ʏ ʟʟᴇɢᴀꜱᴛᴇ ᴛᴜ

Capítulo 8

8

-¿Qué haces aquí? – murmuro, cerrando un poco más la puerta, evitando la mirada curiosa de la modelo pelinegra.

-Umm... un "Hola ¿Cómo estás?" no estaría mal Inuyasha – sonrío sarcástica, se cruzó de brazos poniéndolos debajo de su pecho con la intención de hacer más revelador su escote.

-Repito, ¿Qué haces aquí? – dijo ya cabreado, si no se apresuraba tal vez y Kagome apareciera.

-Bueno, estoy haciendo un trabajo para una revista de aquí, escuche que estabas en el hotel y solo quería comprobarlo con mis propios ojos – se inclinó en dirección a él, Inuyasha retrocedió un paso recibiendo una mirada de reproche de la modelo.

-Bien, ya lo comprobaste ¿te vas? – la estaba echando sutilmente.

-¿Pero qué dices? Podemos pasarla bien, como lo hacíamos antes – estiro uno de sus delgados brazos acariciando el de Inuyasha.

Hace dos años que la azabache modelo no mantenía contacto con el peli plata y no era porque no quería, en los eventos que ella asistía esperaba verlo presente, pero no, él no asistía. Intento tener su número, pero al parecer sus contactos eran insuficiente para tener el número de su apuesto ex novio falso, la palabra "falso" no evito que tuvieran relaciones sexuales, ella aun pensaba que el sexo con él fue el mejor en sus 25 años de vida.

-Gracias, pero no – intento cerrar la puerta, pero ella se interpuso impidiendo la acción – Kikyo, vete – no tenía deseo de lidiar con ella, no con su novia presente.

-Recuperemos el tiempo en que no nos vimos, ¿recuerdas cuando la pasábamos bien en mi departamento? Aun no me olvido lo bien que la pasábamos.

-Fue solo sexo, Kikyo – respondió tajante.

-Y puede seguir siendo solo sexo– sonrío con picardía mirando sin pudor alguno al peli plata, más específicamente miraba una parte en particular del cuerpo esbelto del cantante.

-¿Inuyasha? – ¡mierda! se maldijo internamente Inuyasha, a sus espaldas la voz de Kagome se escuchó, sus pasos cada vez más cerca se escuchaban - ¿Quién es? – Inuyasha no tuvo de otra que abrir la puerta por completo, la mirada desconcertada de Kikyo se posó en la figura de Kagome quien ahora se instalaba al lado de su novio. -¿Ella es? – pregunto Kagome al lado de él, Inuyasha quiso reír por la mirada de sorpresa de Kikyo al no saberse reconocida.

-Ella es Kikyo, cariño, Kikyo ella es Kagome mi prometida – Kagome lo miro con disimulada sorpresa ¿Por qué decía eso tan de repente?, Inuyasha la tomo de su mano, tomando la de ella en donde posaba el anillo, elevo su mano y le dio un beso el dedo en donde se encontraba la joya que Inuyasha le había puesto cuando ella se había dormido, Kagome miro con sorpresa el anillo en su dedo anular ¿desde cuándo tenia puesto eso? Aparte de no estar actualizada a su entorno era despistada.

-¿Prometida? – Kikyo no miraba las expresiones de Kagome, estaba sorprendida por las palabras que había dicho su ex – Es broma ¿cierto? – intento sonreír, pero lo único que lograba era un intento de mueca. Kagome logro disimular y la veía con una sonrisa orgullosa, si no mal recordaba, Kikyo era el nombre de su ex novia falsa.

-Mucho gusto – se abstuvo de darle la mano o darle un saludo de mejilla, no sentía nada lindo al ver a la ex de su novio – Inu, hice algo para comer, no tardes – lo fulmino con la mirada, dándole un claro mensaje de advertencia de que se apresurara en entrar, sin decir nada más se adentró al interior, Inuyasha a sus espaldas escucho un sonoro suspiro seguido de un juramento de su azabache.