DOBLE ALFA | Larry Stylinson

9. Dahlias

09:00 – 09 de Enero, 2150

—¡Sarah! —el alfa alcanzo a la omega que ordenaba su casillero.

—Ahora que quieres — dijo fastidiada por la insistencia del alfa, tomo unos cuantos libros para acomodarlos por tamaño.

—Solo quiero preguntarte algo.

—Si así dejaras de seguirme.

—¿Te sigue gustando Styles? —la omega tapo la boca del alfa dejando caer sus libros.

—¿Qué demonios te pasa? —susurro enojada.

—Lo supuse. Bueno, entonces sabes que está muy interesado en alguien.

Lo miro intrigada— ¿Quién? —preguntó un tanto molesta.

—El nuevo, Tomlinson.

—¿Él? ¿Enserio? Pero es un hombre— dijo incrédula.

—Sabes que su aroma es mucho mas... provocativo, pueden volver loco a cualquier alfa, si así lo quieren y más si están por entrar en celo —el alfa dijo con cizaña.

—Quizás solo quiere una noche con él y ya, lo normal, permiso —cerro su casillero comenzando a caminar.

—Me entere que lo vieron comprando un gran ramo de Dahlias y no creo que sea para ponerlas de adorno —menciono a sus espaldas.

La omega se detuvo en seco— ¿Que? —pregunto incrédula y se giro para encararlo— Las Dahlias son el comienzo del... cortejo —recordó triste.

—Sí —el alfa sonrió para sus adentros cuando noto que obtuvo lo que quería.

—¡No puede hacer eso! —sintió su corazón estrecharse junto al amor no correspondido que sentía desde que era una pequeña niña que recién aprendía a convertirse, a lo que Edward le ayudo cada día hasta que lo lograra, siendo tan amable como solo el podía serlo— No quiero que pase, no va a pasar.

—Yo tengo una idea, bueno si estás interesada, yo te ofrezco mi apoyo sincero para ayudarte con tu gran amor —fingió interés.

—¿Qué quieres hacer? —pregunto con la mirada distante, enfocada en lo que sentiría si Edward se enlazara.

—Creo que sabes que Tomlinson vive con un beta, Horan. Al parecer esta a cargo de él, alguien escucho al beta contarle a Malia que debía ir por supresores, porque como te dije el omega podría entrar en celo y que es primordial inyectarlo.

Esta vez capto su atención —Eso no tiene sentido, aquí hay supresores.

—Lo sé, es extraño, es algo que luego averiguare. Como te decía: al parecer esos supresores son muy especiales y tiene alterado al beta, es como si debería si o si inyectarle. Lo que quería proponerte era desaparecer esas inyecciones.

—¿Y cómo demonios me ayuda eso a mí? —dijo ya hastiada de los misterios del alfa.

El alfa sonrió malicioso —Si no llega a inyectarse dudo muchísimo que lo deje ir con Edward a su primera cita, por eso cambiaremos la inyección, notará que algo anda mal y no lo dejará ir, al parecer el beta no confía en nadie, mucho menos lo dejará ir con Styles.

—Oh entiendo, si tienes razón en la junta que hubo Niall estaba muy pendiente del omega. Incluso se lo llevo de inmediato cuando muchos percibimos que estaba al comienzo de su celo —miro hacia un lado, pensativa— ¿Y cómo se supone que obtenga esos supresores sin que el beta lo note? —el alfa consiguió lo que quería.