Hacia mi luz

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JESSIE

Alex: ¿Estás bien? ¿Pasa algo? Te ha cambiado la cara al ver el nombre en tu móvil de Félix, ¿Quién es?

- Es..... mi ex

- Alex: Ahí, ¿ y te sigue llamando? ¿sigue queriendo contactar contigo?

- Si, es un poco pesado. Quiere que vuelva con él y no estoy por la labor, la verdad. Ahora que pensaba que con los días se había olvidado de mí, vuelve a insistir.

- Alex: ¿Con los días? ¿Qué lo habéis dejado hace poco?

- La verdad es que si, hace unos días.

- Alex: ahh, lo siento. – Me dice siendo respetuoso.

- No, no lo sientas, estoy mejor sin él. No era un buen novio y me siento mejor estando sola.

La verdad es que si, que estoy mejor sola que con novio, no quiero novios por una temporada, me digo a mi misma para convencerme.

Cuando me doy cuenta, hemos llegado a nuestro destino, doy al botón de parada y le digo que estamos cerca. Él se levanta de inmediato y me sigue hacia la salida del bus. Veo como coge el teléfono y llama por teléfono.

- Alex: Hola, sii, ya he llegado, vente viniendo para el bar. ¿Te importa si estamos acompañados? . Ya lo verás. – Le dice a alguien por teléfono, pensando que quiere decir con acompañados, cuelga el teléfono y me mira sonriendo.

Llegamos al bar y me decido a seguir mi camino, cuando me dispongo a despedirme e irme, me suelta de repente.

Alex: Gracias por traerme, no sé qué habría hecho sin tu ayuda, por haber accedido a traerme, no puedo hacer menos que invitarte a cenar, ¿aceptarías? - Me dice con una sonrisa, a lo que me quedo confundida, por la proposición de la cena.

- ¿Pero no habías quedado con unos amigos? No quiero molestar la verdad. – le digo entiendo por qué digo a la otra persona que iban a estar acompañados.

- Alex: No molestas. – me dice casi de inmediato.

- Bueno, vale acepto. – y nos adentramos en el bar en busca de una mesa libre.

Unos minutos después se acerca por la puerta un chico, no muy alto, moreno, de pelo corto, con gafas de sol, vaqueros y una camiseta que le queda algo justa, como si se hubiera comprado una talla menos. Se quita las gafas del sol mira por todo el bar hasta que ve a Alex y se acerca.

- Alex: Hola tío, ¿qué pasa? – le dice mientras le da un abrazo. Charlan hasta que Alex se dirige hacia mí y me presenta.

- Alex: Este es Danielo. – Se me acerca y me da dos besos, nos sentamos los tres, y me dice Alex que me apetece comer.

Miro la carta y lo único que me apetece es una ensalada y agua, asique le digo lo que me apetece y Alex alza la mano para que se acerque el camarero.

- Hola, ¿que desean?

- Alex: la señorita tomará una ensalada y agua, mi compañero un cola y cazón en adobo y yo tomaré puntillitas y croquetas caseras con cola, gracias

- A ustedes – nos contesta el camarero sin quitarme la mirada – y se dirige a cocina para ordenar las comandas.

Los chicos empiezan a hablar de videojuegos y otros asuntos y yo me empiezo a preguntar qué hago aquí, me ha invitado, pero podría haberme negado. De repente me espabilo cuando Danielo empieza a hablarme.

- Danielo: ¿Entonces estáis en la misma clase, ¿verdad?

- Si, lo estamos, pero no hemos hablado mucho en los dos cursos que llevamos de clase.

- Alex: no ha surgido ocasión – me dice acercándose un poco hacia mí.

Me quedo un poco incómoda, y observo como el camarero se acerca con los platos y bebidas. Lo deja todo en la mesa y le doy las gracias. Me vuelve a sonreír y se aleja.

- Alex: Bueno, ¿entonces Alex b. y Victor no ha podido venir?

- No, no ha podido venir, pero me han confirmado que si vendrán para mi cumpleaños – dice Danielo observándome con atención mientras yo empiezo a comer de mi ensalada.

- Eso está perfecto, y ¿donde lo vas a celebrar? – dice Alex con atención.

- Pues creo que una discoteca de la ciudad de Jeleix.

- Alex: ahh, está bien. Pero necesitaríamos el coche de Ángel.

- Si, es verdad, habrá que invitarlo. Qué remedio. – le dice Danielo a Alex delante mía, y me quedo pendiente de la conversación alucinando como solo por el coche de una persona van a invitarlo, y no porque es amigo suyo y quiere que vaya a la fiesta.

- Compraremos bebida para esa noche entre los dos ¿no? – dice Alex a Danielo y noto mientras voy terminando mi ensalada como Danielo no me quita la vista de encima y Alex se da cuenta de ello.

- ¿Qué pasa? – digo cuando veo que los dos se quedan observándome y empiezo a preocuparme.

- Danielo: Se que no nos conoces mucho, pero ¿te gustaría venirte a Jeleix con nosotros para celebrar mi cumpleaños? No te preocupes por cómo ir allí, que tenemos coche de un amigo.

- Umm, no se la verdad – le digo mientras me doy cuenta donde me he metido, no me conoce de nada y ya me invita a su cumpleaños. No sé exactamente que pretende Danielo y Alex.

- Danielo: Además van a venir unas amigas, no estarás sola – me dice intentando convencerme.

- Vente – me dice Alex – Además esta fiesta te ayudará a olvidarte de tu ex que no paraba de llamarte, te aseguro que te lo pasarás bien con nosotros, vente.

.... Bueno – le digo pensando que prefiero salir a quedarme en casa, ya que no tengo a nadie que me prohíbe salir como hacia Félix conmigo. Ya soy libre, así que ... ¿Por qué no pasarlo bien una noche sin que nadie me diga que tengo que hacer?

Me auto convenzo mientras me estoy terminando mi cena de ensalada con nuevos planes en marcha para este próximo fin de semana.