Al llegar a la enfermería me paré en seco, ya que escuché hablar al profesor Snape con la enfermera.
-¿Qué tal se encuentra ____, señorita?- preguntó Snape educadamente.
-Bueno... se ha dado un golpe demasiado fuerte, ahora mismo está en un estado de coma profundo- respondió esta.
-Bueno, tengo esperanzas de que despertará, ella es muy fuerte.
-No creo que salga de esta, profesor.
En ese momento el mundo se me vino abajo.
No podía imaginar que la persona a la que más quería se fuera. No todavía.
En ese momento, empujé sin querer la puerta, y las dos personas que estaban dentro de la enfermería se giraron y me vieron en mi más vulnerable estado:
Llorando a mares.
Ya no podía esconder más lo que sentía por ella, ya no podía hacer como si lo que sentía en el estómago cada vez que estaba a su lado se fuera a ir algún día.
No podía negar que me encantaba todo de ella...
-Señorito Malfoy- dijo Snape algo... ¿preocupado?
Yo, dado al estado en el que me encontraba, no pude hablar, simplemente negué con la cabeza, intentando convencerme de que todo esto era falso.
-¿Ha escuchado la conversación verdad?- dijo la enfermera agachando la cabeza con pena.
Yo simplemente asentí y nuevas lágrimas descendían por mis mejillas uniendose a las demás que se habían quedado ahí.
En ese momento Snape dijo algo que me extrañó bastante de él:
"Duerme con ella, seguro que necesita tu apoyo"
Me dio unos golpes en mi espalda para después marcharse por la puerta.
Pomfrey simplemente me guiñó un ojo y fue hacia un cuarto para dejarme solo con _____.
Me acosté a su lado quedando los dos cara a cara.
Me puse a buscar imperfecciones en ella, pero por más que buscaba no encontraba ni una, era imposible.
Es hermosa.
-____, sé que no me estarás escuchando seguramente, tal vez por eso estoy aquí hablándote sobre esto... desde el primer día en el que te ví supe que eras muy importante para mi. Llevo buscando el amor durante toda mi vida, y cuando te ví delante de los baños supe que eras la indicada... simplemente quiero que sepas, aunque no te esté hablando realmente, que te amo con todo mi corazón, y eso nunca va a cambiar...- no paraba de sollozar, me dolía muchísimo pensar que podría no salir de esta, pero sabía que, por muy minúscula que fuera, habia posibilidades de que siguiera viendo sus hermosos ojos todos los días de mi vida, y mientras siga ahí, me pensaba aferrar a eso.
-Buenas noches ____, te-tequiero...- le dí un beso en la frente y apreté mi mano contra la suya. Y así me quedé dormido, junto a la persona que más quería en el mundo.
(...)
Había pasado un mes y yo no dejaba de visitarla.
Dormía con ella casi todos los días. Ya se había vuelto una costumbre.
Todos los días rezaba a Merlín por que la dejara vivir un poco más, le decía que yo la iba a cuidar, pero cada día ella empeoraba.
Las probabilidades de que viviera habían bajado un 50% según la enfermera.
Yo ya no sabía vivir.
No comía, no dormía, y solo salía de mi cuarto para ir a verla o a clases, y en estas ni si quiera prestaba atención.
Mis notas habían bajado bastante, pero no me importaba.
Lo único que quería tener era a ella, y ver sus cosas en la habitación cada día era como si me clavaran 20 estacas.
Un día como cualquier otro, fui a verla. Al llegar alcé la vista y busqué la camilla de _____, pero esta no estaba por ninguna parte.
-¿¡Dónde está____!?- pregunté agitado a Madame Pomfrey.
-Cariño, se la han llevado a San Mungo. Ella... esta muy mal...
No me lo creía, empecé a llorar. Creo que en mi vida había llorado tanto.
-No me mientas, ¡ella no va a morir!- dije estallando en un mar de lágrimas.
-Cariño... ¿quieres ir a verla?- yo asentí aún llorando.
Fué a otra habitación a buscar algunas cosas, mientras me dejaba tiempo para relajarme antes de ir.
Cuando volvió llevaba polvos Flus en la mano, y esa fué la vía por la cual llegamos al hospital. Cuando la vi en la camilla, tan vulnerable, tan perfecta... se me revolvieron las tripas.
-____, sé que no te gusta que te digan estas cosas, porque siempre decías que eran noñadas- recordé sonriendo- pero para mi eres mi princesa- dije llorando.
Me acerqué a ella y le dí un beso en los labios, deseando que no fuera el último.
Había sido el beso más tierno que había dado nunca. Lleno de tristeza y amor.-¿Recuerdas el libro?- dije con una sonriza triste al saber que no me contestaría.
Verla así me estaba matando, así que decidí marcharme. Me dí la vuelta y fui a seguir mi camino cuando...
ESTÁS LEYENDO
Mi princesa Slytherin
FanfictionEres _____(TN), una chica de 14 años de lo más normal. Todo cambia el día en el que te llega una carta un tanto extraña, la carta que daría un giro drástico a tu vida. De la nada aprenderás todo sobre el mundo de la magia, harás nuevos amigos, y te...