militares ella no lo sabe, les van a hacer una emboscada...- dijo mi padre triste.
-¿Qué significa eso?- preguntó Marina que obviamente no entendía nada.
-Que van a matar a mucha gente Marina, y entre ellos puede que a Natalia...- empecé a llorar, no me veía capaz de quedarme con los brazos cruzados.

Me levanté del sofá en dirección a la puerta pero mi padre se puso delante, mi hermana y mi madre nos miraban muy confusas.
-¿Dónde vas?- dijo mi padre enfadado.
-Tengo que decírselo, ¡Joder! ¡Quítate!- grité intentando apartarle pero nada.
-¡Alba! ¡No puedes ir!- contraatacó mi padre.
-¡La van a matar!- grité muy nerviosa por todo, noto que me falta el aire.
-¡No la van a matar Alba ella es más lista que toda esa gentuza!- me reprochó.

Noté como me faltaba el aire y no me salían las palabras.
-Yo..yo ..no ..Nat...- me empecé a encontrar mal y mi padre se dio cuenta rápido y me abrazó.
-venga Alba, cálmate...- me sentó en el sofá y mi hermana me abrazó también.
-No...n..no quiero que l..a..pase nada- rompí a llorar y la ansiedad subió de nuevo.
-Alba tranquilízate por dios...- susurraba mi padre en el abrazo.

Vino mi madre y me dio un vaso de agua que tomé con gusto.
-Alba...no te puedes estresar así...- me habló suave mi madre, ya sé a lo que se refiere y sé que tiene razón, pero es inevitable- vamos, te llevo a la cama.

Me llevó a la cama y me tumbó en ella, se sentó a mi lado.
-¿Estás mejor?- me preguntó rozando mi mejilla.
-Si... perdón...soy una inconsciente...- dije arrepentida por mi comportamiento.
-es normal Alba, pero piensa que no solo te afecta a tí ¿Vale?- me dio un beso de buenas noches y salió de la habitación después de cerrar la persiana.

Tengo miedo, no tengo manera de comunicarme con Natalia, de saber si cuenta con ello, si está preparada, qué planes tiene, si me echa de menos, tengo tantas incógnitas en la cabeza que no pude controlar la ansiedad.

Tengo que empezar a controlarme a mí misma, como dice mi madre no solo me afecta a mí, pero no puedo evitarlo, he desarrollado dependencia con Natalia, la necesito a mi lado...ya solo me queda esperar, pintar y dormir, hace 1 semana que no la veo y se me hacen eternos estos días.

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El siguiente capítulo es otro de los capítulos clave de la novela jeje, a mí me encanta pero como lo que me gusta a mí, vosotrxs no lo queréis ni en pintura pues no sé qué pensar...

No olvidéis de votar, compartir y comentar cada capítulo qué os quiero mucho!!! ♥

Capítulo cada día a las 00.00 y entre las 14-16 hora española 🖤

~ Perita M ~ 🍐

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