Querido diario:
Todo es tan complicado...
Después de desvanecerme, desperté en una ambulancia, un paramédico me tomaba signos vitales y me dio algo para calmarme...Estaba vuelta loca, Seiya y Dárien agarrándose a golpes y yo tenía que sacarlos a ambos, bueno, porque aunque no quisiera, Dárien aún es mi esposo y tampoco soy una desalmada para dejarlo ahí, aunque bien podría quedarse un día más, solo por ser tan obsesivo.
- Serena... - Seiya me ve y corre hacia mi.
Estoy sentada en una banda mientras espero su salida.
Me abraza.
- Gracias por sacarme.
Le devuelvo el abrazo. - ¿Estas bien?
- Si. Y ¿Dárien?
- Mañana vengo por él... - digo sin ganas y él se guarda su comentario.
Caminamos a la salida y yo me muerdo la legua por no soltarle una sarta de cosas. Estoy agradecida pero enojada.
- ¿Me llevas? - pegunta coqueto.
- No.
- ¿Que? ¿Por que no? - está completamente desconcertado.
- ¡Te dije que no me buscaras!
- ¡De que hablas... si no hubiera llegado, quien sabe que te hubiera hecho! - dice molesto.
- Te agradezco infinitamente que me hayas ayudado, pero solo agravaste las cosas, conociendo a Dárien sé que piensa que hay algo entre tú y yo y lo puede utilizar en el juicio, me puede acusar de infiel - veo su expresión y me enojo más - Sí, le fui infiel contigo ¿ok? pero no necesitaba saberlo.
- Tranquila, yo tampoco quería que pasara esto, pero al ver cómo te tenía sujeta y cómo ponías resistencia, la sangre me hirvió, te estaba lastimando... ¿que querías que hiciera? - su tono ahora igual de molesto que el mío.
- Ya te dije que te lo agradezco, pero justo él me preguntaba si tenía otro hombre, ahora todo debe de ser claro para él - levantó la voz - Ya sé que me equivoqué, ya sé que ahora te debo resultar muy hipócrita porque primero me enamoro de ti y ahora me preocupa que Dárien se entere, pero lo siento ¿si? tal vez antes no vi todo lo que podía pasar.
- Serena... Yo no pienso nada de eso. Solo quiero estar contigo, quiero protegerte, me importas ¿que no lo ves?
- Pues si te importo, respeta mi espacio, te dije que cuando arreglara todo yo te buscaría...
- Enserio ¿quieres que me aleje? - me toma del rostro y acerca sus labios a mi, estamos a milímetros.
Mis pupilas se dilatan como respuesta a su cercanía. Comienzo a respirar entre cortado, Seiya causa muchas sensaciones en mi.
- Una palabra tuya y me voy...
Ni siquiera puedo emitir palabra. Su mirada es tan profunda que me hipnotiza. Lo amo, lo amo como loca.
Lo tomo del cuello y lo beso. Me toma por la cintura y me acerca a él. Entrelazamos nuestras lenguas. ¡Maldita sea! ¿Por qué soy tan débil?
Cuando nos separamos por la falta de aire puedo sentir como mi corazón comienza a latir normal, cosa que no hacia mientras nos besábamos.
- Bombón... no quiero que te alejes por favor - dice con la voz entre cortada mientras acerca su frente a la mía.
- Seiya, entiende, tengo arreglar primero las cosas con Dárien. Desde que me enamoré de ti no he hecho las cosas bien.
- Yo tampoco he hecho las cosas bien contigo. Déjame estar a tu lado, apoyarte... si quieres no te volveré a tocar, solo quiero estar a tu lado y ser el amigo que necesitas en estos momentos, tú fuiste mi amiga mucho tiempo y estuviste siempre para mi, en mis peores momentos...
Tiene razón, siempre lo apoye, tal vez si solo nos vemos como amigos, no tenga problemas en el juicio. Y luego, cuando ya haya quedado libre podré hacer lo que quiera. Podré por fin volver a entregarme a Seiya como tanto ansío y podré demostrarle claramente cuánto lo amo.
Tal vez, también este tiempo sirva para que el piense si quiere estar conmigo o no, porque esa también es una posibilidad y tengo ser sincera conmigo misma. Es más, hasta sirve para saber si de verdad Michiru que va a quedar sin hacer nada.
La maldita inseguridad hace mella en mi.
Como dicen por ahí, cada quien habla por la experiencia, y en mi experiencia tengo muchos sinsabores con Seiya, es lógico que me sienta así. Bueno eso quiero creer.- Está bien... seremos amigos. - finamente acepto.
- Bien - me suelta y subimos al auto.
- Gracias. - digo de la nada.
- ¿De que?
- Por salvarme, la verdad si me dio miedo - acepto mirando hacia otro lado.
- No te preocupes, mientras yo esté cerca no dejaré que te haga daño. - toma mi mano.
No digo nada. No puedo, lo amo, lo amo como una completa desquiciada y me siento toda una idiota alejándolo de mi.
Primero quería su atención, quería que me viera, quería que me amara, y ahora que me está viendo como mujer, que me presta su total atención y que posiblemente me quiera, lo hago a un lado... ¡Quien me entiende! No lo sé, ni siquiera yo.
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El Diario de Serena Tsukino
Fanfiction¿Cómo me he enamorado de alguien que no me ama? Como me duele tanto la inferencia, siento que estoy dejando de respirar del dolor que me causa saberlo ajeno, de saber que nunca podrá ser mío. Saber que no me ama es el peor sentimiento que he tenido...