Wingless || Ben Hardy

Capítulo 26. La verdad.

Cuando empieza a notar luz sobre sus párpados, no tarda en presionarlos con fuerza antes de empezar a pestañear rápidamente para calmar el leve picor que le invade. Pasan solo un par de segundos hasta que, finalmente, abre los ojos poco a poco para ver que se encuentra en una habitación de la enfermería de la mansión; en un principio frunce el ceño con confusión al preguntarse que hace allí, pero una ola de recuerdos no tarda en golpear su mente haciendo que se inquiete aún más.
Inmediatamente se incorpora levemente sobre su cama, y es entonces cuando ve que en la habitación se encuentra Raven en uno de los sillones.

  - Vaya... mira quien se digna a despertar al fin- saluda la mutante con una sonrisa-. Te has echado una buena siesta, Lydia.
  - Yo... ¿Cuánto tiempo llevo aquí?- la chica tiene mucha confusión en su cabeza y demasiadas preguntas, pero de momento lo único que logra articular es eso.
  - ¿Inconsciente? Cuatro días- Lydia abre los ojos de par en par cuando escucha a Raven, y esta al percatarse de ese gesto no puede evitar reír levemente-. Tranquila, no tienes daños graves ni nada de eso. Simplemente te golpearon en la cabeza muy fuerte, con la mala suerte de que te dieron en un sitio algo sensible. Pero te han hecho muchas pruebas y todo está correctamente.
  - ¿Qué pasó exactamente? ¿Y los demás?- las preguntas comienzan a salir de su boca sin control, y justo al darte cuenta de un detalle pequeño pero importante, se pone aún más rígida y seria- ¿Dónde está...
  - Espera, espera- le detiene Raven, al adivinar todo lo que la joven quiere saber-. Todo esto es mejor que te lo cuente Charles. Ha estado esperando desde que llegamos a que despertaras para hablar contigo.

Sin decir nada más, Raven sale de la habitación dejando la puerta entreabierta tras ella. Lydia juguetea con la sábana de su cama, nerviosa e impaciente, esperando a Charles o a quien quiera que la otra chica haya ido a buscar. Apenas un par de minutos después llega, efectivamente, el profesor en su silla de ruedas;el hombre cierra la puerta tras él y sonríe ampliamente a la joven nada más llegar a su lado, y ella imita ese gesto.

- ¿Cómo estás, Lydia?
- Confusa- Charles ríe sonoramente tras la sincera respuesta de la chica, que también ríe algo nerviosa.
- Si, lo comprendo. Supongo que tengo muchas cosas que explicarte.
- Por favor- termina por decir Lydia, haciéndole un gesto con la mano para que comience a hablar cuando quiera.
- Bien... voy a empezar por lo que ocurrió finalmente en la misión- Charles comienza a relatar lo sucedido con voz firme, y la chica le escucha con concentración-. ¿Recuerdas todo antes de que cayeras inconsciente?- Lydia asiente ante la pregunta- De acuerdo, entonces sabrás que dimos la orden de abandonar el lugar rápidamente. A tus compañeros se lo explicamos al regresar, pero obviamente a ti no he podido contártelo- la chica vuelve a asentir mientras él sigue con su explicación, expectante ante sus palabras-. Finalmente Raven, Hank y yo conseguimos llegar hasta Psylocke y Magneto; estaban donde habíamos previsto. Ellos definitivamente no se esperaban nuestra entrada... y obviamente hicieron todo lo que pudieron por defenderse. Al final, conseguimos acabar con la chica, pero Erik escapó. No sabemos cómo, ni a dónde, simplemente desapareció cuando vio que nos habíamos ocupado de su compañera. Entonces fue cuando dimos orden de irnos, ya que a lo mejor podía estar preparando un ataque aún mayor y no podíamos arriesgarnos a perderos a todos en algún ataque sorpresa; os pillaría muy desprevenidos y Magneto puede hacer cosas muy letales. Así que, decidimos salir de allí.
  - ¿Los otros mutantes que luchaban junto a ellos, no huyeron con Erik?- pregunta Lydia aprovechando una pausa en su discurso.
  - Ellos no tenían ningún sentimiento de lealtad con Erik y Psylocke, si es a lo que te refieres. En realidad, no tenían ningún tipo de pensamiento propio- la chica frunce bastante el ceño, en señal de confusión ante las palabras de Charles, y este se dispone a continuar-. Nos dimos cuenta de que todos estaban un poco... "ausentes". Al bajar al resto de pisos en la huida pude apreciarlo en su forma de moverse, y más tarde cuando fuimos a por los que quedabais dentro lo vi en sus ojos. Al intentar leer su mente, no escuchaba nada; pero no era un nada igual que el tuyo, era diferente. No sé explicarlo... contigo simplemente es como si no estuviera ejerciendo ningún poder sobre ti, pero en ellos era como si escuchara ruidos sin sentido. Eso suele ser un claro ejemplo de que alguien externo está controlando esa mente.
  - ¿Magneto y Psylocke?- pregunta de nuevo la chica, y el hombre asiente.
  - Eso es. Resulta que a todo su "ejército" le habían inyectado un tipo de sustancia que anula el pensamiento propio y la voluntad. Simplemente tenían un único objetivo en su mente, que era realizar la misión que ellos dos les encargaran y enfrentarse a cualquiera que supusiera una amenaza. Al descubrir eso, los trajimos aquí también para que expulsaran esa sustancia de su cuerpo y pudieran volver a la normalidad. Muchos ya se han ido, pero unos pocos siguen aquí recuperándose. Lo que todos tienen en común, es que no recuerdan nada desde el momento en el que desaparecieron.
  - Entonces, todo lo que os decía Erik sobre las señales que indicaban que todos los que desaparecían era para unirse a los otros de forma voluntaria...
  - Era para no levantar más sospechas, eso es- confirma Charles al adivinar las palabras de Lydia-. En realidad, por eso mismo te quería a ti también en su ejército, Lydia. No era para el estatal, si no para este. Quería aprovechar tus poderes y anularte la voluntad inyectándote esa sustancia.