¿tú no sabes amar?

13.

Hoy me encuentro de maravilla. Ayer en la noche Kilian me llamó y dijo que deberíamos salir, esta vez los dos solos. Sabía que en cualquier momento diría eso y, no es que la pasemos mal con Eme y Sandri, pero las pocas veces que hemos salido juntos han sido... Diferentes, por eso acepté. Necesito salir, quiero distraerme.

No quiero pensar en nada de lo ocurrido ayer. Entiendo que cuando uno está enojado, dice cosas que no siente y eso fue lo que pasó ayer con Andra.

De eso estoy segura.

—Demoras mucho Tanit, ¡odio esperar! —¿pero qué le pasa?.

—Quedamos a las 9 y son las 8:50 —reprocho. Kilian no me va a tratar así y menos hoy que todavía estoy algo sensible.

—Supuse que sabías diferenciar entre sarcasmo y verdad —niega varias veces con su cabeza y luego prosigue con una sonrisa en su rostro—. Sube, preciosa.

Apenas lo hice, arrancó.

—¿A dónde iremos? —pregunto sin mirarlo.

—¿Te acuerdas que me dijiste que tu infancia fue diferente? ¿que tu madre no te dejaba salir y esas cosas? Pues... —hace una pequeña pausa y la sonrisa de su rostro no desaparece, al contrario, aumenta más —, Iremos a Beto Carrero World.

¿Y ese lugar? Nunca lo he escuchado. Bueno, casi no conozco nada de mi país, pero, ¿pensar en divertirme ahora? Ya no soy una niña y eso me hará aburrir o sentir incómoda.

—¿Es un... ?.

—Parque de atracciones y queda en brasil —me interrumpe con cierto tono de burla ¿o así sonríe él?. Dejo de ver por la ventanilla para mirarlo con pasmo, no creo que sea verdad —.¿Qué? ¡no me veas así! Regresaremos en dos días. No tengas miedo.

Debe seguir con su sarcasmo es eso. No creo que salgamos del país solo para ir a un parque de atracciones, ¡Kilian no está tan loco! ¿o si?.

—¡Sí, claro!.

Quita la sonrisa de su rostro e intenta ponerse serio, y dije intenta, porque está apretando su boca para no intentar sonreír. Entonces, sin despegar su mirada del frente, inclina su cuerpo un poco hasta donde estoy para poder abrir la guantera, al lograrlo, de inmediato vuelve a su sitio.

Lo miro un poco confundida por lo que acababa de hacer, pero no me queda de otra que mirar lo que hay allí adentro, por algo lo dejó abierto. Al hacerlo pude comprobar que sí existen los dos boletos, solo eso. ¿entonces es verdad?. No, esto es una broma. Cojo esos boletos y leo todo, una y otra vez.

Destino Brasil.

—¿Qué? ¿Es en serio? —pregunto todavía sin creerlo. Me cuesta mucho tomar en serio algo como esto.

—Si, Tanit —responde algo cansado de mis dudas.

¡Ok! Entonces es verdad, ahora si puedo creerlo y no, ni siquiera voy a considerar esta invitación. Nada es gratis en esta vida y estoy segura de cómo terminará esto.

—No Kilian, no tengo mucha plata para gastarlo en esto. —al escuchar que niego su invitación, detiene su auto y lo parquea a un costado de la carretera. Me pongo tensa.

—Te estoy invitando, no te estoy pidiendo plata, Tanit —lo dice sin mirarme y sus brazos colgando encima del volante.

—No puedo Kila, en serio, es mucho. Aparte no traje ropa, así que no.

Claro que quiero ir a Brasil, solo de imaginar que conoceré otro país me hace llenar de mucha ilusión, pero por orgullo, al menos no debo permitir que él pague todo.