Mis mejillas arden. Seguro que lo
ha dicho para encontrar mi debilidad, me esta retando. Aunque ahora no están molesto. Incluso puedo decir que es divertido. Su presencia es agradable. Pero ahora no es momento de pensar en eso. Tengo una persona muy importante que esta a punto de dejar este mundo. Y quiero hacerlo como se merece.
—Enserio, tengo que irme.
—Me voy contigo.
—Aian.
—Sabes que si me dejas aquí iré detrás de ti.
—¡Déjame en paz! ¡No quieras saberlo todo de mi y mucho menos pensar que significas algo en mi vida! Eres alguien que se cruza en mi camino, nada más.
Me deshago de su agarre y salgo de la habitación. Mis pensamientos están con aquella persona que me necesita. Mi abuela. No hay tiempo de pensar en él y lo que significa para mí. Esta semana va a ser muy dura.... Todavía siento el calor de su mano en mi piel. Como me había retenido. Como le he hablado. Me he pasado un poco pero tengo que irme. Por mi abuela. Me encuentro a Janni en la sala de espera. Esta observándome. Sé lo que significa eso. Sospecha que algo hay raro en mí. Siempre tiene esa mirada.
—Necesito que me lleves a casa. –ella alza la ceja–. Es urgente.
—Esta bien.
Agradezco hacia mis adentros que Janni no haya preguntado nada sobre mi extraño comportamiento.No me gusta ocultarla cosas pero tampoco quiero alarmarla. Es una carga que debo soportar yo sola.
Después de media hora ya he terminado mi maleta. Todos estamos listos para salir. A mi madre me ha costado sacarla de casa porque no paraba de gritar "Me van a encontrar. Son muy listos. Me van a matar. Y a ti también. Eres hija del pecado." "Hija del pecado".
Ahora que estoy más o menos familiarizada con el tema de los ángeles y ese nuevo mundo me da miedo escucharla. Después de todo mi madre había dicho cosas sobre ellos. Puede que tenga razón. Que sea la hija del pecado aunque no sé muy bien a lo que se refiere.
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El amor del odio
Teen FictionNo hay mucho que contar sobre de mi vida. Guardo rencor a un idiota hizo que mi existencia fuese más dura de lo que ya era. ¿Lo peor de todo? Que no puedo olvidarle y creo que jamás lo haré y gracias a él he aprendido a no confiar en los hombres, ni...