Shun: Yo estaba hablando con...- El menor hizo una pequeña pausa para decir el nombre, mientras el rubio estaba a punto de estallar de curiosidad- hablaba con June.
Hyoga: ¿Quién es ella? -dijo el rubio ya un poco más aliviado pero con la misma curiosidad-.
Shun: Era mi mejor amiga cuando estaba en la Isla de Andrómeda, ella estuvo conmigo todo el tiempo que yo estuve ahí -explicó pero al recordar a June no pudo evitar que se le dibujará una sonrisa - hoy me habló, nos pusimos a platicar un poco y me comentó que vendrá a quedarse un tiempo aquí en la cuidad.
Hyoga: Oh que bien amor, me alegro por ti mi vida -sonrió, acercándose a su novio para abrazarlo con sus brazos por la cintura- sé que ya es algo tarde pero, ¿Qué te parece si vamos a dar una vuelta al bosque? - preguntó viendo que el menor sólo asintió- vamos -dijo para después tomar la mano de su pareja para salir de la mansión y dirigirse a un pequeño claro en el bosque donde disfrutaron de una conversación pacífica sin hacer más-.
P.O.V. Seiya
*Cuarto de Seiya* (10:00 p.m.)
Hoy fue un día realmente largo, me encontraba muy cansado, inclusive me dolía un poco la cabeza pues no comí la suficientemente bien al tener a todos los invitados en casa, no quería verme demasiado "abusivo" con la comida.
Pasé la mayor parte del día pensando en Ikki aunque fuese algo infantil o de "mentalidad de una chica adolescente" no me pareció así aunque siguiera pensando en los accidentes que han ocurrido con Ikki; me sentía realmente bien al tenerlo cerca aunque me pusiera nervioso amaba poder disfrutar de los leves momentos juntos.
Tenía en mente dar pasar un rato en el centro comercial que está al otro lado de la ciudad. ¿Por qué? Fácil, tenía una pista de hielo a la cual deseaba ir pues quería aprender a patinar. Además de ser una buena oportunidad para poder hablar y estar un poco de tiempo con Ikki, él sabe patinar de forma espléndida y eso lo sé gracias a una vez que visitamos una laguna congelada junto a Saori y los demás.
Decidí que podría ser buena idea marcar a su celular sin razonar la hora que era y que podría estar dormido; tomé mi celular, tecleé su nombre y en automático su número apareció en el teclado, toqué el botón de llamar y esperé los tonos, uno, dos, tres, cuatro veces sonó hasta que escuché un quejido como respuesta a la llamada, supongo estaba dormido.
[📞]
Seiya: ¿Ikki? Soy Seiya -me sentí tonto al decirlo con voz temblorosa pues hace unos segundos estaba confiado-.
Ikki: ¿Seiya? Hola -su tono de voz era más suave de lo normal, logrando hacerme sentir encantado con su voz- ¿Pasó algo para que me llames a esta hora? -me quedé momentáneamente en silencio, seguía maravillado con su voz que olvidé responder- ¿Le pasó algo a mi hermano o a ti? -sonó más normal pero con un cambio que hacía sonar su preocupación-.
Seiya: Todo está bien, todo está bien -lo tranquilicé primero antes de hacer mi invitación- te llamaba para preguntarte sí querías, no sé, ir conmigo al centro comercial en la que se encuentra la pista de patinaje -lo último que dije fue de forma rápida y nerviosa, me sonroja por mi propia actitud tan nerviosa- ah, claro, sí no deseas acompañarme, lo entenderé, no hay probl- -no me permitió terminar la oración pues oí como aclaraba su garganta-.
Ikki: Me distraje un momento, disculpa, me encantaría -su voz fue realmente suave, apenas logré escucharlo pero esa última palabra dio un vuelco a mi corazón- quiero decir, me parece bien -volvió a aclarar su voz logrando tener su tono de voz habitual- tengo algunas cosas que atender temprano, ¿Está bien a las 2:00 de la tarde?
