El anillo de Cleopatra I Tg

Sin anillo

Andrés no podía dejar de sentirse como una persona completamente distinta. El rose de las medias que cubrían sus piernas  le recordaban nuevamente esa sensación de ser Andrea apretando la pequeña falda con sus piernas. Mientras jugaba con un bolígrafo haciendo rotar la silla de un lado a otro con sus caderas, observó la mirada de odio de ** ante la prepotente actitud de Andrea.
Andrés con una sonrisa de confianza agarró el anillo que colgaba en sus pechos mientras pensaba

- Podría usar el anillo para cambiar esa cara pero creo que la estoy disfrutando.

Andrés se levantó lentamente de su silla y comenzó a caminar de una manera provocativa hacia **  como si le sobrara el tiempo. El sonido de sus tacones acompañaba una mirada entre las dos chicas. Andrés por primera vez sentía ese gusto de sentirse envidiada por otra chica y el anillo le daba la confianza de lucirse de manera prepotente ante cualquier persona.

Al llegar a su oficina, no pasaron ni cinco minutos cuando sonó un golpe en su puerta. Era Julián como si fuera cualquier otro día informándole sus pendientes. El escritorio de Andrea era abierto, descubriendo sus torneadas piernas, pues desde un principio la intención de Julián era poder disfrutar en el momento de entrar.

Andrés estaba consciente de eso y con intenciones burlonas cruzó una pierna para dejar ver un poco más. Aunque no tenía el anillo, el cuerpo de Andrea entorpecía a cualquier hombre, algo que Andrés disfrutaba cada vez mas. Julián no podía fingir su asombro ante tremendo espectáculo, intentando disimular subió la mirada lentamente hacia los ojos de Andrea, quien le esperaba con una mirada seductora haciendo que Julián se incomode y se vaya.

Andrés con la seguridad del anillo, solo se divertía en la oficina, durante todo el día caminaba por aquellos pasillos donde se sentía observada, para disfrutar y reírse de la incomodad que producía al reaccionar inesperadamente ante los patéticos intentos de ligar de sus compañeros pues nadie se sentía con la confianza de seguir ante sus seductoras respuestas.

Sin el anillo, Andrés podía ser la reina del lugar, el hecho de sentirse inalcanzable generaba mas placer en Andrés. Algo que con su cuerpo original nunca lo hubiera logrado. Con sus conocimientos profesionales y sus seductores encantos, había sido un día muy productivo con nuevos clientes, pues todos eran hombres había sido fácil para Andrea convencer a los clientes una negociación favorable para para la empresa. faltando pocas horas para salir, llegó una pareja accionista  junto a Alicia. 

Alicia aunque tenía una cara de haber llorado por la desaparición de Jorge, estaba muy atenta con la pareja. Esta pareja Accionista era muy sonada en la ciudad, ciendo una de las mayores influencias del País. Alicia con un vestido corto pero elegante iba mostrando las oficinas del lugar y conversando los avances hasta que vio a Andrea. La mirada de Alicia era distinta, pues Andrés se había acostumbrado a esa mirada de respeto que le brindó la ultima vez. Casi ignorando la presencia de Andrea, Alicia decidió continuar. Andrés sabía que era muy importante usar el anillo ante esta situación tan inesperada. Pues olvido que al dejar de usarlo la magia desaparecía sin importar la distancia, mientras retiraba el anillo del collar pudo sentir una mano que lo tomaba sin previo aviso. 

- Mira amor que lindo anillo - Dijo la accionista a su esposo

- Me gusta como se ve 

La chica era una joven modelo de 24 años, de familia pobre pero su presencia podía competir con Andrea, pues tenía un cuerpo espectacular, razón por la que había conseguido un hombre de 35 años adinerado. La falta de educación de la chica fue suficiente para tomar el anillo sin preguntar. Era de esas mujeres caprichosas que siempre recibían lo que querían. 

Andrés asustado no sabía como quitarle el anillo. La chica se lo había colocado en el dedo y nadie hacía nada al respecto. Alicia mostraba indiferencia y el esposo de la hermosa chica aceptaba todo lo que hacía.