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—¡Aloha! Aquí estoy de nuevo

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—¡Aloha! Aquí estoy de nuevo.

Catté entró por la puerta, mientras ponía Lifer, de MercyMe, (te la dejaré aquí arriba, pues...De alguna manera esta escena combina muy bien con esa canción); traía unas gafas de sol en los ojos y una chaqueta con brillitos. Traía un mini-ventilador en la mano, y se lo ponía frente a su rostro para que su cabello revoloteara con el viento. Soplaba un globo de su goma de mascar y vestía unos Vans que contrastaban el azul de su pantalón.

—¿Me extrañaron? Apuesto que sí...—Continuó mientras caminaba hacia el sofá, intentando imitar a esas divas de las películas. Hasta que de repente ¡Bam!  tropieza con algo y cae al suelo; comenzó a fingir que hacía break dance y luego se puso de pie.—Me caí a propósito, por si acaso, necesitaba para practicar ese paso.—Volvió a reproducir la canción en su teléfono y siguió su despampanante caminata hacia el sofá.

Jonny estaba sentado frente a ella, la miraba con confusión mientras extendía las manos extrañado.

—Niña—dijo.—Te fuiste al baño solamente.

—Pero hacer una entrada tan elegante nunca está demás.—Tomó asiento finalmente e intentó hacer un globo con la goma de mascar de nuevo, pero solo consiguió que ésta se pegase en su cara. —Además,—volvió a decir mientras intentaba limpiar lo pegajoso de aquel dulce en sus mejillas con lo que parecía ser una servilleta de tela.—No puedo evitarlo, me encanta caminar con estilo.

—En primer lugar,—el señor entrevistador quita la tela de las manos de Catté.—Esto no es una servilleta, es mi corbata nueva. Y en segundo lugar, eso no fue caminar con estilo.

—Como quieras.

—En fin, tengo que hacerte unas preguntas para poder pasar al siguiente capítulo.

—De acuerdo.

—Tengo entendido que Ryan y tú tuvieron una conversación acerca de lo que le pasó a él cuando era niño...La razón por la que te dijo que podrías llamarlo "Papaya", para ser específicos.

—¿Cómo sabes de eso? Que yo recuerde, nunca lo comenté.—Debby, quien estaba a punto de alzar un caramelo de una fuente sobre la mesa (y lo hubiera logrado si no hubiera sido porque Jonny le propinó un periodicazo en la mano, a manera de indicarle que no podía comer de aquellos dulces); frunció el ceño mientras observaba curiosa al entrevistador.

E2C se acomodó el cuello de la camisa y tragó saliva, me miró de reojo y le pedí que inventara algo rápido.

—Tengo otras maneras de averiguar las cosas, niña.—Volvió a mirarme y asentí en aprobación, esa frase sin duda había resultado una buena escapatoria; pues como se lo hemos mencionado antes, no podemos decirle que Ryan nos lo contó.— Así que, continuemos...Después de esa tarde que pasaron juntos ¿Tú comenzaste a aceptar sus propuestas para salir?

—Ehmm...No.—Catté se recostó sobre el respaldar del sofá y soltó un suspiro.-No lo hice.

—¿Por qué?

—Bueno, yo también creí que todo cambiaría pero...Pasaron una serie de cosas que...

—¿Qué tipo de cosas?

Catté repiquetó los dedos sobre el reposabrazos, formó una línea con los labios y miró de una manera analítica su alrededor.

—Empezaron después de aquella tarde en el parque.—Comenzó hablando.—Llegaba tarde a clases, y había alguien muy curioso guardándome un asiento a su lado.

—¿Ryan?

—No...

—¿Mark?

—Tampoco.

—Entonces ¿Quién?

Catté inspiró.

—Robbin.

N/A: Hola❤¿Cómo están?💕 Vaya...Robbin le guardaba un asiento a Debby ¿Por qué creen que sea? Y ¿Por qué Ryan no estaba en el salón? ¿Y dónde estaba Mark? Bueno, todo esto lo veremos en el capítulo que sigue...😱🙈

¡Nos vemos  muy pronto!😍

¡Los quiero!❤

...

Catté, no. Estoy intentando terminar esta nota de autora y...No puedes tomar de los dulces en la fuente, porque, bueno...Porque no.

Psst, Jonny ¿Crees que deberíamos decirle que no son dulces de verdad y solo están allí de adorno? Yo creo que sí...Aunque...Oh, tienes razón, es probable que no se los coma.

Catté, ¡Catté! ¿Qué haces? No es un dulce, es poliestireno...Sé que no eres Bolt para que te haga daño pero...Muy bien, no te lo tragues ¡Claro que no te gustó! Eso era obvio, no era necesario que lo digas. Te dije que no lo comieras.

¿Que por qué tenemos dulces de mentira? Pues, necesitábamos adornar esa mesa, las gomitas se acabaron más rápido de lo que pensamos, y no teníamos tiempo para ir a comprar más. Lo sé, lo sé...Fue una mala idea. ¡Y no, Catté! Tampoco te comas esa pizza. Sí, sí...También necesitábamos adornar la repisa.

Mientras Te Cepillas Los DientesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora