Cuarenta y cuatro.
Mis guardaespaldas dejaron mis maletas en el suelo de mi casa. Les agradecí y pedí que se retiraran, cosa que hicieron. Estire mis brazos, el vuelo fue agotador tal vez una siesta no me caería mal. Recordé que lo que le dije a Kayla, así que supongo que ya debería estar aquí.
Reviso el living, la cocina, el comedor e inclusive el patio, en resumen busque en toda la planta de abajo pero nada.
Hasta ahora se me ocurrió la gran idea de llamarla.
-¿Kayla? -Grito.
-Arriba. -Su voz se escucha en la planta de arriba con una risita acompañada.
No tardo mucho en subir, la extraño y lo único que quiero es abrazarla y acorrucarme con ella. Mi habitación esta a oscuras, lo único que la ilumina es una pequeña vela. Frunzo el ceño y me siento en mi cama, retiro la gorra de mi cabeza y llamo a Kayla, de nuevo.
-¿Kayla?
-Justin. -Susurra.
Volteo mi mirada al baño y mis ojos se abren de inmediato. Kayla lleva un vestido cabaret negro y por encima un saco, con unas medias al muslo sostenidas por ligueros y unos tacones negros. Se acerca a mi, les digo que el sueño que tenía ya se esfumo.
-¿Que...?
-¿Te gusta mi tiara? -Me interrumpe.
Trago gordo.
Toma mi mano y la pone en uno de sus muslos y lo masajeo lentamente. Puedo ver la pequeña tiara negra con piedras color plata en su cabeza, ella me mira, quita la tiara y sacude su cabello.
-Mejor. -Susurro.
-¿Y qué tal mi saco?
-Muy elegante, pero creo que sin el te verías aun mejor. -Digo sin quitar mi mano de su muslo.
Ella me sonríe picara y se quita el saco.
-¿Te gustan mis medias?
Tira del liguero que sostiene la media del muslo derecho y esta cae. Yo ayudo a jalar el liguero de la media del muslo izquierdo y cae.
Le sonrió y ella se muerde el labio.
No espero más y la beso, no tarda en abrir la boca para darle paso a mi lengua y así que nuestras lenguas jueguen. Sus manos juegan con mi cabello. Pongo mis manos en su trasero y lo aprieto.
Antes de que pudiéramos continuar el móvil de Kayla suena.
Kayla me mira y suelta una risita tonta, sonrió divertido y ella atiende.
-Debí ponerlo en vibrador. -Se queja y atiende.
-Hola....En eso estaba Amanda, gracias por interrumpir........No voy a comprar un Twister........Tampoco un traje de policía, ni de conejita y mucho menos de vampira.........Si, me la tome ayer Amanda, por Dios estas peor que mi mama......Ya cállate, luego hablamos.
Corto.
Me siento en la cama y siento a Kayla a mi lado, la miro y se ve triste, aunque con ese vestido no la puedo tomar enserio.
-Kayla, ¿Qué pasa? No es que no quiera seguir lo que teníamos. Solo dime que tienes y tratare de entenderte.
-Nada.
-No me digas que no pasa nada cuando la última vez que nos vimos estabas cuidando de mi y ahora estábamos en pleno acto sexual.
-Es solo que, Justin ¿Me quieres?
-Claro ¿Qué clase de pregunta es esa? -Frunzo el ceño
-Es solo que alguien me dijo que tu solo me querías para tener sexo.-Me miro triste.
-¿Quien lo dijo?
Aprieto la mandíbula.
-No importa, el caso es que tengo miedo Justin, miedo de que me dejes o de que no te merezca.
-Kayla deja de decir eso que yo soy el que no te merece, ¿Si? -La miro y sus ojos ya están empañados de lágrimas. -Tu mereces flores en la puerta y café por la mañana. Te mereces honestidad a cada día y mereces ser besada a cada hora. Tú mereces que te recuerden lo hermosa que eres. Kayla tú te mereces el mundo y créeme que soy afortunado al tenerte.
Ella sonrie y me besa.
-¿Te gustaría continuar lo que dejamos pendiente?
-Con gusto. -Respondo.
No tardo mucho en comenzar a besarla.
La quiero aunque sé que no la merezco.
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Fama {Fanfic -Justin Bieber}
FanfictionNadie dijo que la fama seria tan difícil de manejar.