🐣 CINCUENTA Y NUEVE

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Su papá DiMin esta recibiendo muchos ramos de flores y cositas bonitas. Es claro que él lo merece, porque es suave, bonito y siempre huele delicioso.

Su pechito es agradable y la forma en que siempre lo ve, hace que Bae sepa que es el bebé más afortunado de todos. Pero eso no quita el hecho de que se siente un poco celoso con todos esos obsequios de quien sabe quien.

Bae y papá fueron los primeros en felicitarlo, mucho antes de que el tío Tae amenazara con tirar la puerta abajo si no le abrían, pero era de madrugada y hacía tanto frío que fue ignorado.

Regresando al tema, es un bebé celoso.

¿Cuántas personas están intentando obtener abrazos de papi a cambio de esos obsequios?

Si pudiera, se los arrojaría en la cabeza.

El bebé suspira, tratando de enfocarse en el cubo de color en sus manos regordetas, pero se siente triste cuando su papi está hablando y riendo por teléfono, mientras su papá permanece fuera, haciendo no sé qué, que les mostraría más tarde.

Su tío JungKook le había susurrando que "eres un bebé consentido" y Bae le sonrió enormemente, solo para que ahora, en su pequeña e inocente cabecita, sienta que tal vez sí es muy consentido.

Bae quiere a sus papás. Quiere los abrazos, los besos y los mimitos de sus papás solo para él, sin importar si es el cumpleaños de alguno o no.

Su entrecejo se frunce y arroja el cubo que impacta contra la cabeza de su tío Arem, dormido sobre la alfombra a su lado.

Supuestamente le estaba cuidando como parte del día "solo para mimi"

El mayor no se mueve. Uf.

Esta vez su entrecejo se frunce y se arroja de espaldas, llorando cuando su cabeza rebota lo suficiente como para hacerle doler y porque además, ya tenía ganas de llorar desde hace horas.

No pasa mucho tiempo para que alguien le sostenga contra su pecho y aunque tiene los ojos cerrados debido a su llanto, puede escuchar el "bumbumbum" de alguien que está asustado.

Pobre tío Arem.

Pero el tío Arem no huele así como lo que le motiva a medio abrir los ojos y suspirar en medio de sollozos, solo para descubrir que está protegido en los brazos de papi, recibiendo palabras bonitas y caricias en su espaldita.

Bae se aferra con fuerza a la camisa de su papi y llora con más fuerza, porque está triste y feliz. Ambas emociones le aturden pero como sea, el aroma de papi le ayuda a sentirse más tranquilo y en paz.

Le duele poquito la cabeza y eso es triste para un bebé.

¡Darling! © YoonMin Donde viven las historias. Descúbrelo ahora