Mas allá del Odio [ZaDr]

Capitulo Veintiuno: Sorpresa.

¿Por qué todo tenía que terminar así? ¡Esta cruel falla lo estaba rompiendo!

Enojado, frustrado y sobretodo decepcionado, una escalada de sentimentalismo humano se estableció en el pak tecnológico del irken, cada experiencia, palabra y acción era almacenada en el núcleo para ser procesado y utilizado para un futuro, una clara e interminable fuente de información, pero este no era el caso. Un "humano" con problemas de piel, recorría las calles extrañamente desiertas de esa inmunda ciudad en camino a su base, no dejaba de pensar y procesar lo que le menciono el humano. Sin embargo no podía entenderlo, esa "moralidad" humana no lograba sentirla o definirla, era algo desconocido para el.

¿Por que era incorrecto asesinar?  No lo comprendía, en toda su larga existencia siempre obtuvo lo que quiso usando cualquier método que se le ocurriera: Golpear, lastimar, chantajear y asesinar. Toda opción era viable sobretodo para la guerra y la invasión.. Pero... ¿Por qué hizo aquello? ¿Por que asesinó a un humano? Aún no lo entendía completamente, si tuviera que usar alguna expresión para ponerlo en palabras, sería "instinto" o "naturaleza" fue completamente nuevo en el. Cuando reaccionó en sí mismo, tuvo el asqueroso y sucio cuerpo humano entre sus garras, sólo al reaccionar con aquella mirada de pánico y desesperación del "cabezón" se percató de su acción....

¿Cómo evitar sentir orgullo, satisfacción y una desenfrenada emoción?

El tenso caminar del extraterrestre fue interrumpido por un fuerte grito cargado de desesperación, acompañado de unos insultos en el idioma irken salieron en forma de gruñidos..

¿Cuándo fue que olvidó la simpleza del exterminio?

Una rara e inadvertida implosión resonó e iluminó tenuemente el cielo, interrumpiendo sorpresivamente la rabieta al alíen que levantó la mirada llena de curiosidad al cielo, con algo de dificultad pudo divisar un crucero boot que caía a toda velocidad cerca de su ubicación, esto alarmó al irken. Dejando sus problemas con la humanidad y razonamientos aun lado, activo su pak para sacar dentro de esta un intercomunicador, solo espero unos cuantos segundos para ser contestado por su fiel sirviente robot, Gir.

- ¡AMITO! ¿Esta con Mary? =D

- No. -sentenció enojado- Escúchame bien Gir, tengo órdenes para ti.

- ¿Me dará taquitos? 0u0

- ¡NO! ¡GIR! -gruño- Ten una estricta vigilancia la base y que NADIE entre al laboratorio. -ordenó comenzando a caminar- ¿Entendiste?

- ¡Si señor! -contestó firmemente con sus ojos rojos- Como ordene.

Satisfecho con la respuesta de su asistente cortó la llamada y guardo rápidamente el intercomunicador en su pak para empezar a correr en dirección de la nave. Ya era de noche, el cielo estaba completamente oscuro y las calles continuaban extrañamente vacías, casi todos los humanos estaban encerrados en sus casas consumiendo entretenimiento barato o en modo de sueño, esto favorecía al alíen que una vez cansado de usar sus piernas, uso irresponsablemente sus extremidades robóticas para llegar a su destino con más rapidez.

Estaba sumido en una curiosidad mortal, varias opciones recorrían la mente del irken, podría ser Tak quien volvió para vengarse por ser vencida y echada como basura del planeta, o podría ser su antiguo jefe de Comidortia para obligarlo a volver a su antiguo trabajo de comida rápida o en su defecto algún irken con la misión de conquistar la Tierra. Ninguna opción era buena, ni tranquilizadora, en el peor de los casos sería una misión de completo exterminio para convertir el planeta en un estacionamiento barato donde los irkens lo utilizarían con poca frecuencia.

Intentó distraer su mente con la motivación de que podría resolver lo que sea que sucediera, cuando quiso darse cuenta llego a lo que al parecer era una zona abierta y boscosa, poco habitable por humanos rodeado de árboles y naturaleza en proceso de putrefacción, solo era cuestión de tiempo. Desactivo sus extremidades para acercarse un poco más y observar con sus propios ojos aquel crucero boot que contenía algunas llamas tenues de fuego, moderadamente destruido y colapsada con fuerza en el terreno.

Con suma desconfianza decidió seguir adelante, caminó unos cuantos pasos más hasta estar a una distancia prudente de la nave, analizaba cada detalle de esta, sin duda se trataba de una nave del imperio irken. Eso era mala señal, sin duda era un modelo actualizado lo cual permitió dudar si se trataba de Tak, no dudo ni un segundo en tomar todas las precauciones necesarias para ella.

"¿Qué sucedería si te digo....

Sin embargo cuando el extraterrestre se auto-impuso a enfrentarse con una falsa idea de lo que se avecinaba en su vida, se encontró con algo completamente diferente.

... Que las cosas pueden cambiar aún más?"

Apartando algunos escombros y levantándose con facilidad, se pudo distinguir un extraño y raro irken de unos extravagantes ojos azules, acompañados de unas antenas levemente dobladas con un típico uniforme irken pero desafiando a su color original al ser cambiado por una gama de azules, guantes y botas negras. Zim ladeo la cabeza completamente absorto y confundido con la apariencia del nuevo irken en el planeta, le hacía recordar a alguien, pero no sabía con exactitud a quien, nuevamente esa "falla" hizo tambalear el "squeedly spooch".

Lamentablemente no pudo procesar la información demasiado rápido, ya que cuando quiso reaccionar para hacer algo, ese extraño irken estaba a su lado, analizándolo de arriba a abajo con una fría mirada y una expresión impasible en su cara. Por inercia, el falso humano se alejó unos cuantos centímetros de él, necesitaba hacer algo en ese preciso momento, ¡Él era el poderoso Zim! ¡Nadie jamás lo intimidaba! ¡Él era quien mandaba! Llenándose de determinación y orgullo, impuso su presencia para enfrentarse a lo desconocido, nadie volvería a burlarse de él.

- Mmph.. ¿Que haces en este planeta, irken?

Y así es como los verdaderos problemas comienzan.