"Hoy puede ser un gran día, plantéatelo así...", canto mientras me miro al espejo. Tengo poco tiempo para arreglarme y salir corriendo, a una entrevista de trabajo que tengo, exactamente, del otro lado de la ciudad.
Dormí poco por la ansiedad, así que ahora tengo un arduo trabajo para convertir mi rostro de muerta viviente, en algo presentable.
Según me dijo mi tía, mi posible jefe es muy detallista y exigente. Así que quiero estar arreglada, pero sin pasarme con el maquillaje. Así que me concentro para maquillarme lo justo y necesario, para estar presentable y natural. La ropa es otro tema importante, tengo que ir bien vestida ya que es para un puesto de ama de llaves, cosa que no es lo mío, mi último trabajo fue de secretaria en un estudio jurídico; trabajo que perdí gracias a Marcos, mi ex. Pero no quiero pensar en él, ya bastante me amargó y me amarga la vida. Opto por una pollera tubo negra por debajo de la rodilla y que tiene un sugestivo tajo atrás y una camisa sin mangas de seda blanca, estamos en septiembre y ya está empezando a hacer calor, zapatos con taco aguja negros y el pelo recogido en un rodete casual. Creo que así voy bien
--¡Mamá! ¿Ya te levantaste? - le grito desde mi habitación.
-Estoy en eso-
-Dale, ya me tengo que ir-
Termino de guardar las últimas cosas en mi cartera, no me tengo que olvidarme la dirección, si bien no me puedo equivocar, ya que es el edificio más alto de la ciudad y el más exclusivo, no quiero empezar a dar vueltas por todo Puerto Madero preguntando.
-Acá estoy Amy Uauuu, estas hermosa, totalmente impresionante. -
- ¿Te parece? ¿No es mucho? -
-No amor, no te olvides que vas a ir a probarte para un trabajo en el edificio más caro de la cuidad, debe ser gente de muchísimo dinero. No podes ir mal vestida. Aparte cuando te vea le vas a encantar, vas a ver que el trabajo va a ser tuyo-
-Si sobre todo porque voy recomendada por la tía Elvira-
-No te menos precies sos muy competente, inteligente y muy linda-
-Si no me lo decís vos mamá, quien me lo va a decir-
-Te lo puede decir cualquiera que te conozca-
-Sigo pensando que me lo decís porque sos mi mamá y me queres- le doy un beso en la mejilla.
-Ojala pudiera ayudarte- me dice mi mamá como en un lamento.
-No empecemos sabes que ahora no podes, así que me toca a mí tomar las riendas, cuando te mejores vas a poder hacer lo que quieras. -
-No veo la hora que llegue ese momento, pero la verdad con lo que me cuesta el tratamiento no sé si va a ser tan rápido-
-Mira, la tía me dijo que en este trabajo pagan muy bien, así que si es así, en un mes estas empezando el tratamiento, de eso ponele la firma-
-Pero tampoco es justo que trabajes solo para pagarme el tratamiento-
-Hay muchas cosas que no son justas pero son así que nos tocó ésta y tenemos que seguir como sea. -
Me termino de acomodar la ropa, agarro la cartera y parándome enfrente de ella le digo:
-Deséame suerte, la voy a necesitar-
Mi mamá me abraza y me dice mientras que me aprieta contra su cuerpo:
-Te deseo toda la suerte del mundo, hija. Y si ese hombre es un poquito inteligente no va a dudar ni un minuto en darte el trabajo. Estoy muy orgullosa de vos-
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Alejandro [COMPLETA]
RomanceAlejandro es un joven arquitecto de 33 años, que tras la muerte de sus padres empieza a padecer de agorafobia, impidiéndole que pueda salir de su lujoso departamento. Contrata a Amanda como su nueva ama de llaves, una joven de 27 años, que está esca...