ʏ ʟʟᴇɢᴀꜱᴛᴇ ᴛᴜ

Capítulo 26

26

-Está bien, está muy bien – Bankotsu había terminado de leer el fragmento que Kagome sola, le había agregado a la novela, el cual estaba muy bien, una trama entretenida y con mucho suspenso hasta el final. Era algo impredecible, por lo que le gustaba y mucho.

-Qué alivio – murmuro Kagome echando un suspiro.

-Lo enviaremos cuanto antes a la editorial para tener una pronta respuesta – Kagome asintió - ¿Ya tienes pensado el diseño de portada?

-De hecho, ya la hice – Kagome busco en su portátil la imagen y se la hizo ver al moreno.

Bankotsu estaba encantado con la presencia de la azabache, si en la secundaria le gustaba solo con verla a la distancia, ahora conociéndola le encantaba. Para él, Kagome era una chica fuerte y valiente, había pasado sola la muerte de su familia- Inuyasha había estado con ella- la idea de que ella estuviera con el famoso cantante no le gustaba en nada, le tenía envidia a Inuyasha Taisho, solo por el hecho de tener a Kagome a su lado.

Pero lo aceptaba, a regañadientes pero lo aceptaba, Kagome se encontraba bien al lado del cantante, ella lo amaba y notaba muy bien que él la amaba a ella con la misma intensidad, inclusive diría que mucho más.

-Perfecto – dijo en cuanto observo la portada hecha por su alumna y ex compañera.

Procedieron a imprimirlo y enviárselo a la editorial, la cual lo chequearía para ver si la novela tenía futuro alguno.

-¿Vamos a festejar? – sugirió Bankotsu con una radiante sonrisa blanca. Aun así no dejaría de intentar.

-En otra ocasión será, he hecho planes ya – respondió Kagome. Había quedado con Midoriko para preparar un gran pastel, el cumpleaños de Inuyasha quedaba cerca.

Camino hasta la salida en compañía del moreno, Totosai vendría por ella, Inuyasha tenía una reunión con su jefe de la discográfica para ver el éxito de la gira. Totosai esperaba por ella en el auto estacionado en la entrada, se despidió fugazmente del moreno y subió al coche.

-Buenos tardes Totosai – saludo tomando asiento en el lugar de copiloto.

-Kagome...- le sonrió poniendo en marcha el coche.

-Inuyasha no ha vuelto ¿No?

-No, no ha vuelto, creo que aquella reunión tendrá para el rato – informo, Kagome asintió energéticamente, tendría tiempo en practicar en la repostería.

Había practicado siguiendo las instrucciones de Midoriko mientras ella hacía la cena, y los bizcochuelos le habían salido perfectos, justo en el punto, esponjoso y para nada pegajosos, también levantado de todos los lado en pares. Siguió comiendo del bizcochuelo junto con Midoriko mientras esperaban que se terminara de cocer la lasaña casera.

-¿Qué acostumbra hacer él en el festejo de su cumpleaños? – le pregunto sentada en la mesada, columpiando sus pies, comiendo del bizcochuelo.

–Él no acostumbra hacer nada, a Inuyasha le realizan una fiesta, su manager y alguno más, él siempre asiste. Asisten varias figuras públicas como él, tal vez te lleve para que te conozcan – le dijo mientras miraba el interior del horno.

–No me da mucho ánimo, pero sí él quiere llevarme, no me negaré – se bajó de la mesada en cuanto vio que la lasaña ya estaba lista.

– Inuyasha aún no llego... - murmuro Midoriko.

–Totosai dijo que tardaría en la reunión. Empecemos nosotras, ya es un poco tarde – Midoriko asintió y repartió dos generosas porciones entre ellas, tomaron asiento en las banquetas frente a la mesada.