Las primeras páginas

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Querido Diario:

Hoy acabo de abrir tus páginas y serás mi confidente.
Quiero primero presentarme, mi nombre es Serena Tsukino, tengo 30 años, vivo en Japón y soy arquitecta de peofesion. Soy una chica soñadora a pesar de mi edad; no soy rica, pero tan poco tengo carencias. Hace más de diez años estoy casada con Dárien Chiba, el amor de mi vida. Él es un hombre por demás apuesto, inteligente, centrado, no pude haber elegido mejor persona para estar a mi lado, él también es arquitecto, tenemos una hermosa casa y afortunadamente ninguno de los dos quiere tener hijos.

El motivo de abrir tus páginas es confesar mi más grande secreto. Desde hace tiempo, además de amar a mi marido, también amo a alguien más, su nombre Seiya Kou. Él es el tipo del que te enamoras sin pensarlo, es guapísimo, de un cuerpo atlético, un sedoso pelo negro enmarca su bello rostro. Tiene lo que  siempre se busca en un hombre, es la persona que sacó lo mejor de mi, hasta he llegado a pesar que es mi otra mitad. Aunque para él yo no sea esa persona.

Déjame te cuento como pasó todo.

Por ahí del mes de enero del año 2017 me encontraba sumergida en Facebook, ya sabes tonteando por ahí, dando likes por aquí y por allá, cuando de pronto encontré una publicación que me causó mucha gracia, era de alguien con un pseudónimo raro, así que me puse a indagar más en su perfil. Chequé fotos, imágenes publicadas, etc.. Me apeteció mandarle una solicitud de amistad, pues al final del día me gusta entrar y ver tonterías en internet para no aburrirme. En fin, el tipo aceptó y fuimos amigos oficialmente.

El tiempo transcurrió y a mí me encantaba ver todo lo que publicaba. Me divertía con sus ocurrencias y yo de tanto en tanto le escribía comentarios a sus publicaciones. Todo iba bien, mi vida amorosa era genial, Darien ha sido muy bueno conmigo, éramos felices.

Hasta aquí quiero hacer un paréntesis, he pensado que tal vez mi vida necesitaba un vuelco, necesitaba algo distinto, pues la monotonía me tenía absorta. El mismo ir y venir de aquí a allá. Tal vez el destino me tenía deparado esto, enamorarme de alguien más, claro, en secreto y amar al grado de sentir que te desgarra la piel, por no ser correspondida.

En fin, como decía, mi vida era genial, bueno no super genial, pero sí muy buena, como dije líneas arriba, Darien Chiba es el amor de mi vida, era el amor de mi vida, no, si es el amor de mi vida... bueno, es que ya sabes, a veces pienso que sí puedes amar a dos personas a la vez ¿o no?

Pero creo que me estoy adelantando mucho, primero quiero decirte como conocí a Dárien...

Éramos jóvenes, acabábamos de salir de la universidad y nos amábamos, así que decidimos vivir juntos y posteriormente nos casamos.
Nuestra historia es muy sencilla, Dárien y yo somos tan afines que acordamos dedicarnos a nuestra carrera y no tener hijos, y eso facilitó establecer un negocio. Así que, además de pareja, somos socios.

Durante estos más de diez años, he sido feliz, la verdad es que sí, Dárien me hace muy feliz y junto con nuestro negocio, todo a marchado de maravilla, pero como dije líneas arriba, sentía que necesitaba algo más, posiblemente estaba cayendo en la monotonía. Así que, cuando apareció Seiya Kou,  mi vida comenzó a tener sentido nuevamente.
La locura fue, cuando me di cuenta que con las charlas transcurriendo día con día, me enamoré perdidamente de él.

Me siento muy mal por todo lo que estoy a punto de escribir, pero ésta es la única manera que encuentro de sacar todo esto que siento por Seiya.

Me duele que no me ame, me duele  no ser correspondida. Sé que no tengo vergüenza para escribir lo que escribo, pero la verdad es, que lo amo, lo amo tanto, que si él me diera una oportunidad sería capaz de dejar en ese mismo instante a Dárien.

El Diario de Serena TsukinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora