Louis tiene un secreto por el que no quiere ni debe tener un alfa, no quiere ni debe tener una mordida, su padre le había interpuesto esa condición para cederle su libertad, sus padres y Niall lo querían proteger de todo mal, pero hay algo de lo que...
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—¿Tu hermano?
—Sí, el de ahí —señaló con un breve movimiento de cabeza al enorme lobo negro de brillantes ojos verdes, con un tamaño sorprendentemente similar al de su padre, sus filosos dientes sobresalían de su hocico sin quitar ni un solo momento la mirada de Ray.
—¿Por qué vienes a ver a tu hermano hacer esto? —Louis no podía quitar la mirada de la fosa, según lo que había visto en la pelea anterior sabía lo que le esperaba al hermano del alfa.
—No me preocupa —respondió tranquilo—, ha peleado con lobos más grandes que él tal Ray.
El omega sintió su mirada encima de él, haciendo quemar sus mejillas —Bueno, creo que si tú le tienes esa confianza, él estará bien. —dijo evitando la acalorada mirada del alfa sobre él.
—TRES. DOS. ¡POR SU HONOR!
Ray intentó atacar el cuello de Harry sin mucho éxito, dándole la ventaja al lobo negro de arañar su cuello alejándose al instante, el campeón invicto gruño intentando usar su voz en el de ojos verdes, pero a este no le tembló ni un solo músculo, gruño incluso aún más fuerte, haciendo temblar el corazón de Louis, su omega temía.
—¡RAY! ¡RAY! ¡RAY! —el público animaba al líder de Wembley, pero la realidad era otra, en medio de gruñidos, rasguños y mordidas, el gran lobo de pelaje negro logró poner debajo a su oponente, mordiendo su pecho para después alejarse al instante, el aullido de dolor del lobo café retumbo en el oído de todos los presentes, especialmente en los de Louis.
—¡HAY UN NUEVO LÍDER ALFA EN WEMBLEY! —la beta corrió dentro de la fosa, inclinando la cabeza en modo de respeto ante el lobo negro— ¡HARRY STYLES! —el público celebró al nuevo líder entre aplausos y silbidos.
Niall estaba concentrado muy entusiasta celebrando con los demás.
Louis se balanceó a los lados con una mano sobre su flequillo intentando calmar el mareo —Bueno, creo que no era lo que esperaba.
El alfa se atrevió a tomarlo por la cintura para abrazarlo notando lo afectado que estaba —Oh tranquilo omega, no está en tu naturaleza ver este tipo cosas, no deberías estar aquí.
Louis sintió como la calma volvía a su cuerpo por unos cuantos segundos durante el abrazo, hasta que Niall noto lo que sucedía.
— ¡Déjalo!— Niall empujó los brazos del alfa, acercando a su amigo en un abrazo —Lo dejo seis segundos y lo abrazas— los gruñidos que nacían en su pecho dio a entender que estaba realmente enojado.
El rizado los miraba sonriente, apartando la mirada hacia donde debía estar su hermano —Lo siento si te moleste, es que imposible ignorar tu aroma —explicó. El miedo e incomodidad de Louis había llegado hasta la profundidad de sus pulmones con un picor de molestia sin poder evitar el querer calmar al omega.
Niall esta vez sacó el gruñido que se guardaba —Tranquilo Niall —pidió el omega.
—Bueno, yo me retiró, tengo que entregar un traje —se levantó quedándose de pie un momento para admirar los zafiros del omega, que aún tenía los brazos del beta a su alrededor—. Eres un omega muy hermoso —se inclinó ligeramente—. Me despido... —esperó ansioso por saber su nombre.
