¡Darling! © YoonMin

🐣 TREINTA Y SEIS

—Oppa es tan masculino..

"Cállate y rasca mi espaldita."

—.. tan sexy y tan..

Bae suspira, removiendose entre los brazos de la chica que le cuida en esos momentos, mientras sus papis y su tíos lidian con el montón de hormonales.

Si tan solo no tropezara entre paso y paso o no fuese lo suficientemente tímido, él enserio saldría corriendo detrás de su papi JiMinie y le contaría sobre los deseos de aquella pervertida con su papá YoonGi.

Uh.

—Dime pequeño ¿no te gustaría un hermanito? —La voz chillona le hizo sentir realmente incómodo. —Porque puedo dartelo.

Bae sonríe, tratando de entender el fondo de esas palabras pero sintiéndose irritado.

Un pucherito se forma en sus gorditos labios, junto a las delicadas lágrimas deslizándose en sus mejillas. Esta dispuesto a iniciar un berrinche monumental que alterará el orden del staff.

Ella no le agrada.

—Shh, no llores.

Pero Bae no obedecerá, así que ignora la petición y suelta el primer gimoteo que es acompañado por varios otros.

El escándalo alerta a los demás y pronto hay personas a su alrededor, acariciando su espaldita o haciendo caretas para mantenerle feliz.

—¿Qué pasa dulzura?

Bae frota sus pequeños puños en sus ojitos cuando la dulce voz de su papi le alerta sobre su llegada.

Es su hora.

—Mieda, mieda.

Está seguro de que las miradas están sobre la nerviosa mujer que le sostiene y él no puede estar más feliz.

Aún con lágrimas secas en sus mejillas, el bebé oculta una sonrisa detrás de sus chiquitas y gordetas manos, mientras las miradas serias de sus papis y sus tíos se mantienen encima de la pobre infeliz.

Incluso su papi YoonGi parece haber olvidado que fue él quien le enseñó esa palabra.

Jiji.

Alguien perderá la cabeza.