El Diario de Serena Tsukino

Capítulo 23

Querido diario:

Estoy con la la cabeza hecha un lío.
He ido a ver a Michiru, si, he tenido que ir a verla para quitarme las dudas. Sé que nada tendría que hacer yo con ella, pero siento que no puedo continuar con Seiya mientras sienta esta inseguridad.

Su cara al abrirme la puerta fue la de un poema.

- ¿Serena? ¿Qué haces aquí?

- Hola Michiru ¿Puedo pasar?

Siente y se mueve para dejarme entrar. Me dirige a una pequeña sala y tomamos asiento.

- ¿Y bien? - se nota que le molesta un poco verme aquí.

- Michiru, necesito preguntarte algo...

- Dime.

- ¿Por qué decidiste darle mi carta a Seiya? - la cara se le descompone - o más bien ¿Cómo fue que llegó a su manos? - espero que me diga la verdad.

- Serena... - guarda silencio y se revuelve incómoda en su asiento, pero luego continúa - La tomé por casualidad. No solía hurgar en sus cosas pero al ver el remitente llamó mi atención.

- ¿Y luego?

- Bueno, pues la abrí y la leí.

- Supongo que no querías que él la viera y la ocultaste.

- Sí - baja su cabeza apenada - pero luego recapacité y se la di.

- Luego, cuándo ya habías decidido que no querías estar con él - comento molesta.

- No lo tomes así, yo amo a Seiya...

Mis ojos se abren tanto que siento que se van a salir de sus órbitas.

- ¿Lo amas?

- No te lo voy a negar, pero amo en igual manera a Haruka. Por eso decidí alejarlo. Seiya es un gran hombre que no se merece que yo le haga eso...

- Creo que el sentimiento de culpa te llegó demasiado tarde ¿no crees? - la increpo - antes, te daba lo mismo.

- ¡Claro que no! - se molesta - No puedes juzgarme, no sabes como me sentía.

- Mira Michiru, solo quiero que me digas una cosa - estoy comenzando a desesperarme - Si en algún momento te arrepientes de haberlo dejado ¿volverás a buscarlo? ¿Le pedirás que vuelva contigo?

Guarda silencio.

- Me lo imaginé - chasqueo la lengua - siempre es la misma historia contigo.

- No Serena, no lo buscaré, lo amo mucho y quiero que sea feliz. Por eso le di tu carta, siempre he sabido que tú lo amabas, no importando que estabas casada - remarca la última palabra.

- Me estoy divorciando, pero eso no es asunto tuyo - le dedico una mirada inquisidora - creo que tú tampoco deberías de juzgarme.

- Serena... - suspira - ¿a dónde quieres llegar?

- A que no quiero que el día de
mañana despiertes y te des cuenta que quieres a Seiya devuelta.

- Tienes miedo... - asegura.

- ¡No quiero sufrir!

- ¿No estás segura de él?

- Ha vuelto tantas veces a ti que es lógico que me sienta de esta manera.

- Serena, entiendo tu miedo hasta cierto punto, pero no lo justifico. Seiya es un magnífico hombre y si él te ha buscado es porque tiene sentimientos por ti. Yo no me pienso meter.

No le creo completamente.

- Eso espero Michiru. Ya bastante difícil es mi situación como para encima tener que cuidarme de ti.