Cautivame

Capitulo 23: Esto es guerra

— ¿Y como se supone que Alejandro va a odiar a Isabella si está idiotizado con ella?

Jugando con la pajilla de su bebida Meredith encogió los hombros.

— Pues..., puede que uno de sus familiares tenga un pequeño accidente por culpa de Isabella.

Anabel se quedó callada algo espantada. Su maldad todavía no llegaba al odio e indecencia de Meredith.

— ¿Serias capaz de lastimar a otros de esa manera?

Meredith chasqueo la lengua con burla

— ¿A ver qué acaso no es lo que tú estás haciendo con Isabella?  No te las vengas a dar de santa ahora nena. Mejor escucha aprende y triunfa. Dentro de ese sobre tienes la arma para separar a esos dos pero tienes que saber cuándo y cómo usarla porque podría ser una arma de doble filo.

Anabel abrió el sobre y junto a una nota había un casete. Algo confundida preguntó mirándolo curiosa.

— ¿Y que se supone que es este casete?

— Alejandro y yo tenemos unos amigos en común aunque él no lo sabe y yo me enteré hace unos días. Resulta que Alejandro se ha casado con Isabella por ganar una apuesta. Lo retaron a enamorar y casarse con ella durante un año a cambio de dos millones. Cuando mi querida prima se entere de eso va a quedar destruida. En ese casete está la confesión de ellos cuando hacían la apuesta. Uno de ellos lo grabó sin que Alejandro se diera cuenta.

Anabel se sonrió sintiendo que por fin tenía el arma que necesitaba en sus manos. Pero no comprendía que la maldad que comenzaba a sentir más que dañar a Isabella comenzaba a acabar con su esencia. Con su alma. Decidida a no volver a ser la pobre víctima a la que nadie quería y todos rechazaban, había decidido dar el paso a ser alguien sin sentimientos con tal de no perder lo que ella creía suyo.

— ¿Te puedo hacer una pregunta?

— A ver, que quieres saber

— ¿Por qué tienes tanto odio contra tu prima?

Meredith se cruzó de brazos suspirando algo incomoda

— Esa perra no solo me robó el cariño y la atención de mi madre, Tambien me robo al único hombre que me ha interesado, al único que realmente he amado. Ella lo sabia, aun asi se metio con el, le dio esa bastarda por hija que ojala y nunca aparezca. Ella lo ha tenido todo en esta vida, todo, lujos, dinero, apellidos, pretendientes y precisamente se metió con el. Va a pagarlo y tu, tu vas a ser la carnada perfecta para mi venganza.

Anabel algo enojada argumento

— No soy tu juguete, ni tu utensilio Meredith, tu no me quieres ayudar, solo usarme.

— Ay por favor seamos claras corazón, no somos amigas. Tu me estas usando también para conseguir a Alejandro, bien pues yo consigo contigo mi venganza. Deja los sentimentalismos a un lado porque no vas a llegar a nada y menos con un hombre con Alejandro, me buscas cuando tengas algo hecho y no solo vengas a llorar y a pedir ayuda.

Sin decir mas, Meredith se levantó de la mesa dejando la cuenta paga. De los ojos de Anabel brotaron lágrimas doloridas. No sabia que hacer, su corazon se habia dividido en dos sentimientos totalmente opuestos, en odio y amor. Abrió el sobre mirando el usb. Secando sus lágrimas miró la nota y comenzó a leerla.

De: Jordan Montella
Para: Alejandro Harrison
Fecha: 03 de marzo de 2018 4:50pm
Asunto: Apuesta

¡Saludos Alejandro!

Te escribo para recordarte que aun no vemos acción con respecto a nuestra apuesta. Muero de ansias por ver cómo te tragas tus palabras, a esa mujer no hay quien la case y mucho menos enamore, Es más no hay nada de atractivo en ella. Creo que terminaras debiendonos esos dos millones "bro"