Conversando y asimilando

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Andrés despertó con un pequeño rayo de luz apuntaba a sus ojos indicándole que ya era de día. Notó que no estaba en aquel club, estaba en una habitación grande iluminada y algo lujosa, confundido quiso pensar que todo fue un sueño y que seguía en aquel hotel de Egipto. unas sabanas blancas cubrían  su cuerpo, mientras intentaba asimilar las cosas, se descubrió lentamente y notó que su cuerpo seguía con aquel vestido rojo de ayer.

- Que hice ayer

- ¡todo se salio de control!

- Porque sigo como Andrea - Dijo Andrés mientras miraba su cuerpo

Un destello trajo a su mente todo lo que sucedió agitando a Andrés. Sus manos tocaron inmediatamente  sus labios con una mirada confundida intentando recordar.

- Yo - mi- un beso

- Mi primer beso con Jorge

La cara asusada de Andrés poco a poco se fue convirtiendo en una cara de emoción mientras miraba a todas partes. La mano de Andrés bajo hacia su vagina notando que su ropa interior no estaba, mientras por un pequeño instante topaba su suave clítoris, recordó aquella noche.

- ¡Tuve sexo con Jorge!

-Hay dios, ¡no puede ser!

Andrés estaba confundido, asustado y emocionado mientras tapaba su boca con sus dos manos.

- No se si estar feliz o asustado

- Puedo sentir que Andréa esta feliz

- pero...

- Yo... Acabo de tener sexo con un hombre y siento que lo disfrute

- Siento que fue lo mejor que ha pasado en mi miserable vida

- ¿ si soy Andrea debo sentirme cómodo con esto?

- ¿Que es lo que siento abajo?

- Creo que son los rezagos del sexo e ayer.

- sexo... Que extraño que se escucha eso, sabiendo que a mi fue al que le dieron.

Entre pensamientos de Andrés intentando asimilar todo, se escucho la puerta de la habitación abrir. inmediantamente se tapó con las sabanas mientras disimuladamente se bajaba el apretado vestido que se fue subiendo mientras recordaba.  Era Alicia vestida con una elegante bata de dormir y en sus manos llevaba una bandeja con un jugo de naranja y tostadas con acompañantes.

- Hola hermosa, ¿como estas?

- Espero que lo disfrutes, lo hice con mucho esmero para ti.

- Jorge aun esta durmiendo. Ayer llego asustado a casa contigo en brazos

- Se quedo toda la madrugada a tu lado hasta que tu le diste un beso diciendo que estabas bien.

Andrés con una cara confundida no recordaba esa parte, pero lo ignoro mientras comía el mejor desayuno que ha probado en su vida.

- Cuéntame, ¿que paso ayer? - Dijo licia acomodándose en un sillón con su mano en la mejilla.

- Mis amigas me contaron todo

Andrés se asusto, esperando un chisme o una mala opinión por parte de Alicia. Una sonrisa picara salio de Alicia.

- Me lo contaban con mucho respeto hacia ti y siento que así debe ser. 

- Me encantan las mujeres atrevidas como tu.

- Te admiro mucho

- No se como haces que algo tan vulgar sea mágico - Dijo Alicia con un suspiro

-¡Perdón si te estoy ofendiendo!. - Hablo Alicia con cara de susto.

Andrés, inmediatamente subió su mano para ver su dedo, y efectivamente el anillo seguía ahí. Sabía que la amabilidad y respeto de Alicia era por el anillo. El temor de Andrés estaba presente, no sabía como reaccionaría Alicia sin el anillo.

- Si me retiro el anillo las cosas se van a poner mal, Pensaba Andrés con sus dedos tocando el anillo.

- Debo controlarme si no quiero tener que usarlo siempre.

Sonó nuevamente la puerta, esta vez era Jorge con cara de agotamiento.

- Hola princesa - Habló Jorge con una cara de incomodidad por la situación de ayer.

Andrés no podía evitar sonreír, Al ver a Jorge sentía como todo se volvía mágico, sus pupilas de dilataban y su respiración aumentaba sutilmente. 

- Hola mi rey amado.

Dijo Andrés sin pensar lo que decía. Jorge no le presto mucha atención a sus palabras mientras miraba a Andrea con el mismo amor. Jorge se acercó hacia Andrea y le dio un pequeño beso en sus labios, intentando ignorar todo lo qué pasó ayer.

Andrés no estaba acostumbrado a esos besos, haciéndole recordar que era un chico besando a otro chico. Jorge se retiró por un momento a recoger los platos del desayuno de Andrea.

Andrés miraba como el vestido rojo apretaba cada parte de su cuerpo formando aquella silueta perfecta que a gritos decía que era una mujer.

-Todo esto es muy rápido - pensaba Andrés

- Hace unos días era un chico normal sin pensamientos gay

- Hace unos días era un hombre

- Hace unos días no sabía que si no fuera por el anillo mi vida sería una desgracia.

- Tal vez esta es la moneda agridulce que tengo que pagar.

-Me hubiera gustado tener este poder como un hombre.

-Sería el macho alfa.

-Sería como... Jorge - Las manos de Andrea se ubicaron en sus mejillas. 

- Tan varonil y poderoso con esos músculos que me vuelven loca.

- Mierda - creo debo aprender a aceptar esta vida.

- Cada vez siento que me dejo llevar mas por el anillo y...

- no...

- no esta mal pero aun no me siento del todo cómodo.

Un recuerdo pasó por la mente de Andrés.

- Que hora es - Pregunto Andrea

- las 7:15 - dijo Alicia

Era sabado y Andrés sabía que su mamá iba a llegar a casa en pocas horas. Se levanto acomodando el vestido  y comenzó a agarrar sus cosas con apuro, Sabía que debía llegar a limpiar todo y esconder los rastros de Andrea.

-Debo irme a casa - dijo Andrea

- Porque no te quedas un rato mas - Preguntó Jorge

Aunque Andrés deseaba quedarse con Jorge para siempre, sabía que la realidad era otra, no podía descuidar a su familia y aunque tuviera el poder del anillo, no se sentía cómodo manipulando a las personas que mas quiere. Andrés quería un día normal como los viejos tiempos donde todo parecía ser mas tranquilo.

Mientras Andrea se colocaba los tacones que llevo esa noche, Jorge notando el apuro, no quiso ofrecerle mas ayuda y tomó las llaves del auto para llevar a Andrea a su casa. Al levantarse Andrés pudo verse en el espejo y seguía igual de radiante que el día anterior, su cara y cabello apenas se veían descuidados, pero era algo que solo Andrea podía notar. Alicia al ver a Andrea se dio cuenta que no necesitaba nada y le dio un abrazo de despedida.

- Espero conocer pronto a mi nuevo sobrino dijo Alicia en tono de broma.

- ¡Quee! pensó Andrés con una cara de terror.

El anillo de Cleopatra  I TgDonde viven las historias. Descúbrelo ahora